Capítulo 9

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¡¡ATENCION!!

Está parte es esencial para cualquiera de los dos finales, sin embargo tienen un poco de relación, pero no es necesario leer uno para entender el otro, pasará CASI lo mismo pero aún así serán totalmente diferentes.




Me desperté y era de noche, Cameron seguía durmiendo a mi lado. Otra vez me dolía la cabeza, me levanté con cuidado y revolvi en el kit de supervivencia las pastillas para resaca de Cameron, fui al baño y me tomé una. Cerré la puerta del baño, empecé a llenar la bañera pero antes de poder meterme empecé a vomitar.
Me sentía tan mal que vomité todo lo que había comido en el día de ayer.
Mi cuerpo temblaba apoyado en el retrete. Cameron había entrado en la habitación y me estaba sosteniendo el cabello.
Cuando termine de vomitar me deje caer en el piso y me senté. Cameron se reía sin embargo yo estaba llorando. En cuanto se dió cuenta trato de tomarme la mano pero lo esquivé y me metí en la bañera.
Me empujó para adelante hacia el centro de la bañera y se metió detrás mío. Tomo mis hombros y me tiró hacia él hasta que quede recostada en su pecho.
Trate de aguantarme lo más posible, sin embargo mi nariz empezó a moquear y yo volví a llorar.
Él me abrazo, más bien me apretó, su pecho estaba contra mi espalda y sus brazos apretaban los mios. Había dejado de contenerme y mi llanto demasiado exagerado resonaba en toda la habitación.

- Sele - me dió vuelta como si fuera de pluma y me tomo el rostro. Quise apartarme pero me subió encima suyo y me quedé llorando en su hombro lo más silenciosamente posible.

Me tuvo en su pecho tanto tiempo que el agua se estaba enfriando, acaricio mi pelo y espalda en todo momento y no me volvió a hablar hasta que mi pecho dejo de sobresaltarse por el fuerte llanto.

- ¿Estás mejor? - me preguntó después de un rato

- Quiero dormir - le respondí

- Así estarías huyendo de lo que verdaderamente te pasa. - seguí sentada sobre él pero saque mi cara de su cuello - ¿Que sucede?

- Me enamore en un día - sonrió - eso sucede, y mañana te vas - su sonrisa se cayó de un lado, parecía que iba a llorar, sos ojos estaban brillantes

- Yo también te amo - después de hablar tragó saliva con demasiada dificultad. Otra vez me llevo hacia su pecho casi incentivandome a volver llorar.

Salimos de la ducha y volvimos a dormir.

Navidad Fue Más Que Una Noche Donde viven las historias. Descúbrelo ahora