CAPÍTULO XXV

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Maratón 2/3

Leigh Anne dejo a la rubia en su casa, y en cuanto entro sus padres la esperaban en la sala para que les contara que había pasado con Bianca, pues no habían querido ir al hospital para no incómodar siendo muchas personas ahí y al final no harían nada, la rubia les conto todo y después de un rato de que Debbie y Alexander la consolaran se fue a su habitación, donde al entrar se tumbo en la cama dejando salir un gran suspiro, estaba algo frustrada, pues seguía sin saber que hacer, estaba segura que realmente Jade era la dueña de su corazón, siempre había sido así, y por otro lado estaba Bianca, a quien quería como amiga, pero también tenía un lugar especial en su corazón, se levanto de la cama y miro la foto de ella y Jade, luego recordo el beso, "demonios fue el mejor beso que he dado en mi vida" pensó soltando una sonrisa boba al acordarse como sus labios se movian en sincronía con los de Jade, recordó que había mandado arreglar el brazalete que la castaña le había dado y se lo puso, lo acaricio y otra sonrisa apareció, pero justamente junto a esa foto estaba una de ella y Bianca, la miro y acaricio el rostro de la chica, suspiro y nego con la cabeza, había tomado una decisión y sabía que no podía seguir con ella estando enamorada de Jade, así que en cuanto Bianca estuviera en su casa y mucho mejor hablaría con ella y después iría tras la castaña que le robaba el sueño, sabía que no seria fácil pues Norma no estaría bien con su relación, pero ya no eran unas niñas y al menos ella iba luchar por la castaña.

A la mañana siguiente, se desperto temprano, envio un mensaje a los abuelos de Bianca para saber si aun estaban en el hospital, ellos respondieron que si y la rubia dijo que solo desayunaba y se iba para allá. Mientras tanto los medicos ya tenían el resultado de los estudios de Bianca y nadie se esperaba ese resultado

Señores Smith, ya tengo los resultados—

—díganos que sucede con mi nieta por favor—suplico Carol

—lamento decirles que no tengo buenas noticias—los abuelos esperaron a que continuara—en efecto Bianca tiene un tumor en el cerebro, y ya esta demasiado grande para poder operarlo—solto y ambos se quedaron mirando el miedo se podía ver en sus ojos llorosos

—eso... Eso que quiere decir?...debe haber algún modo de quitarlo—Dijo el abuelo Josh

—es demasiado riesgosa la operación—nego con la cabeza el medico—lo lamento mucho pero a Bianca no le queda mucho tiempo de vida—

NOOO!!!!—Grito Carol con su rostro lleno de lágrimas

—tranquila cariño—la abrazo su esposo

—no entiendo como paso esto—decía entre sollozos—ella siempre estaba muy sana—

—nunca menciono tener dolores de cabeza o mareos?—pregunto el medico

—sólo a veces el dolor de cabeza, pero ella decía que era algo leve—

—pero eran con frecuencia?—volvió a preguntar y los esposos negaron con la cabeza

—cuanto tiempo?—pregunto Carol

—no lo sé con certeza, puede suceder mientras duerme o hace sus actividades—suspiro y volvió a hablar—pero debido al tamaño por mucho unos meses, talvez ocho—

—Dios! NOOO!! Bianca...—lloro más su abuela

—de verdad lo lamento, ella desperto hace un momento, pueden pasar a verla—

—cree que debamos decirle?—
Pregunto Josh

—por supuesto, tiene derecho a saber—

The way of our love/Jerrie Thirlwards Donde viven las historias. Descúbrelo ahora