Siempre a tu lado

Capítulo 3

Antes de terminar de ver la película, nos llamaron a almorzar.

-¡Vamos Jon!

-Ya voy, deja que le ponga pausa.

Bajamos velozmente y nos sentamos frente a mis padres.

-Y Damian... ¿Emocionado por ir al festival a solas con Jon?, Me he enterado de que los festivales son muy románticos...

¡Papá! ¡¿Que mierda haces?!

-Sí, yo escuché lo mismo, es el sitio ideal para ir con tu novio.

¡Mamá! ¡¿Tú también?!, No pude evitar el ponerme rojo de la vergüenza, espero que Damian haga como que no escuchó...

-Por eso mismo estoy emocionado, señor y señora Kent.

-Para este hermoso evento, no hay mejor compañía que Jon, aunque Jon ya es buena compañía de por sí.

Ahora me está ardiendo hasta el cerebro, ¡¿Cómo se le ocurre decir algo tan vergonzoso así como así?!

-Realmente Damian, me hace feliz escuchar esa opinión... ¿No te hace feliz Jon?

Toda la mesa voltea a verme, Damian esperando a que diga algo, y mis padres "apoyándome".

-Sí, me gusta saber de qué disfrutas mi compañía.

-Damian, una pregunta ¿Cómo es tu relación con tus hermanos?

Mi papá me logró rescatar.

-Bueno... Dick en como una mamá oso, al inicio no nos caíamos bien, pero cuando mi padre le contó la situación... Empezó a actuar como una madre, no como la mía, sino como una sobreprotectora. Jason es con quién suelo entrenar, solo hablamos en esas circunstancias y cuando uno está siendo reprochado por Dick, nos hacemos una señal y nos atacamos como un "entrenamiento sorpresa" Grayson era trapecista, "entiende" que es mejor practicar a que en "la presentación" uno se rompa algo. Con Drake hablamos de tecnología y homicidios, resolvemos distintos casos para luego llevar al culpable ante la justicia antes que la policía, ambos nos encanta Sherlock y avergonzar a la policía cuando se los entregamos junto a un montón de papeles con su caso.

-Lo lamento, pero ¿A qué situación te refieres?

- Yo iba a ser el próximo Ra's al Ghul, pero atacaron la base, mataron a la entonces cabeza, eso hizo que mi madre me presentara a mi padre para que se encargue de mí, luego de ver qué era Batman y lo que hacía quise ayudarlo, pasaron muchas cosas y salí de la Liga de los asesinos, decidí quedarme con mi padre y que no volvería a matar a nadie, pasaron 2 años y me dijo que estaba listo para conocer a mi compañero, ahí descubrí al terrón de azúcar de su hijo, sé que no tuve lo que llaman una "infancia normal" pero espero que me deje seguir siendo amigo de su hijo.

-Claro Damian, nosotros ya lo sabíamos, solo veíamos si eras honesto, queremos que nuestro hijo sea feliz.

¡Mis padres ya lo sabían!

-Siempre soy honesto, odio las mentiras, me mintieron mucho cuando era niño y sé que no lleva a nada bueno. Tampoco miento cuando les digo que su hijo es lo más importante en mi vida y el conocerlo fue lo mejor que me ha pasado y me pudiera pasar.

-Dami...

Así terminamos de almorzar, no pude pensar en otra cosa que no fueran las hermosas palabras de Damian.

-Hijo, ¿Puedo hablar un segundo contigo?

-Claro papá, Dami ¿Me esperas arriba?

-Bueno, hay que terminar de ver la película.

En tanto mi morenito favorito desapareció mi papá me acercó y me abrazó.

-Estoy tan feliz de que seas correspondido, ¿Viste que no era tan difícil averiguarlo?

-Solo dijo un par de cosas buenas de mí, aún no estamos seguros. ¿Y si lo entendimos mal y se arruina la amistad?

-¡¿Es enserio?! Luego de dar un discurso de que eres " lo mejor que le ha pasado" ¡¿Aún tienes dudas?!

Dijo gritando en un susurro.

-Concuerdo con tu padre, le gustas, es obvio.

-Voy a subir, Damian debe estar preocupado.

Subí antes que mis padres hicieran otro comentario que me eleve la esperanza.

Al abrir la puerta me encuentro con él reclinado en mi cama.

-¿Tuviste problemas?

-No, no te preocupes. Solo querían saber si te gustaría shawarma para cenar.

Ya sabía que me iba a decir que sí, le encanta, por suerte planee el menú de esta semana con mis padres incluso antes de preguntarle si vendría.

-Me encantaría, aunque también me gustaría terminar de ver la película antes de la cena.

-¡Cierto!

Como él usaba toda la cama, me senté en el suelo, aunque preferiría estar arriba con él, es mucho más cómodo.

-¿Qué haces? Yo no muerdo, ven.

-Bu-bueno.

Empezaba a sentir un leve ardor en las mejillas. Me pare y me senté en la cama, Dami me agarró de la cintura y me reclinó a su lado.

-Si te sientas me tapas, aparte de esta forma es más cómodo.

Luego de unos minutos ambos nos quedamos dormidos hasta que mi mamá nos llamó a cenar. Por suerte mis padres no hicieron o dijieron nada vergonzoso y hablamos cosas como el hecho de que mañana no teníamos planeado nada, por lo que con Damian vamos a ir al parque y tomar unos helados.

Luego volvimos a la habitación para prepararnos para dormir.

-Recordaste lo del pijama.

-No podría olvidarlo, siempre lo pides.

-El cuarto ordenado, mi pijama favorito y  shawarma de cenar... Eres muy atento y amable, si hay algo que pueda hacer por tí, estaré encantado de cumplirlo.

-Ahora mismo nada.

-Mi ofrecimiento sigue en pie hasta que lo necesites.

Le sonreí y me fuí a bañar, luego me puse pijama, me cepille los dientes y salí para darle espacio a Damian.

Más tarde Dami salió del baño con su hermosa vestimenta preparando para dormir.

-¿Te puedo pedir un favor?

-Desde luego, no hay problema.

-¿Me podrías recordar tomar estás pastillas? Una en la mañana y una en la noche.

-Por supuesto Dami, pero ¿Para qué son?

-Nada importante, solo son para prevenir una alergia.

-Ahhhhh, ¿Qué alergia?

-¿No te reiras?

-Jamás por una alergia.

-A las plumas de las aves, sé que en Metrópolis hay muchas y sería desagradable que este antialérgico no me protegiera.

Luego nos fuimos a acostar, no pude parar de pensar en las palabras tanto de Damian, como de mis padres. Ojalá fuera cierto de que siente algo más que amistad.