Adicción - Creek

UNO

Llegó al edificio para alzar su mirada hacia arriba. El sol estaba llegando dándole al cielo toques rojizos a contraluz del edificio, no se podía distinguir bien el nombre de "Centro de Rehabilitación de menores del parque del sur" pero tampoco como si importa. Entro al edificio y los hombres los guiaron hacia su cuarto dándole unas llaves

El moreno frunció el ceño para levantar ligeramente una ceja evidenciando su duda

—No creas que puedes salir, hay guardias en el perímetro, solo es porque si te dan ganas de mear—se retiró dejando al de sangre Latina

Tomó el ascensor, vio su llave que decía "B-12" presionó hacia el piso "B". El cual era de los últimos; mientras esperaba diviso por el cristal  todo el edificio hasta llegar al piso de su respectiva habitación. Bajo y empezó a buscar y sin mucha dificultad la encontró. Abrió su cuarto y tiro su mochila y observó como al lado de la ventana había una cronograma

✓Desayuno: 8:30-9:30
✓ Terapia grupal (grupo "A")Tuyo:9:30-13:45
✓Almuerzo: 13:45-14:25
✓Terapia individual (salón "C"):14:25-15:55
✓Descanso: 16:00-17:00
✓Terapia deportiva:17:00-17:45
✓Terapia artística: 17:45-18:30
✓Yoga (opcional): 18:30-19:50

Ojeo un poco para recostarse en la no acogedora cama, vio el frió techo y suspiró. Un pensamiento paso,¿Y si sus padres lo habían mandado ahí porque se habían cansado de él? El ya siempre se sintió como la oveja negra de la familia...pero nunca pensó que llegarían a tal punto; es todo, necesitaba un cigarro y, afortunadamente, no habían registrado sus pertenencias pues entre sus calzones había una cajeta de cigarrillos y un encendedor. Pero, ¿Y si las alarmas detectaban el humo? Una presión en el pecho apareció. Las manecillas del reloj resonaban en sus oídos y lo aturdieron a tal punto que lo hicieron ver. 9:23, quizás pueda llegar a la terapia grupal, si escuchar a otros sus problemas y hacer como si te importan
Se levantó y guardó su cajeta de cigarrillos junto con el encendedor en la sudadera y se dirigió al salón

Estaba bajando cuando un rubio de aspecto familiar entró, lo reconoció, pero no tenía ganas de saludarlo

—¡Fucker!—saludó el rubio con una sonrisa burlesca llamándole con el apodo de hace años—¡No te veo desde primaria!, ¿Cómo va todo?—preguntó

—Oh...muy bien, por esto estoy aquí porque mi vida es de color de rosa—respondio odiosamente el de menor tamaño

—Algo es seguro, no creciste desde 6to grado—rió Mccormick

—Tampoco te creció el diente—comentó haciendo reír al rubio

—Algunas cosas nunca cambian— se recostó hacia el cristal, quedándose en silencio—¿Grupo "A"—le preguntó recibiendo una respuesta afirmativa de parte del pelinegro

Kenneth Mccormick, posiblemente el menos idiota del grupito de Stan, y el único de aquel grupo que no le caía mal. Lastima que tuvo que irse a una escuela más pobre, como ya no se le veía muy seguido, bromeaban que había muerto

—Aquí es—anunció Kenny sacando de sus pensamientos a Tucker a quien, arrastro hacia afuera
Entraron en el salón para que el tiemble sonará dando iniciación a la terapia. Kenny y Craig se sentaron en las sillas plegables

—Muy bien chicos, como muchos son nuevos nos presentamos—inició el diálogo el terapeuta—empiecen con. Su nombre, edad, vicio y que les motivo a estar aquí; yo por ejemplo estoy aquí para alejarme de mi ex novia de Pensilvania—los jóvenes se les quedaron viendo—es broma, nos encanta bromear aquí. Tengan mi foto—entro las fotos a los muchachos—empecemos de izquierda a derecha—

Un muchacho de cabellos negros y rizados vestido de ropa gótica inicio—Soy Michael, tengo 17 años y soy adicto al tabaco. Vine aquí porque me di cuenta que es conformista ahogar tus penas en tabaco—

Así como el pasaron varios muchachos, a Craig no le importo disimular el hecho de que se mostraba indiferente

—Soy Kenneth Mccormick, pero dígame Kenny—Saltó el rubio haciendo poner atención al peruano—tengo 15 años recién cumplidos y soy adicto a la heroína. Estoy aquí—dio un suspiro de nostalgia—porque no quiero que mi hermana se meta en este mundo de mierda—concluyo

—Soy Craig Tucker, tengo 16 y en unos meses cumplo 17. Soy adicto al tabaco—habló claro y directo, no tenía intensión de quedarse ni 5 minutos hablando de eso

Fue a volver a sumergirse en su pensamiento cuando el se paró. Un muchacho de piel blanca llenas de pecas, una desordenada cabellera rubia vestido de una camisa verde mal abotonada; sin embargo eran sus ojos lo que los atrajo, eran de un azul mar con un brillo gris bastante singular, pero estaban apagadas y sin vida por lo que eran más notorios sus ojeras

—Soy Tweek Tweak y tengo 15 años—habló con ciertos nervios, todos le miraban y eso parecía ponerle nervioso. Mordió su labio antes de proseguir—S-Soy adicto a la mentafetamina, ¡Gah!—se sentó rápidamente para que el resto del grupo se presentará