CAPITULO 2

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Juro que mi corazón dejo de latir, ni siquiera cerré el monitor, empecé a temblar y el estomago me empezó a molestar, tenia nauseas de los nervios, tantas noches jugando a los amantes y ahora estaba tras mi puerta. Ya este juego, no me parecía tan divertido.

Desde que lo conocí me encantó su actitud tan segura, su inteligencia, su positivismo, sus risas… su forma de escribir que hacia que la polla se me pusiera dura como un asta. Tantas noches besando mi almohada como un imbécil pensando que era su boca, alucinando con besarlo a el, un cuerpo irreal… una sensación imposible. ¿Como un tipo como yo, tan serio, tan profesional, estudioso, maduro, adulto, había caído en la ilusión de un personaje de ficción?

Nunca había visto su cara, nunca había escuchado su voz, a duras penas me había contado de su vida, su trabajo, algunas fotos que jamás lo incluían, ese era él, mi amante fantasma, mi ilusión oculta, hasta que abrí la bocota y le dije que me estaba enganchando con él. Maldita suerte la mía. Creo que ese día lo perdí.

Antes de que le confesara que me sentía atraído más allá de la ficción, al menos tenia su compañía y la ilusión del sueño de un personaje, porque luego de eso empezó a cambiar, a mantenerse más lejano, como si me temiera. Ya no coqueteaba conmigo, ya no habia juegos con doble intención…–Inhalo profundamente y exhalo- “Llegó el momento de la verdad Muhrder”… ¡A lo hecho…pecho!

Camine hasta la puerta atravesando el salón, me detuve un segundo para mirar el equipo de música, ¿pongo música?, - negué con la cabeza – y luego que ¿velas y vino? –Resoplé- contrólate Muhrder es un amigo al que nunca has visto y solo te lo has follado “virtualmente” unas… ¿10,000 veces? –tragué duro y abrí la puerta.

Ahí estaba… ÉL… parado con descuido esperando a que abriera…

Mis mejillas ardieron cuando el timbre de su voz toco mis tímpanos. Se me seco la boca cuando esos labios delgados me sonrieron. Una sonrisa amplia hizo su aparición en mi rostro cuando unos ojos marrones casi negros me miraron satisfechos. ¡LE GUSTE!

Me hice a un lado invitándolo a entrar, el sonrió e ingresó. Caminó hasta el centro de la estancia sin dejar de mirarme continuamente –Tiene tu estilo- dijo, mientras observaba la distribución del salón. –Imagino que tú lo decoraste- continuó, mientras revisaba mi colección de Cds vieja.

- No todo- contesté- muchos de los muebles son reciclados o de mis padres, aun no tengo el entusiasmo de derivar mi dinero a mobiliario.- Sonreí y me respondió con otra sonrisa.

- ¿Te sorprendí? – Preguntó con calma.

- Mucho.- Carraspee y rasque mi oreja, luego mi nuca y termine despeinando aun mas mi cabello. Esa costumbre mía, de no poder tener las manos quietas.

- Acostúmbrate a verme por aquí, porque vendré con frecuencia.- No dejaba de mirarme fijamente, como si me memorizara para dibujarme posteriormente.

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Mi boca se abrió ligeramente y mis ojos evidenciaban mi sorpresa ante sus palabras, se acercó con el mayor desparpajo y me tomo de la mano colocando en ella la botella de vino que aún llevaba consigo.

- Este vino tiene que enfriar- dijo sonriente.

SUEÑOS DE UN PERSONAJE  (GAY)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora