6 días para navidad|Emiliaco|Terminada|

-2 [parte2]

Emilio se encontraba dando vueltas en su departamento, había llegado hace media hora y se había dedicado únicamente a caminar sin ningún rumbo por todo el lugar.

-Hola- saludó Cece cuando Emilio abrió la puerta, este la tomó del brazo metiéndola al departamento sin decir nada- ¿qué pasa? ¿por qué la urgencia de verme?

-Es que... es que yo...

-Es que tú...

-Salí con chico- dijo para después cubrir su rostro con un cojín del sofá.

-¿Qué? ¿cuándo?- habló emocionada.

-Pues hoy, fui con Joaco al supermercado y ahí un chico se nos acercó y me invitó a ir por un café.

-¿Y qué pasó?

-Pues no estaba muy convencido, pero Joaco casi me obligó a ir y pues lo dejé ahí y me fui con Roy.

-¿Así que se llama Roy? Es un lindo nombre... pero ¿qué pasó después?- Cece estaba muy interesada.

-Fuimos por el café, dijo que le gusté mucho y me invitó a salir mañana.

-¿Mañana? Pero es nochebuena.

-Exacto, quería que vaya a cenar con él- dijo ansioso. 

-¿Y qué hiciste? ¿vas a salir con él?

-No, osea sí.

-Explícate, no te estoy entendiendo.

-Lo invité a ir a cenar con nosotros a casa de Joaco.

-¿Qué?- su tono demostraba sorpresa y preocupación- pero Emilio, ¿tú crees que está bien invitarlo a casa de Joaco? él podría sentirse mal.

-Sentirse mal ¿por qué? él me dijo que si encontraba ligue podría llevarlo.

-Emilio, Emilio, Emilio- dijo la chica moviendo la cabeza de lado a lado en forma de negación.

El chico no entendía a lo que su amiga se refería, pero prefirió no indagar en el tema. Aún tenía que decirle a Joaco que había invitado al tal Roy a su casa.
Cuando Cece se fue, decidió ir al departamento del castaño para comentarle lo sucedido. Tocó a la puerta después de acomodar un poco su cabello y verificar que su atuendo estaba alineado, pero no fue Joaco quien abrió la puerta, si no un chico de cabello oscuro y lacio, tez blanca, ojos claros y voz suave.

-Hola ¿buscas a Joaco?

-Amm, sí- contestó algo confundido.

-¿Quién es Niko?- se escuchó la voz del castaño desde la cocina.

-Es...- el chico lo miró de nuevo- ¿cuál es tu nombre?

-Emilio, soy Emilio.

-Ah, es Emilio cari- contestó en un pequeño grito.

El castaño salió de la cocina- ¡Emilio! que sorpresa, pasa.

El chico entró aún confundido y un poco nervioso, no conocía a aquel chico de cabello oscuro.

-¿Cómo te fue en tu cita?

-Amm bien, sí. De hecho venía a decirte o más bien preguntarte ¿está bien si lo invité a venir mañana? Ya sabes a la cena.

-Ooh, este...- El semblante de Joaco cambió, dirigió la mirada a la puerta y después a Niko. Este se acercó y cruzó su brazo alrededor de los hombros de Joaco.

-Mi cari y yo estaremos felices de recibirlos mañana.

¿Su cari? ¿Qué es un cari? ¿Acaso ese Niko era novio de Joaco? ¡Pero él nunca comentó nada de ningún novio! El rizado estaba bastante confundido.

-Sí- habló entonces Joaco- te dije que estaban invitados.

-Bien, nos vemos mañana entonces.

Emilio volvió a su departamento, no terminaba de procesar lo que había ocurrido minutos atrás. Se cambió la ropa por pijama y se acostó en la cama. Ahora resultaba que Joaco tenía novio, que hasta él tenía suerte en el amor, no lo entendía... Joaco era tan irritante, tan desesperante, tan desagradable, tan buen cocinero, tan educado, tan bueno con los niños, tan lindo, tan... tan lo que Emilio quería.