Comienzan las prácticas

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Han pasado tres semanas desde que Midoriya y yo nos ignoramos totalmente. Por mi parte, lo hago más por despecho que por que me lo pidiera. Cada vez que llegábamos a mirarnos yo volteaba con desdén, pero ya ni siquiera demuestro ofuscación, solo lo ignoro. El tiempo ha pasado y ninguno de los dos nos dirigimos la palabra, en ningún caso, cosa que no pasó desapercibido para nuestros compañeros. Un día Zero preguntó en frente de todos que nos ocurría, pero yo respondí en tono muy desenfadado que no era nada. Los demás se quedaron mirando, pero desde ahí nadie ha hecho algún comentario. Mina intentó preguntarme pero le dejé claro que no tenía intenciones de hablar de ello. No sé si a él le habrán preguntado alguna cosa, pero por lo menos yo solo hablé del tema con Tsuyu, su único comentario fue que el tiempo tendría la última palabra.

Para olvidarme de todo me enfoqué en los estudios, di todo de mí en los exámenes, mis notas fueron buenas pero no excelente, aunque definitivamente me alegra no haber tenido que dar exámenes de recuperación. Como el profesor Aizawa dijo, tuvimos que comenzar nuestras prácticas, aunque las dos primeras semanas fueron más administrativas y de apoyo. Se me explicó que el crimen había aumentado un 23% este mes y que algo extraño ocurría con los malhechores, debíamos ayudar con la información en los casos y cosas parecidas. Creo que por el hecho de que estábamos en exámenes, cuando salimos de clases el estar en terreno se intensificó. Volví a hacer mi práctica con la heroína n° 10 de todo Japón, Ryukyu. Como era mi práctica final comenzaba a sentirme nerviosa, las cosas estaban siendo más duras de lo que esperaba.

-¿Estás bien? – Preguntó Ryukyu – tu cara se ve extraña.

-N-No es nada, solo estoy nerviosa – dije, sujetando mi estómago.

-¿Por qué?, si es lo mismo de siempre – se burló.

-Lo siento, es solo que es la última práctica – dije, jugando con mis dedos – y desde ahora será como si fuera una profesional.

-Tranquila, siempre has sido muy sobresaliente en todo el tiempo que has trabajado conmigo.

-G-Gracias – me ruboricé por el elogio.

-Pero no te mentiré, las cosas han estado algo complicada este último tiempo – la miré expectante a los detalles. – Que el crimen aumentara un 23% en un periodo tan corto es algo alarmante. Los criminales actúan sin ningún reparo, es como si ni siquiera tuvieran conciencia de los riesgos.

-Me he dado cuenta, la última vez que fui a patrullar hubieron tres incidentes al mismo tiempo, con los demás héroes tuvimos que separarnos para dar abasto.

-Así ha sido este último tiempo, hay veces que los profesionales no somos suficientes. En los interrogatorios se les ha preguntado a los delincuentes por sus vidas personales, pero están tan confundidos que no coinciden sus antecedentes con lo que relatan.

-Pero puede ser que estuvieran simplemente mintiendo.

-Lo pensamos, pero el caso se repite demasiado. Con el quirk de una persona que puede saber si mientes o no comprobamos que ellos de verdad creen sus historias. Es terrible, algunos son padres o madres de familia que llevaban varios días desaparecidos.

-¡qué horror!

-Es por eso que pedimos a la academia que comenzaran su práctica pronto. Necesitamos vigilancia extra por todas partes.

-¿Y ya descubrieron si la liga de villanos está relacionada con estos incidentes o son hechos aislados?

-Aun no lo sabemos, por eso debemos seguir investigando.

-¡De acuerdo! ¡Ahora mismo saldré a patrullar! – exclamé, decidida.

-Yo debo ir a otra parte por ahora y las demás ya se fueron ¿podrás patrullar tú sola?

¿Qué siente por mí?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora