She's got the look | Michael Jackson

Capitulo 3

-No bailabas como ahora, seguramente.

-“Eres la mejor”, esas fueron sus palabras al terminar la audición. Me buscó tras bambalinas y personalmente me informó que sin ninguna duda formaría parte del video, que tenía un futuro brillante y que me veía bailando en los escenarios más importantes, entre otras cursilerías más.

-Bueno, pero no se equivocó. Sigues aquí.

-Fui yo la que decidió darle la razón. De haber sido por él hubiese terminado mi carrera antes de que empezara.

-Pero, por qué? Qué pasó después?- Estaba muy interesada en saberlo.

-Me echó del estudio, del video, de todo lo que me involucrara en su patética vida. Se encargó de degradarme, de difamarme en todas las maneras posibles. Ya era un problema que tuviera diecisiete, no tenía experiencia y tampoco oportunidad de competir, pero bailaba, sabía bailar y hacer que otros bailaran también. Solo que si alguien como tu hermano, con su fama y prestigio, en vez de usar su boca para cantar lo hace para hablar mal de una “principiante”, cómo te imaginas que eso puede ayudarme?

-No lo sé- Le cuesta trabajo creerme, lo sé.

-Hacía las audiciones, llegaba a las competencias. Los jueces y expertos me aplaudían, me decían que era un maldito demonio bailando, que era la mejor, pero cuando buscaban referencias solamente encontraban la de Michael Jackson diciendo que era un riesgo innecesario. Le dijo a todo el mundo que no sabía controlarme, que perdía la cabeza y que lo único que traía conmigo eran problemas.

Me miraba incrédula, ya sabía que no me iba a entender, que ella pensaba conocer bien a su hermano. No esperaba que me diera la razón, de hecho nadie me la puede dar, es uno de esos tipos intachables que se encargan de cuidar bien su imagen pública y lavar el cerebro de medio mundo con una sonrisa encantadora y voz suave, dulce, al hablar. Pero yo sabía que no era así.

-No me crees, verdad?- Terminé de beber mi soda.

-Lo siento, (TN), pero no creo que Michael haya hecho algo así contigo. Lo conozco de toda la vida y ni siquiera en su momento más difícil se ha atrevido a actuar con rencor y malicia.

-Depende del momento que estés hablando.

-Por supuesto me refiero a... no, espera! Tú piensas que Michael es culpable del abuso a un niño?!

-Tengo mis razones.

-No! No las tienes! Crees tenerlas, pero no es así! Solamente lo dices porque estás molesta con él, ni siquiera sabes que en realidad pasó así.

-No me sorprende que dudes de mi- Me levanté del piso y caminé frente al espejo dándole la espalda a Janet.

-Necesito preguntárselo también a él.

-No lo hagas- La miraba por el reflejo en el espejo que seguía sentada.