Corazon De Vaquero +🔞

CAPÍTULO 7 - PAULA POV°

Mama: no me quieras tratar como una idiota primero no quisiste salir en la fiesta y ahora no quisiste servir el desayuno cuando antes tú eras la que le llevaba la comida a don Alexander a la mesa antes de que llegara su hijo que es lo que pasa porque le tienes tanto miedo al hijo de don Alexander y quiero que me digas la verdad – dijo severamente.

Paula: no me pasa nada mamá son imaginaciones tuyas es solamente que él es el hijo del patrón y yo soy una sirvienta es normal que le tenga miedo él me puede despedir - dije tratando de sonar convincente.

Mamá: espero que solo sea eso paula yo soy tu madre puedes confiar en mi para todo yo estoy para apoyarte en lo que sea eres lo más importante que tengo en esta vida - dijo con lágrimas en los ojos abrazándome.

Paula: estoy bien mamá tranquila - dije devolviéndole el abrazo y así estuvimos un buen rato hasta que se calmó y pudimos volver a hacer nuestros deberes aunque yo me la pasaba más tiempo tratando de pasar desapercibida y así pasó una semana en la que trate de no cruzarme por el frente de xandro lo más posible.

Termine de limpiar la sala y fui a la cocina a ayudar a mi mamá a hacer el almuerzo.

Paula: mamá ya terminé necesitas que te ayude en algo - dije entrando por la puerta.

Mamá: no hija podrías mirar la comida mientras voy al sótano a buscar unos ingredientes más para la sopa - dijo limpiándose las manos.

Paula: okay - dije y la vi salir apresurada.

Mientras revolvía la sopa escuche los pasos de alguien pero no le puse mucho cuidado porque supuse que sería mi mamá o alguna de las muchachas hasta que oí su voz.

Sandro: doña Alejandra me podría dar un vaso de jugo - dijo entrando por la puerta dejándome estática - paula tenía tiempo que no te miraba - dijo con una sonrisa de burla.

Paula: es que he estado ocupada joven que necesita - dije tratando de parecer más formal y tranquila.

Sandro: un vaso de jugo - dijo dando un paso cerca de mí a lo que me moví rápidamente lejos de él a lo que alzó una ceja - así que muy ocupada y yo que creía que tratabas de evitarme que equivocado he estado - dijo con sarcasmo mientras tomaba el jugo que le acababa de servir y se lo tomaba de una a la vez que se me acercaba lentamente - espero volverte a ver - dijo y dejó el vaso para luego irse por la puerta lo que me hizo volver el alma al cuerpo al rato por la puerta apareció mi mamá con más ingredientes para el almuerzo.

Después del almuerzo estuve limpiando la casa un buen rato lo bueno es que no me volví a encontrar a Sandro al parecer salió a encontrarse con un amigo en el pueblo o algo así cuando termine de limpiar mire la hora y ya casi era la hora de salida así que fui a cambiarme y a buscar mis cosas cuando estuve lista salí y me encontré a mi mamá en la cocina.

Paula: mamá voy donde Stella un rato - dije frente a ella que estaba terminando de arreglar la cocina.

Mamá: okey pero no te demores trata de regresar temprano tu sabes que no me gusta que te vengas sola muy tarde - dijo preocupada.

Paula: okay mamá adiós - dije y comencé a caminar y como a los 40 minutos llegué al pueblo y camine hasta la cafetería en la que se encontraba Stella atendiendo mesas - hola - dije saludándola en la barra cuando termino de atender unas mesas - como estas – dije mirándola.

Stella: ocupada hoy ha sido un día muy ajetreado pero te tengo una sorpresa – dijo con una sonrisa en el rostro.

Paula: que sorpresa – dije mirándola fijamente.

Stella: te acuerdas de Samuel – dijo sirviéndose un vaso de agua.

Paula: como olvidarlo tu primo es una persona muy buena gente - dije con una media sonrisa.

