Preguntas que incomodan
¿Alguna vez la navidad te ha parecido un infierno? Pues te tengo que informar que en mi vida eso es de lo más normal.
La tía maligna, digo, Igna, se la pasaba criticándome.
— ¿Aún no consigues trabajo o simplemente eres muy vaga y no quieres trabajar? —Me dijo con una voz malvada, la navidad anterior, mientras yo trataba de comer lo más rápido para poder irme de su casa.
Todos los años eran iguales, mis padres interrogaban a mis primos y la tía me criticaba. ¡No a mi hermano, el bully come mocos! Él sí se merecería un interrogatorio peor.
La navidad anterior tenía un plan para derrotar a la tía pero falló, cuando mi amigo Leo, se sintió presionado por las preguntas de la tía y confesó que no éramos novios.
Mi hermano de 13 años (El bully come mocos) me abrió la puerta y tranquilamente entré. Al llegar a la cocina me encontré con mi tía y mis padres, éstos estaban sacando del horno, un delicioso pollo con salsa de ajo.
—¡Hola Viv! —me saludó mamá llena de harina.
—¡Hola mi hijita! —me saludó Papá.
—Que bien que llegaste Viviana —dijo mi tía con un tono seco.
—Hola... —Les contesté a todos, incluyendo al moc-ully de mi hermano que miraba la tele.
—¿Dónde está el resto de la familia? —Pregunté.
—Elm y Uxia están arriba y el resto está viniendo por la autopista. —Me contestó Papá.
— Entendido... —Contesté.
Me senté en la misma mesa que mi hermano y me puse a leer un buen rato, hasta que empezó la picada. La tía me miraba como acechándome.
—¿Ya conseguiste pareja? —Me empezó a interrogar Igna.
—No l—e contesté en tono bajo y ella subió el tono.
—¿YA CONSEGUISTE PAREJA? —Volvió a preguntar la tía.
—¿Alguna vez me dejarías disfrutar de la cena de navidad?—Le dije mientras me metía un pinchito con salame, en la boca.
La tía se quedó callada, Moc- ully se comía los mocos y al mismo tiempo se reía. Papá se agarraba la cabeza, mamá comía como si nada su ensalada mientras se hacía la distraída, mis primos me miraban como si yo fuera un ejemplo por parar a la tía y la abuela no escuchó nada y se enganchó con un comentario descolgado, pero que me ayudó a zafar de la incomoda situación.
—Creo que soy la de espíritu más joven...—Opinó la abuela.
— ¡¿Eh?! ¡¿Cleopatra con espíritu más joven?! ¡Ni de casualidad! ¡Yo tengo espíritu mas joven! — exclamó Mamá al terminar su ensalada.
—¡Si tienen arrugas!—gritó come mocos.
— ¡Eso es ofensivo!—contestó Mamá.
—¡Para nada! —siguió luchando el bully.
Mientras mamá y moc-ully luchaban, la tía me susurró algo en la oreja.
—Lo siento si te hice sentir mal o te incomodé.
—No pasa nada.
—Yo sé que pasa, no lo haré más, te quiero.
La tía benigna, digo, Igna, me demostró que tras su interrogatorio, sólo se preocupaba por mí.
-Nuna Hovy-
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Cuentos en un estado dinámico ©
DiversosCuentos de varios generos, escritos a partir de disparadores, para el concurso: "Diciembre dinámico 2019"del perfíl de Wattpad AmbassadorsES.