ɢʀᴇᴇᴅʏ - ᴊᴜɴꜱʜᴜᴀ [ᴄᴏᴍᴘʟᴇᴛᴀ]

dos

¿Estás loco como yo?

¿Has sentido dolor como yo?

Gasoline - Halsey

Literalmente pasaban todo el día, todos los días juntos, excepto por un par de clases que no compartían.

A la salida de clases Joshua llamó a Jun, ya que no lo encontraba por ninguna parte y ellos siempre salían a la misma hora. Lo normal era que se reunieran en la entrada del instituto.

Jun se dirigió al baño a tomar un poco de agua, tenía su celular descargado, y sabía que Joshua probablemente se preocuparía, así que trató de ser rápido, sin embargo cuando estaba por salir alguien, al parecer de su mismo grupo, le estaba obstaculizando el paso.

-Disculpa, ¿Necesitas algo?-preguntó Jun totalmente confundido

El mayor se tronó el cuello, antes de alejarse del marco de la puerta, acercándose, haciendo que Jun retrocediera sobre sus pasos. El aura del tipo era intimidante, eso pensaba Jun, pero era distinto que con Joshua. Sentía miedo real, toda la situación le indicaba peligro, por lo que intentó pasar de largo para arrancar, no obstante, sintió que lo agarraban del cuello de la camisa, obligándolo a caer sobre sus rodillas. No entendía qué estaba pasando, no sabía quién era, no sabía lo que quería.

-Ya, entren-voceó el tipo y de pronto entraron dos compañeros más y uno de ellos cerró la puerta tras su espalda

-N-no entiendo que es lo que quieren-articuló Jun totalmente desesperado, no era primera vez que le pasaba algo así, había tenido muchos problemas en su anterior escuela, pero ahora había hecho lo posible para no perturbar a nadie y no generar problemas, prácticamente casi nadie lo conocía en ese instituto

-O cierras esa boca o te irá peor-le amenazó quien ahora estaba a su lado

Uno de los que acababa de entrar se agachó frente a él y lo tomó del pelo para que lo mirase.

-Así que nuestro compañerito nuevo resultó igual de marica que el imbécil de Joshua Hong, ¿No es así? Responde-insistió el tipo jalándolo aún más fuerte del cabello

Jun omitió toda respuesta y como resultado su cabeza acabó impactando contra la cerámica, quedó totalmente aturdido, aún así podía seguir escuchando las cosas horribles que le decían mientras pateaban su estómago

-¿Te gusta Joshua, no? Ya te cogió la boca me imagino-decía el tipo

-Seguro ya se lo cogió-añadió el tipo a su lado, quien observaba con una sonrisa maliciosa

Jun no iba a responder a nada, las lágrimas comenzaron a acumularse en sus ojos. ¿Por qué tenía que pasar por todo esto? ¿Por qué no podía estar Joshua ahí para ayudarlo?

-Paren, con eso es suficiente-demandó el tipo que aún se encontraba apoyado en la puerta

-Qué lástima, pensé que iba a poder divertirme con poco más-dijo mientras observaba el rostro de Jun

-Ya, te dije que lo dejes, ¿O quieres que te golpee a ti, ah?

El joven dejó salir un suspiro.

-Esto es sólo un pequeño mensaje para tu enamorado-advirtió el mayor antes de abandonar el baño junto a los otros dos

Jun se reincorporó y escupió un poco de sangre antes de sentarse con la espalda recargada en las cerámicas. Al fin todas esas lágrimas que retuvo salieron. Ya no podía evitar quebrar en llanto, no entendía lo que acababa de pasar, su abdomen le dolía, la cabeza le dolía, tenía el labio roto, no quería salir así, no quería que nadie lo viera.