Cristina.
¿Se puede saber de que va? Espero a que salga de la cafetería con sus amigos.
-Hola cariño.
Se para al verme y sus amigos se quedan mirándome.
-¿Podemos hablar?
-Claro, ¿que pasa?
-En privado.
-Chicos, después nos vemos.
Se despide y camina junto a mí hacia uno de los muchos bancos de madera que hay en el césped.
-¿De que quieres hablar?
Se sienta en el lado izquierdo y me siento junto a él.
-No sé, dimelo tú.
¿Acabo de usar una frase de Adrianna?
-No te preocupes, he hablado con mis amigos. La próxima vez que te digan algo así no les hagas caso, me gustas tal y como eres.
Pasa uno de sus brazos por mi hombros y me atrae hacia él.
-¿De que estás hablando?
-¿No era eso de lo que queria hablar?
-No. Pero me acabo de enterar de que tus estúpidos amigos piensan que no soy buena para tí.
Me alejo de él.
La próxima vez que los vea se van a arrepentir de haber hablado sobre mí.
-No es eso lo que han dicho, solo que se preocupan de que me dejes por alguien que se parezca más a tí.
-¿Que se parezca más a mí? Explícate.
-No sé, como los demás novios que has tenido antes.
Ya sé que mi historial de novios no es muy bueno que digamos pero nadie tiene derecho a decidir que o quién me gusta.
-¿Y tu les haces caso?
-Bueno...
-¡¿Cómo que bueno?! -grito haciendo que varios estudiantes se giren hacia nosotros.
-Cris, relájate.
-No me da la gana relajarme. Es como si ahora te digo que no confio en tí porque a lo mejor el día de mañana te vas con alguna tía tan aburrida como tú.
Nada más decirlo me arrepiento al ver como le cambia la cara.
-¿Piensas que soy aburrido? -dice ofendido.
-Yo... No sé... Creo que deberiamos dejarlo por un tiempo para ver si de verdad encajamos.
-¿Por un tiempo? ¿Acabamos de empezar y ya quieres cortar conmigo?
-No vamos a cortar, solo vamos a dejarlo por un tiempo, que no es lo mismo.
-Si es lo mismo. -dice levantándose del banco.
-¿Adónde vas?
-A buscar a una chica aburrida que quiera ser mi novia.
-Joan, sabes que no lo he dicho enserio. -le digo mientras le acaricio la mano y me levanto para abrazarlo.- Solo déjame pensarlo.
-Vale.
(...)
-¿Se puede saber en dónde estás? -pregunta Adrianna alterada.
-Estoy aparcando relájate.
-Como no vengas ya me parece que voy a matarla sin tí, porque la verdad es que me está jodiendo bastante.
-Ya he aparcado, estoy aquí al lado.
Cuelgo y cojo mis cosas del asiento de atrás. Shorts, camiseta de tirantas, cintas, guantes... Vale, tengo todo. Salgo del coche y lo cierro.
Camino hacia el callejón en el que se encuentra la puerta del garito.
-Cristina, ¿que tal? -me pregunta el portero lleno de tatuajes.
-Genial Christian.
-Adrianna está en la zona de taquillas con... ¿Susana?"
-Sí, Susana. Nos vemos cuando haya pateado unos cuantos traseros.
-Suerte. -me dice mientras me deja entrar.
Nada más entrar me llega el olor a cigarrillos habitual. Esta noche hay bastante gente.
-Cris, Adrianna está allí. -me dice uno de los encargados señalando a una Adrianna nerviosa junto a una despreocupada Susana.
-Gracias.
Nada más verme me tira del brazo y me conduce hacia los vestuarios.
-Como la odio, puff. Puta Penélope. -dice mientras tira su bolsa de mala manera encima de una de las banquetas.
-¿Que le pasa? -le pregunto a Susana al oído.
-Penélope, que le ha recordado lo del novio.
El día que Adrianna empezó a salir con su actual novio nos sorprendió tanto como a ella misma.
-¿Quién es la compañera de Penélope?
-No sé, pero yo me pido a Penélope.
Se coloca los guantes y lanza unos cuantos golpes al aire.
-Vale, pues yo con...
Me interrumpe el sonido de la puerta del vestuario dejándo ver a Penélope acompañada por una chica pelirroja de mi estatura más o menos, delgaducha y de blancos dientes.
-Hola perdedoras. Os presento a Deila.
-Lo de perdedoras lo diras por tí. -dice Adrianna atándose los cordones por tercera vez.
-Pareces nerviosa. -dice Penélope riéndose con su amiga.
-¿A que habeis venido? -les pregunto mientras me siento para rebuscar en la bolsa.
-Deila quería ver a nuestras contrincantes.
-Bueno ya nos habeis visto, ahora fuera.
Adrianna está de un humor de perros.
-Reserva tu mal genio para el combate. -dice Penélope y se va por dónde ha venido.
Me termino de amarrar las calzonas para que no se me caigan y tiro de Adrianna para salir al pasillo que nos hacen para salir al ring. El antro ya está infestado de personas con la mano levantada haciendo sus apuestas.
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Friends
Teen FictionCuando menos se lo esperaban, la vida les sonrió haciendo que pudieran cumplir su mayor sueño. "Teneis un aura especial." "Os lo digo enserio, nunca lo dejeis." "Llevo 15 años viendo a gente bailar todas las clases de bailes que os podéis imaginar y...