Love is like that...

Conociendo la verdad

La habitación era iluminada apenas por una luz amarillenta del único foco suspendido en el techo, un par de futones en el suelo en cada extremo, lo más alejados posibles, y una mesita al centro bajo la luz.

Los ojos lunas acababan de aguarse, esa reacción lo desconcertó, ella lo miró por unos segundos atentamente mientras se le aguaban. Luego pareció percatarse del hecho, inclinando la cabeza huyendo de su escrutinio. Sasuke tomó aire lentamente, intentando comprender la reacción femenina sin poder evitar la incomodidad que lo invadió.

Hinata para Sasuke era un completo embrollo, seguía sin entenderla y confiar del todo en ella, sin embargo, había aprendido que los ojos de la Hyuga eran demasiado expresivos, y en aquel momento parecía conmovida, se tensó al finalmente dar con el motivo, la cajita de cartón seguía frente a ella sobre la mesita de la habitación del hostal, ese debía ser el motivo.

Las pequeñas y blancas manos femeninas se posaron sobre la mesita, Sasuke aún seguía de pie. Ella por un momento pensó en hacer lo mismo pero no lo hizo, aún sorprendida y conmovida del detalle del moreno.

Hacía ya dos semanas que Anko los había alcanzado dándole una nueva misión al Uchiha y enviándola con él y llevándose con ella las plantas que habían recabado.

Muchas cosas habían ocurrido, desde su esperada menstruación en la fecha esperada, cuatro días después de haber estado con él, anunciándole que no se encontraba embarazada y manteniéndolos un poco alejados en el ámbito sexual por el sangrado. Pero mostrándole otro lado del moreno.

En un inicio se sintió cohibida, avergonzada y sinceramente confundida. Incluso tal vez desconfiada. Su menstruación le sirvió para poner un limite que necesitaba al descubrir varios de sus actos equívocos. A estas alturas podía señalar exactamente cuáles eran sus errores, pero también que tenía solo dos caminos, vivir por ese camino de amargura o intentar ver el lado bueno de la situación.

Había llegado la hora dolorosa de aceptar finalmente que Naruto jamás había sido suyo, que sus vidas tomaron caminos diferentes. Su destino se había escrito tiempo atrás, y ahora que lo aceptaba tratando de romper todos sus pensamientos negativos, había sido una revelación y le había brindado un poco de paz.

Hacer el amor con Sasuke por despecho y deseo, había sido un error, eso jamás iba a cambiar desde su percepción. Se había equivocado a pesar de que era un hecho que con el tiempo estaba destinado a realizarse, ahora deseaba que hubiese ocurrido porque sus motivaciones fuesen distintas; era lo que cada persona merecía de un encuentro de esa índole.

Sasuke a pesar de ser frío, engreído e incluso a veces egoísta; con ella, a ella le había mostrado una parte de su personalidad distinta. El respeto que mostró antes de tomarla, incluso cuando lo hizo, usar su cuerpo para protegerla, sus disimuladas preocupaciones sobre su cansancio o estado mientras continuaban con su misión y ahora ese detalle, jamás nadie le había dado...

Hinata se mordió el labio inferior, porque el nudo en la garganta fue tan doloroso, solo era una caja de rollos de canela, pero nunca nadie mostró esa consideración con ella. Levantó los ojos lunas, Sasuke no la miraba parecía incomodo y distante.

Él se alejó y se quitó la capa de viaje aventándola al futón que le pertenecía, era de pocas palabras pero sus actos hablaban mucho. Sasuke era un buen hombre, tenía un pasado oscuro y por eso muchas de sus acciones eran tachadas de egoístas e incluso malvadas, y ése mismo hombre, era protector con las personas que le importaban y por alguna extraña razón ella se había convertido en una de ellas, el motivo aún no lograba descifrarlo del todo, ¿sería el simple hecho de que había sido la persona elegida para su esposa? ¿O sería como él había dicho le despertaba un cierto interés... sexual? ¿Habría sido el hacer el amor?