-Este móvil me odia.- Dijo Mark frustrado, mirando como se restauraban cosas sin que él lo haya mandado.
-Vamos Mark, nadie puede odiarte, eres genial.-
-Sabes John, me cansé de los Samsung, ahora quiero un iPhone.-
-Pero bro, los ahorros qué.-
-Pues para el iPhone, duh.-