Stella: pues imagínate que se vino a vivir a este pueblo – dijo con una gran sonrisa.

Paula: queee – dije sorprendida – eso es una gran noticia.

Stella: si ya hasta consiguió trabajo en la hacienda de don Alexander gracias a mi tío y empieza mañana – dijo mirando fijamente a la pared - ya tienes alguien que te defienda si xandro te molesta.

Paula: que podría hacer Samuel no somos muy cercanos para que se meta a defenderme – dije tristemente.

Stella: él es alguien que no le gusta que traten mal a las mujeres – dijo sonriendo.

Paula: se nota que es una excelente persona en su forma de ser – dije sonriendo.

Stella: hablas muy bien de mi primo no será que te gusta – dijo con una sonrisa.

Paula: no es eso es solo que me callo bien – dije un poco sonrojada.

Stella: eso no es lo que dicen tus mejillas – dijo con una sonrisa burlona.

Paula: ya basta – dije sonrojandome más – no lo puedo negar es muy guapo.

Stella: que no te lo escuche decir xandro que tal y se ponga celoso – dijo burlonamente.

Paula: porque ese idiota se pondría celoso si no es nada mío el me odia y me trata como la suela de sus zapatos porque no soy rica como el disfruta humillarme porque eso lo hace sentirse superior y alimenta su ego más – dije fríamente.

Stella: ay amiga yo creo que él no te odia si no que le gustas y por eso te molestaba siempre en la secundaria – dijo mirándose las unas.

Paula: Stella cada día estás más locas ese hombre no ama a nadie más que a el mismo es un ególatra, machista y un abusivo que se aprovecha de su poder para pisotear al más débil – dije con fastidio – podríamos dejar de hablar de el de solo recordarlo ya me da dolor de cabeza.

Stella: okey como estuvo el trabajo hoy – dijo mientras limpiaba la barra.

Paula: se podría decir que bien – dije pensativa.

Stella: por – dijo mirándome intrigada.

Paula: por nada ya me tengo que ir se está haciendo tarde adiós – dije para no seguir hablando más del tema.

Stella: adiós ya sabes estoy para ti si quieres contarme algo – dijo dándome un abrazo.

Paula: okay – dije abrazándola también – chao – dije saliendo de la cafetería.

Luego de que me fui de la cafetería decidí pasar al supermercado a comprar unas cosas para mi aseo personal. Cuando estaba en la sección femenina escogiendo unas toallas intimas sentí a alguien pararse a mi lado cuando voltee me encontré con xandro parado al lado mío.

Sandro: como las mujeres pueden sangrar cada mes y no morirse eso es cosa del mal – dijo en tono burlón.

Paula: que haces aquí – dije fría mientras cogía una y la echaba en la canasta donde llevaba las cosas que iba a comprar.

Sandro: te vi cuando entraste al supermercado y quise saludarte – dijo con una sonrisa.

Paula: bueno ya me saludaste te puedes ir – dije caminando por los corredores del supermercado buscando más cosas.

Sandro: que no se note tanto que me estas echando – dijo haciéndose el ofendido mientras me seguía.

Paula: porque me sigues que quieres – dije volteando para enfrentarlo.

Sandro: no te estoy siguiendo estoy comprando queso – dijo cogiendo un queso de los estantes.

Paula: a no sabía que te gustaba queso casu marzu – dije con una sonrisa en la cara al ver su cara hacer una mueca.

Sandro: es uno de mis quesos favoritos – dijo con una gran sonrisa.

Paula: tendré que decirle a mi mama que a partir de ahora te compre queso casu marzu para el desayuno – dije tomando un par de quesos – para mañana tu desayuno – estuve a punto de reírme al ver su cara.

Sandro: no es necesario que lo compres – dijo rápidamente.

Paula: es mi regalo de bienvenida - dije para luego caminar hasta la caja donde después de pagar salí con las bolsas.

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