CAPÍTULO XXXVIII

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Después de casi dos semanas Jade y Jake salían más seguido, la compañía del otro había sido muy agradable, todos pensaban que pronto serian más que amigos pero la única que sabía la verdad era Sofia

crees que a Jade le interese ese chico?—pregunto Jed a su novia

—puede ser... porque?—Sofia se aguanto la risa pues ella sabía que no era así

—nada mas, es solo que yo imagine a Perrie y Jade juntas—suspiro negando con la cabeza

—pues si amor, pero Perrie se va a casar con Bianca y Jade no se puede quedar sola—levanto los hombros y Jed asintió—tiene derecho a seguir adelante—

—lo sé, pero me es difícil verlas así—

—haz hablado con Perrie?—pregunto la peliroja

—no, desde ese día que supe de la boda—nego con la cabeza dando un gran suspiro—nunca me había enojado así con ella, siento feo—

—porque no la buscas y hablas con ella—sugirio Sofia—son amigos desde niños y es normal que la extrañes—acaricio su mejilla

—pero es que...—

—no digas nada, ve y habla con ella—

—esta bien, pero no le diré nada de Jade—La chica asintió

—me parece bien—

—te amo—susurro cerca de sus labios

—te amo mas Elliott—sonrió y beso al chico quien se fue en busca de la rubia

Perrie estaba trabajando en el restaurant como los siempre, desde hace unos días Stefan, el chef de ahí la había notado diferente como muy seria y callada, sin esa chispa que la caracterizaba, y sin aquel brillo en los ojos que le había visto en las últimas semanas

Perrie olvidaste sacar las calabazas del agua caliente!—exclamo Stefan quitando el recipiente del fuego—se han cocido demasiado, hay que poner más—nego con la cabeza y la rubia ni siquiera lo estaba escuchando—Perrie!!PERRIE!! —exclamo

—que sucede!!?—pregunto

—estas bien?—la examino con la mirada y la rubia asintió —Perrie te conozco y desde hace varios días estas no se... Rara—

—lo siento he estado algo distraída—

—sabes que puedes confiar en mi verdad?—la miro y Perrie asintió

—lo sé, eres como un hermano mayor para mi—sonrió

—problemas con Bianca?—pregunto Stefan

—no, no es eso—contesto enseguida negando con la cabeza—o no se, te voy a contar todo pero por favor ni una palabra a alguien de acuerdo?—

—por la garrita que no Pezza, cuéntame—dio el meñique a la rubia quien con una sonrisa en el rostro enlazo su meñique también

Después de un rato la rubia termino de contarle toda la historia de lo que le sucedia y por lo que estaba así de distraida

vaya, es algo difícil—

—ni que lo digas—nego con la cabeza—quiero mucho a Bianca pero estoy enamorada de Jade la amo mas que a nada—Stefan abrazo por un lado a la rubia

The way of our love/Jerrie Thirlwards Donde viven las historias. Descúbrelo ahora