Narrado por Olivia:
Despierto por el estrepitoso ruido de mi alarma, creo que debería poner una canción para el despertador, en vez de ese bep tan molesto, me levanto de la cama y me doy una ducha corta, envuelta en mi toalla busco en mi armario un atuendo profesional, opto por un vestido en color crema hasta las rodillas, y mangas cortas para estilizarlo me pongo un cinturon dorado a la altura de la cintura, la combino con unos tacones no tan altos en color crema y un bolso en color arena.
Acomodo mi cabello en una coleta sencilla y me maquillo de forma "sutil", salgo de mi habitación para desayunar y me encuentro con que ya todos mis hermanos se encontraban sentados a la mesa a Excepción de Juanes
—Buenos días—Les saludo
—Buenos días—Responden al unísono
—¿Y Juanes? —Les pregunto mientras me siento en mi lugar
—Sigue dormido—Responde Marie
Alfonsina trae mi desayuno y comienzo a comer con los demás
—¿A qué hora vas a la hacienda Monterde? —Me pregunta Manuel
Le doy un sorbo al jugo de naranja
—A las 09:00—Respondo—Llamamos a la hacienda y nos contestó una de las empleadas, nos dijo que el dueño podría recibirnos a esa hora
—¿Y porque te arreglaste tan temprano?—Me pregunta Camila
—Porque tengo que esclarificar un par de asuntos con ustedes, la oferta final, por ejemplo, y necesito un par de documentos que buscaré ahora con Santiago en el despacho—Explico
—La oferta será la que tu propusiste, ni más, ni menos—Aclara Santiago—¿Que documentos necesitas?
—Estados de cuenta, necesito revisar los libros para estar segura de que si hacemos el retiro de tanto dinero de una sola vez seguiremos contando con buena liquides por si acaso alguna emergencia pasase, también necesito mi documentación, la chequera—Hago una pausa—Y todo eso solo servirá si aceptan la oferta. También necesito aclarar algunas cosas con Pablo, quiero estar segura de cual es el porcentaje de las tierras que quieren los Gutierrez
—Pero combinándola con la de los Gutiérrez la oferta se ve muchísimo mas tentadora, no creo que pudiesen rechazarla sabiendo las condiciones en las que se encuentran—Comenta Manuel
—En efecto, creo que eso podría hacernos ganar los terrenos, si es que acaso no hubiese otros compradores—Respondo
—¿Quién más les va a acompañar? —Me pregunta Lucía
—El abogado de los Gutiérrez y Carlos—Responde Santiago
—¿Ya le pediste a Carlos que me acompañase? —Le pregunte
Santiago asiente
Terminamos de desayunar dejando ese tema a un lado y al terminar todos nos vamos por partes separadas a resolver nuestros asuntos
—Olivia—Me llama Santiago—Te espero en el estudio
—Ya voy, tengo que resolver algo primero—Me excuso
Salgo de mi habitación y entro en la de Lucía
—Hola Oliv—Me saluda
—Hola Lucí, no te podré llevar al ginecólogo, pero igual tienes que ir, toma tus cosas le pediré a uno de los trabajadores que te lleve a la ciudad, llamé al doctor Herrera, el te atenderá a las 10:30—Le aviso
Mi hermana hace caso de mi petición y juntas salimos de la casa
—¡Sebastián! —Le llamo
—Dígame Olivia—Responde quitándose el sombrero
