Capítulo 36

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Luego de esa noche, Kris cuidó muy atentamente a que el menor estuviera bien, le limpió con cuidado y luego durmieron abrazados, con una sonrisa en el rostro.

Pasaron las semanas, todo con normalidad. Tao fue a hacer unos trámites, y tenía que subir al sexto piso de un edificio, vio muchas personas esperando el ascensor y fue por las escaleras, a duras penas llegó al sexto piso, estaba agotado, lo que era extraño porque se mantenía con algunos ejercicios, lo tomó como que hace mucho que no subía tantas escaleras y lo dejó pasar. Después de esos días, empezaba a tener otros síntomas que era extraño para él, terminó yendo al doctor donde le dijeron que estaba embarazado. Estaba tan feliz de saber aquello, Kris también se alegró mucho por la noticia, estaban muy felices por aquello.

Primer trimestre de embarazo

En los primeros tres meses, Kris era sumamente protector, estaba pendiente de cada detalle de su querido esposo, a toda hora le preguntaba cómo estaba, qué le hacía falta, si había dormido bien, si se estaba alimentando bien, si ya se movía el bebé, de todo preguntaba. Cosa que a Tao le causaba mucha ternura, tener un esposo así de atento era genial, le gustaba eso.

Kris había preparado dos tazas de chocolate caliente a pedido de Tao, por lo general le gustaba mucho las cosas dulces, y ahora con el embarazo pedía a cada rato chocolate.

Tao se sentó sobre el sillón antes de tomar entre sus manos a la taza humeante. -¡Gracias, amor!

Kris se sentó junto con su esposo para tomar el suyo. -No es nada, mi vida.

Con cuidado, Tao sopla el liquido para ir probando de a poco, tenía cuidado para no quemarse, cosa que el mayor no tuvo cuidado y terminó por quemarse la lengua, a lo que soltó un "Auch", y el menor enseguida dejó su taza para ayudar a su esposo.

-Amor~ tienes que soplar antes. -Le regañó primero y después le dejó pequeños besitos en los labios, esperando que lo calmara un poco.

-A la próxima le voy a echar hielo.- Dejó su taza a un lado y recibir gustoso los besos, parecía un niño intentando de llamar la atención.

-No, hielo no. -Rió suavemente tomando el rostro del mayor entre sus manos, le acarició las mejillas y le miró a los ojos. -Tan bonito. -Dijo antes de dejar otro beso en sus labios, luego se separó para buscar su taza. -

-Hielo si, así evito quemarme —Tomó su taza nuevamente y sopló antes de tomar un poco de ella— ¿Has pensado en algo para los bebés?

Hace poco en el control sobre el embarazo, se dieron con que eran dos bebés, aún no sabían si eran mellizos o gemelos, si eran mujeres o varones, pero estaban tan entusiasmados con la idea que querían tener preparado los nombres.

-Solo si hace calor puedes ponerle hielo, y no, aún no, mañana me pongo a buscar, amor. -

-He estado pensando en nombres pero la verdad no tengo imaginación para ello. -

-Tranquilo, amor, hay tiempo para eso. -Tao hizo una pausa antes de seguir hablando. -También hay que pensar en el cuarto para los bebés. ¿Dormirán con nosotros los primeros meses?

-No lo sé, por una parte me gustaría estar pegado a ellos pero otra siento que necesitan tener su privacidad.

-Necesitarán dormir en la cunita, me da miedo al principio dormir con ellos los primeros días, serán tan pequeños, tan frágiles. -Hizo otra pausa pensando, antes de seguir diciendo. -Creo que los tendré en la cunita por lo menos la primera semana, solo los sacaré para cambiarles el pañal y darle la lechita.

-También para mimarlos. -Dijo Kris mirando con una sonrisa a su menor que empezaba a sonreír a lo loco, tenía los ojos brillantes y una sonrisa tan amplia, seguro ya lo tenía todo armado en su cabeza.

El amor [TaoRis/KrisTao] Completa. En Edición Donde viven las historias. Descúbrelo ahora