Me enamore de mi enemigo

capítulo 26: una advertencia

Después de unos minutos de estar en la fila para poder pagar todo lo que llevábamos llegó Yesid con unos paquetes los cuales no reconocí aunque no le había prestado mucha atención, en lo único que podía pensar era en ese mensaje y en el gran problema que se venía

-Hey! Niñata ¿segura que no quieres llevar nada mas?
-Ahh..sí segura -Conteste algo distraída
-¿está todo bien? Te noto algo extraña -preguntó Yesid preocupado
-Estoy bien tranquilo -dije dándole una sonrisa tranquilizadora la cuál se borró cuando vi el auto de Yesid
-Qué mierdas es eso?! -Dijo yesid refiriéndose a una paloma blanca muerta en su parabrisas
-Creo que debemos irnos ya..se nos hace tarde -dije entrando en el auto y sintiéndome cada vez peor

Yesid botó a la paloma y limpió donde había estado la pequeña ave pues todo estaba cubierto de su sangre, mientras veía como lo hacia sentía unas profundas ganas de llorar..sabia lo que significaba, eso lo había hecho Criss era obvio, cuando estábamos saliendo él y yo recuerdo que le había dicho que me gustaba mucho esa ave pues era un símbolo de paz además de que era hermosa me recordaba a la libertad que estas tenían, pero al ver una muerta era una señal de advertencia y mas si está estaba en sitios donde era imposible ver palomas

-¿Puedo poner un poco de música? -preguntó él viéndome algo preocupado
-Si..-fue lo único que pude decir
-¿Estas así por lo de la paloma?..tranquila de seguro fue una broma de los niños de ese sector
-Que broma más pesada -dije seca y apartando la mirada
-Liz...hay algo que no me estas diciendo, tenme confianza tranquila puedes confiar en mí -dijo Yesid con su mirada aún en la carretera
-No quiero hablar de eso ahora..
-Esta bien, no te obligaré a nada.. Pero sabes que puedes contar conmigo okey?

Sólo asentí con la cabeza a sus palabras, aún me sentía fría y me parecía ver la sangre de esa ave en el auto, me sentí asustada con el sólo hecho de pensar de que algo le podía pasar a Yesid, a mí o incluso a mi amiga..Criss era una persona mentalmente inestable y eso lo noté al terminar todo, él estaba realmente loco, estaba obsesionado conmigo y sabía que haría cualquier cosa con tal de conseguir lo que quería

-Ya llegamos...-las palabras de Yesid me hicieron volver a la realidad, habíamos llegado a casa y estaba todo mojado..pues había estado lloviendo por todo el camino desde que salimos de aquel supermercado
-Vamos -me bajé del auto con las cosas y abrí la puerta de la casa, Yesid venía detrás de mí con otras bolsas que no había sacado
-Yo llevaré y acomodaré todo en la cocina..tú ve y date un buen baño, no te preocupes -Dijo yesid con una sonrisa
-Voy..gracias -fueron las palabras que articulé antes de salir corriendo hacía mi habitación

Me desnudé rápidamente y entré a la ducha, no sabia el porque pero me sentía sucia restregaba mi piel con tal fuerza que la deje roja e irritada, respiré profundo y luego sólo deje mi cuerpo mojar con el agua que caía sobre él, salí de la ducha y fui a cambiarme poniéndome sólo una camisa enorme y un short corto, peine mi cabello y bajé rápidamente al primer piso

-Acomodate niñata, y escoge la película -Dijo yesid mostrándome las opciones que habían para escoger
-Escoge una tú -dije sentándome y viendo sobre la mesa, una gran variedad de comida, habían palomitas, gaseosa, un paquete de Cheetos y dos potes de helado junto con dos porciones de pizza
-Quiero está -dijo yesid escogiendo una de terror
-No! Escoge otra..no quiero ver películas de miedo por hoy -dije sentándome bruscamente y tomando un pote de helado
-Esta bien..pero me vas a decir que tienes -dijo con su ceño fruncido
-No tengo nada -dije llevándome una cucharada de helado a mi boca
-Liz..-Me miró con una mirada de tristeza y preocupación, odiaba que me mirara así, me hacia sentir peor de lo que ya estaba
-Sólo no quiero ver esa película -dije con una mirada baja
-Esta bien..no te obligaré -dijo poniendo una romántica, sabia que se había enojado podía notarlo en su mirada y en las facciones serias de su rostro,
Se sentó a mi lado y no apartó la mirada de la pantalla durante un buen rato, yo no dejaba de verlo, me sentía mal al no decirle nada, sabía que sólo quería cuidarme pero yo quería protegerlo, es una tontería lo se..pero no podía permitir que Criss lo lastimara, perderlo era algo que no quería, si algo malo le pasaba sería por mi culpa pero sabia qué a diferencia de mí, él sabia cuidarse estaba siendo dramática la que realmente corría riesgo era yo, pero siendo honesta mi vida era lo que menos me importaba después de todo, mi preocupación iba por mis seres cercanos a que no les pasara nada.. Pero todo dependía de mí, tenía que dejar mi cobardía y mi miedo de lado si realmente quería proteger a los que amo
-La película esta al frente -dijo frío e indiferente sin siquiera voltear a mirarme
-Lo sé..-dije volviendo a ver a mis manos el pote de helado que ya se estaba derritiendo, no pude evitar sentirme miserable tanto que se me escaparon unas cuantas lágrimas, que esperaba que Yesid no notara ya que no me estaba viendo a mi sino a la televisión
-Ya puedes dejar de...-iba a decir algo pero se quedó sorprendido al verme
-Lo siento no puedo más - dije levantándome y dirigiéndome hacia mi habitación
-Espera! -dijo mientras me tomó y jaló hacia él, rodeándome así con sus brazos dándome un abrazo del cual no tenia escape
-Qué haces?! -reproche sorprendida por su acto
-Perdoname.. Liz no quería hacerte llorar, lo siento -dijo incorporándome mas en su pecho y con mas fuerza
-Olvidalo, no pasa nada -dije tratando  de safarme de su agarre pero no podía
-No! Te hice sentir mal, oye lo siento enserio, es que me molesta que no me tengas confianza, pero no es razón para tratarte mal
-Eres idiota a caso? Claro que te tengo confianza tonto..sólo que, yo..-No digas nada! No es necesario tranquila- dijo él interrumpiendome
-Yo...te quiero -fue lo que salió de mi boca, mientras lo apretaba con mas fuerza
-Yo..yo también te quiero mi niña -dijo el incorporándose mas a mí

Duramos unos cinco minutos así, pero luego sentí que bailaba pues Yesid se estaba tambaleando, no pude evitar reír, nos sentamos de nuevo a terminar de ver la película, aunque su mano seguía entrelazada con la mía, y eso era algo que me hacia sentir mas cómoda y segura..luego que la película terminó subimos a los cuartos ya que él se estaba quedando en mi casa, le dije que podía dormir en el cuarto de al lado, pues el cuarto de Esther estaba al frente del mio, y obvio no podía meterlo allí, después de todo me acosté a dormir tranquila sabiendo qué ahora tenia a alguien confiable haciéndome compañía