Odio tener que despertarme, detesto escuchar los ruidos de la vecina preparando el desayuno para sus cuatro hijos y un marido ebrio. Me doy por vencida y entonces me levanto de la cama.
Después de ir al baño, abro la ventana y me siento sobre la repisa que rechina por vieja. Fumo un cigarrillo en pantaletas y camiseta corta, mientras observo a la gente con sus prisas.
Un deportivo se estaciona en la acera de enfrente, el tipo se baja y le abre la puerta a la chica para que se suba a su auto. Que afortunada, pienso, si logra atraparlo podrá salir de su miseria para entrar a otra.
La verdad es que yo podría vivir mejor que ahora. Puedo tener lo que quiera al precio que sea, mis números en el banco me lo permiten y mi fama también. Pero prefiero ocultarme en mi pequeño apartamento de ocho por diez que se deshace por donde lo mires, con la estufa que solo le sirve una parrilla, la puerta del congelador que se cae y el baño para una persona. Sin lujos, sin sobrantes.
Salgo del edificio vistiendo pantalones tipo militar verde oscuro con bolsillos laterales y al frente también, botas de agujetas negras, una camiseta gris lisa y encima mi chaqueta negra de piel de mil quinientos dólares, sólo llevo conmigo una mochila negra en la espalda con etiqueta de Louis Vuitton. Me pongo el casco polarizado y subo a mi motocicleta. No hay mejor manera de sobrevivir en una ciudad como Nueva York que conduciendo una Ducati multistrada 1200, están de acuerdo.
-Son tres con cincuenta- Me formo en la fila para pagar -Esto es todo?- Me pregunta.
Un café de máquina y dos pastelillos dulces de vainilla individuales, ese es mi almuerzo. Sólo asiento con la cabeza, él sujeto con camisa hawaiana entiende que no necesito nada más.
-Está bien... son cuatro dólares- Le doy un billete de cinco y espero mi cambio mientras me mira de reojo. -No eres tú...
-No- Me apresuro a contestarle.
-Un dólar de cambio- Lo recibo y me voy.
No soy muy sociable y tampoco me gusta que la gente me reconozca, eso me impediría caminar por este barrio o por cualquier otro. Las personas te empiezan a tratar diferente cuando saben que te juntas con Prince, Madonna, Whitney Houston... y que les has puesto las coreografías que bailan en sus videos y conciertos. Lo ves? las cosas cambian.
-Sí, yo le paso su recado... oh, espere, acaba de llegar, aguarde. (TN)!- Me detiene cruzando la puerta -Es Roland en la línea, quiere saber si estás libre para salir de gira el próximo mes.
-Dile que yo le llamo- Caminaba y ella me seguía el paso.
-Ya se lo dije, pero está insistiendo demasiado.
-Le recordaste lo del grupo nuevo?
-Oh cierto!
-Algo más?
-Ya te están esperando y... muchos preguntan si iras a la audición.
-Ya sabes que no Donna.
-Sí, yo se los dije.
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She's got the look | Michael Jackson
Fanfiction'El mundo en el que vivimos es el baile del creador. Los bailarines van y vienen en un abrir y cerrar de ojos, pero el baile... el baile sigue vivo.' **Original por SamaraGM(SamJackson)
