¡𝐃𝐞𝐣𝐚𝐦𝐞 𝐛𝐞𝐬𝐚𝐫𝐭𝐞! ➷ Bellota×Butch

Decimosexto intento

Bellota estaba en el piso, cruzada de piernas y con un bowl lleno de fruta seca, metiéndolas en un hilo, convirtiéndolas en guirnaldas para adornar el árbol.

- ¡Bellota! ¿Dónde pongo estos renos? - Preguntó Butch desde otro lado de la sala, sosteniendo dos renos decorativos de un metro.

- ¡No lo sé! ¿Junto al árbol? - Contestó, sin dejar lo que estaba haciendo.

Bellota terminó con la vigésima guirnalda, y se dispuso a seguir con la siguiente si no fuera por unos fuerte brazos que abrazaron su cintura.

- ¿Qué pasó, Butch?

El chico olfateaba su cuello, causándole un cosquilleo en el estómago a la joven al tenerlo tan cerca.

- ¿Qué estás haciendo? Dame espacio, idiota. - Protestó. Butch simplemente se acomodó para poner a Bellota entre sus piernas. - ¿Qué estás...?

- Me gusta estar así. - Apretó el agarre en su cintura.

Bellota frunció ligeramente su ceño y volteó su cara al lado para poder ver a Butch. Él sonrió, una sonrisa demasiado linda para la pelinegra, pero no apartó la cara, algo que aprovechó el chico, acortando la distancia a medida que se acercaba a sus labios, pero Bellota volvió su rostro hacia el bowl en sus manos.

- ¡Oh, vamos! Ya casi acaba el año, quiero mi regalo. - Protestó Butch, haciendo reír a la chica.

- Mejor ayúdame con las guirnaldas.