Fairy Tail: ¡Las Magas Super Poderosas!

Cap. 2 - Limitaciones

--¡A-agh!--Una adolorida Lucy se levantó medio cuerpo del suelo, se frotaba su cabeza intentando aliviar el dolor, también sentía un dolor punzante en su espalda.

--Fueron esos idiotas…-- Dijo Levy que también se estaba levantando del suelo.

--¡Ahh~! ¡Gray-Sama~!-- Dijo Juvia, ella no se había desmayado como sus hermanas ni había sufrido ningún daño, pero el pequeño toque de Gray la dejó en estado de trance.

--P-pero miren…-- La rubia señaló en dirección a la ciudad que antes era escombros y que ahora estaba impecable.

--¡¿Cómo es posible?!-- Juvia salió de su estado de trance al ver el estado de la ciudad.

Las tres chicas estaban confundidas ante el estado de la ciudad de Magnolia, ahora estaba sin un rasguño, siendo que la primera vez que la vieron era un desastre.

--Acaso…-- dijo la rubia.

--¿Acaso que?-- Preguntó Levy

--Acaso… Ellos arreglaron el desastre…?--Lucy dijo esto sonrojándose, recordó a Natsu.

--Tch, que importa…-- Levy dirigió su mirada a otro lugar.

--¡Ah! ¡Es que Gray-Sama es tan bueno!-- Dijo Juvia con corazones en sus ojos

--Juvia… Ni siquiera lo conoces…--Dijo Levy un tanto perturbada por la actitud de su hermana.

--Como sea… Será mejor que volvamos a casa-- Dijo Lucy.

Luego de recorrer un largo camino, con sus cuerpos con moretones y realmente adoloridas, las tres chicas llegaron a duras penas a su hogar, Makarov las esperaba preocupado en la entrada.

--¡Por Mavis! ¡¿Chicas que les sucedió?! --Dijo el viejo preocupado.

--…Aparecieron tres chicos… No pudimos… --Dijo Levy un tanto decepcionada por su derrota.

--Destruyeron la ciudad completamente…--Dijo Juvia.

--Pero luego creo que… La limpiaron-- Dijo Lucy, sin poder creer en sus propias palabras.

--…¿Eso es posible?--Preguntó el científico preocupado.

Los cuatro se sentaron en la mesa de su comedor, las tres chicas estaban perdidas en sus mentes y Makarov no sabía como sacar de ese estado a sus hijas. Finalmente les ordenó que tomaran un baño para que luego él curara sus heridas.

*** Mientras tanto con Zeref

--¡¿Cómo carajo es posible?!--Gritaba Zeref, enfurecido con sus creaciones, si, para él, los chicos no eran sus hijos. --Les ordené destruir esa maldita ciudad… Y ustedes… ¡La reparan!--

Los tres estaban confusos, de alguna manera no querían destruir la ciudad, pero tampoco querían darle la espalda a lo que les enseñaron por 17 años, les daba terror desafiar a su creador, pues ni ellos mismos sabían de que manera podía tomar venganza. Se retiraron del lugar en silencio dejando a su creador solo, al salir se encontraron con dos gatos alados, uno azul llamado Happy y uno de un tono oscuro (que es mas parecido a una mini pantera, si me lo preguntan) llamado Lily.

--¿Qué pasó, Natsu? ¿Por qué  repararon la ciudad?-- Preguntó Happy un tanto confundido

--…Nada, solo fue por impulso--Contestó el pelirosa

--Si ellas no hubieran estado ahí, esa ciudad ya no existiría--Dijo Gray

--¿Ellas? ¿Chicas? ¡¿Los derrotaron?! --Volvió a preguntar el gato azul, esta vez con asombro