𝓘𝓷𝓭𝓲𝓯𝓯𝓮𝓻𝓮𝓷𝓽•|𝓜𝓲𝓬𝓻𝓸 𝓣𝓓𝓗|

➳𝙲𝚑𝚊𝚙𝚝𝚎𝚛 𝚏𝚒𝚟𝚎

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║ 𝐒𝐚𝐬𝐡𝐚 𝐒𝐥𝐨𝐚𝐧- 𝐓𝐨𝐨 𝐬𝐚𝐝 𝐭𝐨 𝐜𝐫𝐲- ║

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A week later

Samuel entro a su departamento, extrañado por el silencio que se alojaba en este.

Cerro la puerta detrás de si, para sentir un olor extraño flotando en el aire...

Solo una cosa llego a su mente "Maria", soltó todo lo que llevaba consigo en el momento para correr lo mas rápido que sus piernas le permitían al cuarto de su hermana. Cuando entro en este, sintió un remolino de emociones, el esperaba llegar y abrazar a su hermana mientras veían una película, no encontrarla en tal estado.

Maria se encontraba en la esquina de su habitación, el olor a droga era lo único que se diferenciaba, y sabia que había vuelto a fallar.

—¿Que has echo?—Escucho Maria, y se arrepintió al instante en haber levantado la cara—

Samuel, su hermano se encontraba parado bajo el umbral de la puerta, mirándola con preocupación, haciendo que ella se sintiera solo como una carga—

Maria bajo su cabeza y dijo—No fui criada en un ambiente religioso, pero desearía que así hubiese sido—Su voz era vacía, y así era como se sentía, era un muerto en vida.

Samuel trataba de caminar con pasos lentos hacia su hermana, no quería asustarla, y en cuanto llego a ella solo atino a dejarse caer en el suelo, tratando de entender que era lo que pasaba.

—Pero siempre has dicho que no eres creyente...—Samuel levanto su rostro tratando de no hacerle daño.

—No tener nada en lo que creer ha estado matando mi entusiasmo—

Samuel miro al suelo, y solo veía mechones de cabello.

—Sí, corte mi cabello, y cerré las ventanas—Claro que Samuel lo había notado, el departamento se veía muy oscuro a como en realidad es.

—¿Y esa música?—susurro Samuel, sentía que sí llegaba a gritar Maria se alteraría, y era lo que menos quería—

—Puse "Allelujah" dos docenas de veces, y ayer intente rezar—Los murmullos de Maria apenas y se escuchaban—Pero no supe que decir—

—Pero sigues siendo fuerte, no has llorado por eso—Susurro Samuel.

—Estoy demasiado triste como para llorar—Los ojos de Maria representaban miseria, como ver a un payaso llorar—

Samuel me miraba como a un pequeño animal indefenso, que en cualquier momento echaria a correr para escapar de su cazador, que lejano estaba todo a lo real.

—Vamos, levántate de ahí—Me dolía tanto, me dolía hacerlo sentir de esta manera.

Hacerlo sentir dueño de mi miseria, que el tratara de sentir mi dolor me heria de mil maneras.

Porque después de todo lo quería tanto como para hundirlo en tanta mierda.

—Estoy demasiado drogada como para levantarme—Y ahi lo vi, solo eso basto para que el confirmara lo que estaba pasando—