Capítulo 11. El preciado objetivo

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Metrópolis
20:28 p.m

Sasha Voiriuta camina por las calles de la ciudad, acaba de salir del trabajo, aunque se siente confundida debido a que hay poca gente transitando la ciudad.

Al doblar la esquina se siente vigilada, se detiene para girarse atrás, no hay rastro de alguna persona por lo que regresa su vista al frente y sigue caminando cuando escucha unos pasos detrás de ella.

Me están siguiendo. Fue lo primero que paso por la mente de la castaña, volvió a girarse. La banqueta esta vacia.

Iba a seguir caminando sin embargo una risa masculina detrás de ella le llamo la atención por lo que volvió a voltearse. Al analizarlo se percata que es un chico pelirrojo, tiene puesto un traje negro con el símbolo de una serpiente escarlata en el pecho y al parecer lleva puestos unos lentes oscuros como si se tratarán de una máscara.

--¿Quién eres?- preguntó Sasha, intentando distraerlo para poder salir corriendo --¿Qué es lo que quieres?-

--No debes preocuparte, preciosa.- la voz del chico esta distorcionada pero es vagamente familiar. Tal parece que él no tiene intención de contestar sus preguntas --No va a dolerte mucho.-

La chica fue dando pasos hacia atrás, buscando alguna ventaja con la cual salir de la atención de aquel hombre.

--Vamos, no hagas esto más difícil, Sasha.- él comenzó a avanzar hacia ella con una inquietante sonrisa dibujada en sus labios.

--¿Eh?- ella se quedo petrificada al escuchar su nombre saliendo de la boca de aquel criminal --¿Cómo es que...?-

--¿Conozco tu nombre?, ¡Ay, menudo drama!- el pelirrojo completo la pregunta al tiempo que corre hacia la chica y la sujeta de la cintura. Acerca sus labios al oído de la castaña --Sé mucho más que tu nombre, muñeca.-

Aquello le trajo un desagradable recuerdo pero no hizo más que enfurecerla, por lo que le dio un golpe en el estomago para que la liberará.

En cuanto él la soltó, la castaña se da la vuelta y empieza a correr por su vida. Tiene poderes pero no debe arriesgarse a usarlos y que el joven la descubra, sin embargo se percató de otra presencia masculina aguardando por ella.

Se trata de un hombre alto, casi dos metros, viste con un traje, pantalones y chaqueta negra, lleva puesto un cinturón amarillo, en su mano derecha carga con una pistola y lo más curioso es que su cabeza está cubierta con vendas.

--Silencio...- susurro la joven al reconocerlo como uno de los criminales de Ciudad Gótica.

El criminal le apunto y sin dudarlo disparó. La chica lo ve en cámara lenta por lo que esquiva la bala, necesita pensar en un plan y rápido.

--¿Qué crees que haces?- lo interrogó el desconocido, haciendo una mueca, molesto con el adulto --Sé supone que debe estar viva.-

El contrario asintió. Por lo que cambio la carga, de balas a dardos, para dejarla inconciente.

Voiriuta aprovecha esto para desaparecer de la vista de ellos. Un plan, eso es lo que ocupa.

La ciudad más cercana es Ciudad Gótica, podría contactar a Robin. No, tardaría demasiado en llegar. Pensó la chica, hasta que se le prendió el foco. Si lo que necesito es velocidad, ya a quien llamar.

Sasha puso todas sus fuerzas mentales para contactar con su amigo, mientras evita los constantes ataques de Silencio y aquel villano desconocido.

》¡Te necesito!《

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