La Voluntad "D" [LuLaw]

Capitulo 4

En el Archipiélago de Sabaody las personas comenzaban a impacientarse por lo ocurrido, y mostraban su disconformidad mediante quejas hacia los marines presentes. Mientras que por otro lado los piratas, que habían vuelto al lugar, empezaron a irse; el único objetivo tras su regreso, era presenciar la guerra que estaba transcurriendo, pero con las pantallas transmisoras completamente apagadas la diversión para ellos terminó. Era el momento de seguir su camino, el viaje por sus sueños recién comenzaba.

—¡Nos vamos de aquí, Bepo!—ordenó la azabache.

—¡Vale, vale, capitana!—respondió con firmeza el oso polar.—¡Sígueme, Jean Bart!

Y con estas últimas palabras, la tripulación líderada por Trafalgar Law, emprendió su viaje, teniendo como destino nada menos que, Marineford.

Mientras tanto en el campo de batalla, todo seguía su curso, el plan de la Marina para ejecutar a Ace fracaso, debido a que nada es imposible para el amor de un padre hacia su hijo, además de que su hermano menor fue de suma importancia en este desenlace, mostrando así nuevas habilidades jamás antes vista por ellos. Pero a pesar del esfuerzo para lograr salvarlo, y la perdida de muchas vidas.

Portgas D. Ace finalmente, murió.

El shock fue tan grande, que incluso la Marina dejo de luchar por unos instantes. Todos intentaban contener sus lagrimas por lo ocurrido, pero la ira hacia el Almirante Akainu, nació desde el fondo de sus corazones, ya que él fue el responsable de tal escenario, del cual ni siquiera Garp, un Vicealmirante de la Marina, pudo escapar.

—¡Sera mejor... que me agarres fuerte Sengoku!¡Porque como no lo hagas, puedes estar seguro...!¡De que voy a matar a ese Sakazuki!—declaró con una enorme furia el Héroe de la Marina, Monkey D. Garp.

—¡Idiota!—le regañó su compañero.

Pero... ¿Y Luffy?

La muerte de Ace no solo rompió los sentimientos de sus camaradas, sino que también los de su pequeño hermano, gracias a que él falleció en los brazos del mismo. El joven azabache dejó de prestar atención a su entorno, ya no le importaba seguir luchando, su mente había colapsado. Después de todo... Ace, su único hermano, había muerto.

Paralelamente bajo del mar. Un submarino se acercaba lo más rápido que podía al lugar de lo hechos.

—¡Capitana! Hemos encontrado un lugar en el que el hielo aun no ha llegado.—informó el navegante.

—Entendido. ¡Todos prepárense para emerger!—ordenó la azabache con seriedad.—Estamos a punto de llegar a una zona de guerra.

Volviendo a la batalla. Las muertes siguieron ocurriendo, la contienda aun no terminaba, pero lamentablemente la vida que se llevo esta vez fue la del hombre más fuerte del mundo, Barbablanca había muerto.

Los piratas ya no pudieron contener las lagrimas. Su hermano. Su padre. Ambos, perecieron en esta guerra. Pero no era el momento de llorar, su objetivo ahora era proteger la voluntad de Ace, las últimas palabras dichas por su padre le dieron las fuerzas que necesitaban para seguir luchando. La tripulación de Barbablanca nunca dejara que lleguen a dañar al hermano pequeño de su camarada caído. Eso seria imperdonable.

La ejecución terminó, pero el objetivo de los marines cambio repentinamente, quien se encontraba ahora mismo en su punto de mira, era Mugiwara no Luffy.

Todo parecía estar a favor de los piratas mientras huían, sin embargo, el regreso de Akainu destrozó por completo sus esperanzas. Cada vez estaba más cerca del joven capitán, Jimbei ya estaba en su límite y el golpe que recibió por parte del Almirante no hizo más que empeorar la situación.