Soledad Divina: Burlas Entre Guerras.

Capítulo Cuatro: Telas de Araña...

La semana de Umi y Maki fue muy especial, se acercaron más una a la otra por petición de Maki, yendo a muchos lugares para pasar un buen rato en Tokyo, hablando de ellas riendo y jugueteando...
Maki salía mucho con Umi, eso le ayudo un poco a Umi en conocer la ciudad y sus costumbres, pero sentía mucha desconfianza de todos los aparatos que encontraban...

Nunca había visto que los humanos usaran tanto un aparto tan pequeño y frágil para más de un propósito.
Capturar una imagen para siempre, emanando ruidos avisándote que alguien solicita tu asistencia en algún lugar... Mandando mensajes que llegan en un instante.

-Deben ser muy útiles... -Pensaba Umi, nunca había tenido uno de esos en sus manos, pero no había en ella el deseo de tener alguno.

En algunas ocasiones Nico llegaba a hablar a solas con Maki, Umi nunca se enteraría de que hablaban, pero no le preocupaba, pues sabía que Maki confiaba en ella... No le preguntó a Maki que le dijo y Maki tampoco menciono nada acerca de esa conversación que Nico se esforzaba en mantener en secreto.

Siguiendo sus días juntas sin muchas preocupaciones, después del trabajo iban a distintos sitios, a centros comerciales, parques, o solo regresaban a casa para platicar y comer a solas. Durante el tiempo que pasaban juntas, Maki notó que Umi sentía incomodidad con algunas cosas, y la animo a encontrar confianza hacia ellos.
La ayudo con los semáforos y autos, que eran un problema cuando hacían ruidos sin indicación alguna.
Y en poco tiempo se fue acostumbrando a lidiar con aquellos estruendosos artefactos, Maki se regocijó con el progreso de Umi, sintiendo que hací la ayudaba en adaptarse.

Umi le mostraba agradecimiento en cada oportunidad, invitándola a comer o saliendo al parque que más le gustaba... Que era el mismo en el que Umi apareció por primera vez en Tokyo.
Teniendo una semana más que idónea para ellas... Llegado el comienzo de la semana, ellas salieron del trabajo con normalidad el primer día, teniendo una cena tranquila, y yendo a dormir sin novedad.
Parecía que el día siguiente seria lo mismo, pero Maki le propuso a Umi ir al cine, seria la primera vez que Umi viera una película, aceptando sin problema alguno, pues al jefe no le molestaba... Ya que tenia algunos asuntos de que preocuparse más que de Umi y Maki.

Saliendo las dos al cine, donde Maki ya tenia una película en mente, a Umi le daba un poco igual la película, pues no sabia nada al respecto.
Vieron una película con mucho significa para Maki, pues era una adaptación de otra película antigua, una que Maki ya conocía desde hace mucho, y quería compartir el nuevo recuerdo de esa primera vez con Umi.

Umi y Maki salieron satisfechas con la función, Maki parecía estar algo sensible después de la película, Umi lo notó, y busco un lugar para sentarse y preguntarle.

-Maki, ¿te sucede algo? -Le pregunto amable tomando una de sus manos.

Maki miro el cómo tomaba su mano, y sintió una emoción fogosa en ella... Que le apasionaba igual que cantar, miro hacia Umi, y ella le miraba con una expresión preocupada.
Maki se mantuvo en silencio viéndola, dejando a Umi sin respuesta por unos momentos... Hasta que...

-Umi chan... Yo... -Tartamudeo bajando su mirada y soltando sus manos... Umi se sorprendió, pues Maki nunca la había llamado "Umi chan" no sabía si alegrarse o preocuparse.
Porque pensaba que al decirle "Umi chan" la consideraba una amiga.

-Quiero saber... -Dijo con una voz tenue, que apenas pudo escuchar Umi. -Si te gustaría... Ser... ... Mi novia... -Expreso Maki mirando hacía el piso con sus manos en su pecho.