• Black Shadows; Jjk •

Capítulo³

-Lamento no poder atenderla el día de hoy señorita Johnson- Habla mi psicólogo al otro lado de la línea- Surgió un problema con mi madre y he ido de inmediato a atenderla

-No se preocupe, de todos modos no llevaba mucho esperando- Lo cual es una vil mentira, he estado para fuera del consultorio alrededor de una hora- Entiendo que tiene sus problemas

-Aun así, he enviado a un psicólogo a que me reemplace el día de hoy- Anuncia y puedo escuchar como jadea a través del teléfono. Frank se encuentra agitado- Puedes sentirte tranquila, es uno de los mejores que conozco, te hará sentir a gusto con su compañía. Su nombre es Kim Yiung

-Ya que, lo esperare- Respondo de mala gana y automáticamente cuelgo notoriamente molesta ¿Para eso le pago?

Diez minutos después, un hombre alto se detiene cansado a mi costado. Se encuentra agitado debido a que ha corrito lo más rápido que pudo para venir, tiene las manos en las rodillas tratando de recuperar el aliento y veo como me mira de arriba para abajo. Ha de ser él

-¿Eres Kim Yiung?- Pregunto y el sujeto mira hacia todos lados y asiente- Soy Cloe Johnson, el psicólogo Frank dijo que el día de hoy seré atendida por usted

El hombre vuelve a asentir, me toma de la muñeca para jalar mi brazo y llevarme rápidamente dentro de la oficina. Cierra la puerta con llave, algo que me pone muy nerviosa y en alerta ya que Frank no suele hacerlo. Kim voltea a verme y por primera vez habla

-Es para evitar que nos interrumpan- Su voz es tan grave que me pongo rígida al instante, pero luego sonríe. Él es muy alto, posee unos ojos grises muy hermosos y porta el cabello castaño, tiene una sonrisa cuadrada y tan infantil, que no combina con su voz varonil.

Se pasea por el lugar buscando algo hasta que se detiene en un punto fijo en la esquina del cuarto, se queda viéndolo muy molesto y le susurra un 'Ahora no' Que extraño. Toma una libreta, un bolígrafo y me mira feliz, como si nada hubiera pasado

-Podemos comenzar- Suelta por fin

Todo esto me resultaba raro, pero decidí relajarme y empezar la sesión de lo más normal. No quería hacer tanto problema.

Estuvimos hablando por al menos cincuenta minutos, cada cosa que le contaba él respondía con un 'Ya lo sé' lo cual no me parecía raro debido a que tenia la libreta de Frank en la mano, así que deduje que estaba leyendo los apuntes de mi psicólogo. Conforme pasaban mas y mas los minutos, el señor Kim se ponía cada vez más inquieto, no podía mantenerse sentado sin voltear a cada rato la mirada. Veía desde mi asiento como giraba su cuerpo y decía en vos baja 'Ya cállate, estas asustándola'

Parecía tenerlo bajo control hasta que llegó el momento en el que se hartó, volteó molesto y grita sin importarle que estuviera yo ahi- ¡Déjame en paz Dylan!

Aquello me dejo en shock, no había nadie en la habitación a parte del señor Kim y yo.

El grito pareció llamar la atención de los enfermeros cerca del lugar porque a los segundos ya estaban tocando la puerta.

-¿Paciente 5? ¿Te encuentras ahí?- Dijo un señor del otro lado de la puerta. El sujeto a mi lado se puso alerta y otra vez le dijo '¿Ves lo que ocasionas?'

¿Por qué le está hablando a la nada?

-¿Qué?- Dije en un susurro y la puerta se abrió de golpe. Estaba tan absorta mirando al hombre frente a mí, que me había olvidado por completo que intentaban abrir la puerta

-Gracias al cielo que estas aquí- Habla el hombre, no se veía mayor. Este portaba una bata blanca y los ojos con ojeras, al parecer no durmió lo suficiente- ¿Por qué te volviste a escapar?