𝐄𝐑𝐄𝐒 𝐔𝐍 𝐓𝐎𝐍𝐓𝐎 ❝ ❞ ˢᵃˢᵘˢᵃᵏᵘ

ᴛᴏɴᴛᴏ, ʙᴏʙ

NO PUEDES HACER NADA BIEN, ERES UN INÚTIL, INSERVIBLE.

-¡Me odio, me odio, me odio!.

Su garganta dolía como el infierno, tanto como todo su mísero cuerpo lastimado.

Ni unos fideos instantáneos a la hoya podía hacer. Al tratar de hacer estos, terminó con toda el agua hirviente en el piso, fideos en su camisa y él perdiendo la cordura en plena cocina.

Perderla a sido costumbre esos días de soledad.

-Siente la culpa... idiota... ¿cómo pudiste?.

Hablaba con su reflejo en el espejo, o lo que quedaba de él en el piso.

-¿Llegar a este punto...?, ¡¿Llegar a este punto y recién darte cuenta?!.

Lo perdió todo.

La necesitaba.

-¡La amo, joder!.

No la amaba, la ama, pero no la atesoró.

-¿Me lo merezco?... sí, ¡todo y más simio de mierda!.

Allá iba a por la macetas que se ubicaban en la ventana, sólo para romperlas y aplastar las flores. Eso hasta que sintió unos golpes en la puerta.

-¡Un paso más y date por muerto, Uchiha!

¿Sakura?.

-Soy Ino, imbécil.

De igual manera la rubia entró con las llaves de repuesto que sabe donde el par la esconde. Mal escondite por cierto.

-¿Qué quieres?.

Una cachetada.

-¡¿Qué demo-

Otra cachetada.

Y otra, y otra, y otra.

-Me vas a escuchar, Uchiha, eres un desgraciado.

-Dime algo que no sepa...

-Simpático -Dijo irónica- Ahora, ayúdame a limpiar esto antes que vuelva a golpearte.

Apesar de que la idea sonaba tentadora para Sasuke, en silencio acató la orden y fue a buscar un par de guantes, un par de escobas y el recogedor.

Dos horas más tarde ambos se encontraban parados en la habitación ex-matrimonial, sólo observando y analizando.

-Dime, ¿qué ves ahí?.

Apuntó al mueble de madera.

-Un cajón vacío.

Porque se había llevado sus ropas.

-¿Qué hay de esos clavos?.

-Ahí teníamos fotos de nuestra luna de miel... pero busqué los cuadros y no están aquí en la casa.

Ambos fijaron su vista en el marco de la venta, cerrada y con las cortinas blancas que cubrían la íntimidad de la habitación, justo donde descansaba aquel anillo color ámbar.

-No necesito preguntar -Dictó.

Sasuke sólo asintió apenas.

-¿Y eso?.

Apuntó a un parlante.

-Donde Sakura ponía sus canciones pop.

-¿Desde cuando no las pone?.

-Un par de meses... -Esquivaba la filosa mirada de la rubia.

-¿Sabes la razón?, ¿te haces alguna idea?, Uchiha.

-Para no... molestarme.

-¿Haciendo qué?.

-Mi trabajo.

-¿De verdad?.

No hubo respuesta.

-La engañabas, vamos, dímelo.

-¡Un momento, nunca le he sido infiel!.

-¡Con todo el daño que le has hecho no me sorprendería!.

-¡Estaba buscando lo mejor para los dos!.

-¡Estabas buscando lo mejor para ti!, ¡¿es que no te das cuenta?!.

-¡Se me fue de las manos!, ¡no sabes cuanto me duele en sólo pensarlo, en sólo hacerme la idea de que ella estaba empacando sus cosas mientras no estaba!, ¡¡me tenía miedo!!.

Golpeaba el suelo con todas sus fuerzas, desquitándose.

-¡¡Crecí teniendo nada, debía tener tres empleos si quería tener un mísero techo y comida que apenas llegaba al fin de mes, todo solo, sin ayuda, sin padres ni hermanos, con tíos que no querían hacerse cargo de un huerfano!!.

Ino eso lo sabía.

-¡¡El tener a Sakura conmigo iluminaba mi camino, me daba razones para no desaparecer, me hacia valer por mi mismo con tal de que esté a mi lado, no le importaba de donde venía sino a donde quería llegar!!.

Entonces lo abrazó, sin importar que tan fuerte este agarrara su abrigo.

-Cuando aceptaron mi proyecto... lo único que hice fue correr y abrazarla, besarla mientras me consolaba y la amé esa noche... pero al siguiente día me cegó la idea de que si me descuidaba todo mi esfuerzo se iría a la basura y... y... ¡¡no quería quedar sin nada otra vez, no quería que Sakura me dejara porque fracase!!... ¡¡joder, quería darle todo, lo que me pidiera, sea lo que sea se lo iba a dar!!.

-En este mundo, uno debe tener más para conseguir amor. Sakura no es así, ella no le hubiera importado "vivir en la pobreza" si tú la siguieras amando, esta tonta por ti Sasuke.

-Ella quiere tener hijos, yo también quiero, esperé este momento todos estos años, pero si no tenía nada... ¿cómo los iba cuidar?, deseo que a mis hijos no les falte nada, ni techo, ni comida, ni ropa, ni útiles, ni una cama...

Logró calmarse hasta quedarse dormido.

-Cariño, ¿lo tienes?.

Vió como apagaba la grabadora de su celular.

-Es un idiota que sólo necesitaba desahogarse, eso y algunas cachetadas.

-Tiene todas sus mejillas coloradas...

Ino bufó con una sonrisa.

-Se lo merecía igualmente, ya no es un niño.

-Aún creo que está ese chico adolescente apasionado.

-Tú lo dijiste, amor -Sonrió- Aún se pueden enmendar las cosas.

Claro que sí.

perras ganas de actualizar esto, pero tío wattpad no me dejaba..
próximo capítulo final y después epílogo ouh😔

LITERAL ESTOY SUBIENDO ESTO DESDE EL CELULAR DE MI MAMÁ, Q RABIA PARCE