blanca, fría y muerta

4 3 0
                                    

La joven muchacha lloraba lágrimas ácidas

frente al mausoleo

Por la traición cometida

Su mente estaba vacía

En blanco

En blanco, como los ojos lechosos de ese hombre que la veía sin mirarla,

que la oía sin escucharla

y que alguna vez la quiso sin amarla

Las lágrimas ácidas de la joven corroían la nieve blanca y fría que había empezado a caer.

Blanca y fría

Blanca, fría y muerta, como la piel de ese hombre que la veía sin mirarla,

que la oía sin escucharla

y que alguna vez la quiso sin amarla

Las lágrimas ácidas quemaban la piel blanca, fría y muerta de la joven,

y se consumió.

Se consumió delante de aquel mausoleo

De aquella tumba

De aquella tumba de ese hombre que la veía sin mirarla,

que la oía sin escucharla

y que alguna vez la quiso sin amarla

La nieve blanca, fría y muerta empezó a caer más fuerte

A.

lágrimas ácidasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora