Capítulo 21. En lo profundo de mi mente

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Sasha

Dispersos y en silencio, esa es la descripción perfecta del ambiente. 

Es interrumpido en el momento en el que Batman entra por la puerta y nos informa que Canario Negro atenderá nuestros problemas, será nuestra psicóloga y todo detalle que queramos exponer ante ella se quedara ahí. 

De inmediato lo percibí, todos estamos luchando contra nuestros demonios internos que salieron durante el ejercicio.

Espero mi turno recargada contra la pared divagando en mis propios pensamientos y nerviosa por lo que pasara durante la sesión. Hasta que unos fuertes pasos van acercándose en mi dirección, volteo con rapidez viendo al kriptoneano junto a la Esfera y Lobo, a juzgar por su rostro esta muy molesto.

Su mirada choca con la mía causándome pavor al instante por lo que desvió la mirada con rapidez. Sin embargo hago como si nada pasara, entablar conversación esperando ser ignorada o recibir solo un bufido como respuesta ya que eso suele hacer cuando esta enojado.

--¿Saldrás a dar una vuelta?- le pregunto mientras lo observo de reojo, esperando que siga de largo hacia su destino. 

Para mi sorpresa Superboy se detiene a mi lado.

--Uhm, si. Algo así.- 

Una sonrisa se posa momentáneamente en mi rostro, bueno ya es un avance. Me distraen el ruido de mas golpeteos al suelo, alguien corre hacia acá y tal parece que el mismo chico lo nota.

--Entonces date prisa, la compañía vendrá pronto. Diviértete, Conner.-

El nombrado asiente agradecido de que no trate de detenerlo, abre la compuerta donde sale junto a sus dos acompañantes por mi parte me vuelvo invisible debido a que no quiero meterme en problemas por esta situación. Agradecida por mi rápido actuar, Batman aparece en mi campo de visión tomando el auricular que Conner ha desechado.

Supe que mi momento ahí ha terminado por lo que levitando y permaneciendo en mi estado invisible me voy de esa área con cuidado de no alertar al caballero de la noche.

Así que el único lugar disponible se volvió la sala del Monte, lugar que todos compartimos hasta el momento de ser llamados por Canario Negro. Claro que decidí sentarme lo mas alejada posible, me sentía algo avergonzada y decepcionada además no me apetecía hablarlo con ellos.

Aun no.

Al ver salir de la pequeña habitación a uno de mis amigos es cuando comprendo que ha llegado mi turno. Dudosa y asustada ante la idea de revelar lo que experimente es que abro la puerta, camino por el cuarto sintiendo la mirada de Canario hasta que tomo asiento frente a ella.

La rubia espera que diga algo.

Abro mis labios sin embargo no sale sonido alguno, como si me hubiese quedado muda.

--Estas abrumada, lo entiendo. Toma un tiempo para respirar y organizar tus pensamientos.-

Inhalo y exhalo. Inhalo y exhalo. Inhalo y exhalo.

--Yo...- cierro mis ojos con fuerza, los recuerdos son tan frescos que atacan mi memoria una y otra vez --Me siento culpable.-

--Cariño, es algo que estaba fuera de tu control.-

--No hablo sobre lo que ocurrió conmigo y M'gann.- le aclaro desde un inicio, no es ese asunto el que me atormenta. Hago una pausa, esto me esta costando mas de lo que había pensado --Me refiero a lo que paso dentro del ejercicio. Yo pude haber hecho tanto, pude haber salvado a tantos, pude haber impedido sus sacrificios, pude haber detenido todo... pero no lo hice. No lo hice.-

Aprieto mis puños, mi corazón late con fuerza y un ardor comienza a hacerse presente en mi garganta.

--¿De que sirve esta habilidad si ni siquiera puedo usarla bien? ¿Para que tener este inmenso poder si temo usarlo por completo? Me siento culpable por ello, por haber tenido la posibilidad de haberlos salvado y no haberlo hecho; de tener tanto miedo de provocarles un daño que prefiero limitarme.-

--Sasha...-

--Fui egoísta.-  

Se formo un silencio, Canario me miro sin decirme algo para reconfortarme, pude notar que sabe que no le he dicho todo.

--¿Hay algo más que te atormenta y no estas diciendo? No tengas miedo de hablar, puedo ayudarte.-

Arrugue mi ceño, confundida por la seguridad de sus palabras.

¿Cómo lo sabe? A menos que... a ese hablador compulsivo se le saliera.

--C.F.- hable entre dientes aunque no lo culpo, bajo presión suele escupir la sopa y decir cosas de más. Suspiró sacando la pesadez que se ha estado acumulando, sería bueno decirle, podrían ayudar o podría servirles la información --Es sobre hace unos días, desde antes de que nos atacarán a Wally y a mi. Cuando accidentalmente ataque al equipo.-

El semblante estoico de la mujer parece flaquear.

--Nunca se los dije pero en ese instante yo escuche a alguien hablando como si supiera que lo estaba escuchando. Luego mi mente se nublo, sentí que me faltaba el aire y no podía controlarme... me sentí fuera de si. ¿Entiendes? Como si solo fuera una espectadora sin poder ejercer control sobre mi misma y ni siquiera era consiente de lo que hacia.-

Relamí mis labios y mantengo mis ojos cerrados tras la declaración que planeo decir.

--Tengo miedo.-

[ ○ ○ ○ ]

Mis pulgares tocan esa pequeña pantalla cambiando constantemente lo que veo, no hay realmente algo que me interese. Algo salta en mi pantalla logrando asustarme en el momento, me tranquilizo al enterarme que solo se trata de un mensaje de Owen preguntando por mi estado actual.

Le contesto con un vago bien, no quiero involucrarlo más de lo que ya esta. 

Solo estoy aquí, en el techo de un edificio cualquiera de Metrópolis, meditando las palabras que Canario Negro me dijo hace unas cuantas horas.

Suelto un suspiro, estoy agotada.

Una llamada hace vibrar mi teléfono. Numero desconocido es lo que se lee en la pantalla, mi decisión inmediata es ignorarla pero vuelve a llamar una y otra y otra vez. No cedo ante las constantes interrupciones pero parece ser que no se detendrá hasta que conteste y eso es lo que hago. 

--¿Hola?-

La voz al otro lado hace que casi me atragante.


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⏰ Última actualización: Apr 22, 2022 ⏰

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