notice me, junnie! ; renyang

four

renjun era muy ingenuo.

el petizo conversaba por los pasillos junto al moreno. quienes estaban muy sumidos en sí que no se daban cuenta de la clara atención que recibían por parte de los demás, especialmente por uno en concreto, que tenía su mirada en el pequeño chino.

renjun y donghyuck eran muy populares, cada uno con su encanto.

hyuck era conocido por maquillar muy bien, tanto que varias chicas recurrían a él por tips y él gustoso las ayudaba con el más mínimo detalle. le gustaba que fuese conocido por ello y se sentía orgulloso de él mismo.

renjun... ese chico solo entró y ya tenía a varios bajo sus pies. aparte de ser increíblemente atractivo, era muy amable con todos y solía defender a varias personas aunque no las conociera en absoluto. renjun podría ser como una regina george si se lo propone, pero como antes mencionado, no tenía en cuenta cuan conocido era.

ambos chicos dejaron sus pertenencias en sus correspondientes casilleros para seguir su camino, hasta que renjun notó algo en alguien en especial.

— hyuck, ¿esa es yuqi, verdad?  —señaló haciendo un gesto con la barbilla.

el moreno posó su mirada a donde le indicaba el chino. con rostro neutral asintió.

— sí, ¿por qué?

jun fue a donde yuqi, quitándose su chamarra rápido y estando detrás de ella, con las mangas de esta las puso alrededor de la pequeña cintura de la chica, tomándola por sorpresa.

— tienes un accidente, puedes regresarmela después –explicó rápido para no ocasionar malentendidos.

yuqi ladeo su cabeza confundida viéndolo, a los cortos segundos después entendió al sentir una punzada en su vientre. lo vio aterrorizada porque ahora tenía otro problema.

— ¿necesitas algo más? —sonrió amable.

yuqi asintió apenada, junto a un pucherito porque estaba de imprevisto.

— espera un momento, no tardo.

no había pasado ni un minuto cuando jun traía a la mano unas comparsas y una tableta de pastillas entregándole a yuqi con una sonrisa.

— toma, me dieron estas pastillas, por lo que creo que es para sus dolores —rió nervioso.– espero te haya ayudado, ¡adiós!

jun estaba por ir a donde el moreno hasta que una pequeña mano lo detuvo.

— m-muchas gracias, enserio —dijo la más baja con sus ojos brillosos y una sonrisa.

— ¡no es nada, yuqi! ahora ve al baño antes otra cosa, ¿sí? espero y estés bien.

con un ademán se alejó, ahora sí yendo a donde el moreno, quien lo miraba con una sonrisa orgullosa. lo atrajo a él dándole palmadas.

— bro, yo no me hubiera dado cuenta de ello. eres muy considerado con todo mundo, ¿acaso eras un ángel en tu vida pasada o qué?  wah, eres un hombre a seguir...

renjun en todo el camino se la pasaba avergonzado por los halagos y palabras lindas de su amigo hacia él, no por lo que había pasado, sino de que no estaba acostumbrado a recibir palabras lindas.

eso, aunque no lo demostrara mucho, lo hacía sentir lindo y bien con él mismo.

al final de todo, renjun es un ángel a la vista de todos.

yangyang pensaba mucho.

caminando hasta su edificio miraba la inmensa cancha con el que contaba el escuela, que la mayoría del tiempo era ocupada por equipos de deporte, los cuales todos los integrantes de ellos eran altamente reconocidos y populares por el campus.