『 S I E T E 』

34 8 4
                                    

• ────── ✾ ────── •

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

• ────── ✾ ────── •

—¡Con permiso!— Gritó energético un peliverde, entrando al departamento ajeno mientras cerraba la puerta detrás de sí. Mirando la espalda del dueño del hogar, el cual se retiraba sus zapatos con molestia.

     ¿Cómo habían llegado hasta este punto? A base de gritos, peticiones y de un rubio siendo seguido por el menor; quien de un momento a otro ya no pedía sino que exigía conocer a la persona con quien el mayor vivía.

     Grande fue su sorpresa al descubrir que quien había logrado que Bakugou conviviese con alguien más en su casa no era un humano, sino un amistoso gato pelirrojo de nombre: Eijirou. Y Midoriya no pudo evitar sentir ternura cuando observó a su amigo de la infancia mimar al felino.

—Bolita de pelos, ya llegué a casa.— Anunció a su mascota, la cual ya le esperaba con emoción en la sala.— Deku, si no te quitas los jodidos zapatos antes de entrar te juro que voy a sacarte a patadas.

—Ya lo he hecho, Kacchan.— Dijo Izuku, mientras se acercaba lentamente al minino.— Creí que quien vivía contigo era una persona, pero que gato tan lindo, Kacchan. ¿De dónde lo sacaste?

     El pequeño felino miró con recelo al intruso en el lugar, no confiaba en este y su presencia lo llegó a incomodar, al grado de identificar a la otra persona en la sala cómo alguien hostil. Al ser macho, no dudo en demostrar que era él el Alfa, por lo que rápidamente encorvó su espalda; su cola se estiró con agresividad, al igual que sus pelos se encresparon con la intención de ahuyentar al que consideraba cómo su enemigo.

     Katsuki en ningún momento había visto a su gato actuar de esa forma en las semanas que llevaba viviendo consigo, ni siquiera era agresivo con los otros gatos que se llegaban a quedar por minutos en el balcón, los ignoraba; no comprendía porque veía cómo una amenaza al ojiverde.

—¡HA! Hasta mi pulgoso sabe identificar a bastardos cómo tú, Deku.— Intentó bromear el ojirubí con precaución, intentando que su mascota se calmase con su voz; sin embargo, al notar cómo su bola de pelos no parecía abandonar su idea de atacar, se alarmó.— Eijirou, cálmate.— Ordenó, mas el felino le ignoró cómo la primera vez.

—Uh.. Kacchan, creo que se me va a lanzar..— Y al parecer, no fue el único que comprendió las acciones del animal, se puso nervioso, nunca en la vida se había acercado a un gato y que el primero al que se le acercaba le fuese a posiblemente morder, le asustó.— Kacchan... 

     Y cómo los dos presentes en la habitación presentían, el gato pelirrojo no dudo en arrojarse encima del moreno con la intención de morderle y arañarle seguramente, pero no llegó a hacerle daño ya que el más pálido le alcanzó en el aire.

—¡¿Qué demonios te pasa, pelos de mierda?! ¡Tú no eres agresivo!— Habló con el minino, regañándole al tenerlo en brazos. No le importaba realmente si hería al pecoso, sin embargo, no le convenía que aquello pasase: Sí el héroe era atacado por un gato, no dudaría en decirle al resto lo que sucedió y que el felino le pertenecía; eso provocaría que todo tipo de rumores se recorrieran la oficina.

     "Ground Zero educa a las mascotas para atacar a otros héroes", "Seguramente él ordenó que el gato atacase a Deku, con eso podría hasta reventarle una vena del brazo y el héroe moriría" o cualquier estupidez con tal de dejarlo a él cómo el malo, sin embargo, no quería que se corriese el único rumor que sí podría ser real:

"El gran héroe, Ground Zero, no vive con alguien, sino con un jodido gato que al parecer, tiene la misma actitud agresiva cómo el dueño".

     Y oh, claro que no querría que un rumor así se crease. Le importaba una mierda que tipo de rumores se crearan sobre él, pero no soportaría que metiesen a Eijirou en uno, y mucho menos que comparasen a su mascota, aquella pequeña bolita de pelos: dulce y buena, con él, el dueño: uno agresivo y malo.

     Porque él sería un asco de persona, pero eso no significa que su bebé fuera igual a él. ¿Qué sí se preocupaba por la imagen de un simple felino? Claro que sí, pero no porque fuese un "simple gato" sino porque ya era SU gato.

—Espera un momento, deja encierro a Eijirou en el cuarto, no sabía que actuaría de esta forma.— Admitió el rubio mientras cargaba a su mascota, la cual continuaba bufando hacia el peliverde. Este último sólo asintió y dejó que su amigo dejase al animal en otra habitación.

     Subió a su pieza con el felino pelirrojo en sus brazos, al llegar lo primero que hizo fue encerrarse con el pequeño y dejarlo sentado en la cama, no quería exhibir el hecho de que solía regañar a su mascota aún a sabiendas de que éste no le entendía.

—¿Qué pasó ahí abajo, Eijirou? Y no te atrevas a ignorarme porque te juro que te encierro en el cuarto de lavado y sabes que ahí no hay ventanas.— Habló Katsuki cómo sí estuviese hablando con un niño pequeño.— Desde ayer te dije que el estúpido de Deku vendría y quería que te comportaras, ¿Por qué me estás desobedeciendo?

     La dura voz del rubio hizo que el animal bajase las orejas, al parecer de alguna forma estaba entendiendo que lo estaban regañando, mas sin embargo, lo único que hizo fue lanzarse hacia el cuerpo de su dueño y antes de que este pudiese regañarlo más, hizo lo inesperado:

     Se restregó contra él con fuerza y enojo, intentando tallarse lo suficiente contra la ropa y piel del humano. El ojirubí no podía entender que estaba haciendo Eijirou pero cómo siempre, no lo detuvo, quizás por ello era un mimado de mierda, porque lo dejaba hacer lo que quisiese.

     Cuando el animal sintió que ya era suficiente, se alejó y se acostó en la cama de nuevo, cómo si nada hubiese sucedido. Bakugou no entendía que había pasado, pero ignoró todo al recordar la presencia del pecoso en el departamento.

—Escucha, bolita de pelos.— Le habló, ya estando menos molesto.— Baja si quieres, pero no quiero que vuelvas a hacer algo parecido a lo que hiciste hace unos minutos, el bastardo de Deku se irá en unas horas y quiero que te lleves bien con esa mierdecilla, no seas cómo yo.

     Y con eso, salió de su habitación, dejando a Eijirou mirando la puerta semi-abierta con los ojos entrecerrados, sin saber si bajar o quedarse en el cuarto hasta que aquel intruso se fuese de su hogar.

• ────── ✾ ────── •

Curiosidad 6:Cuando un gato se frota en ti, es porque te está marcando cómo algo de su territorio

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Curiosidad 6:
Cuando un gato se frota en ti, es porque te está marcando cómo algo de su territorio.

¡Woah, super largo! Lo siento.~ Supongo que me emocioné un poco con esta parte.

¡Gracias por leer!

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Sep 21, 2021 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

˗ˏˋUn maullido es un masaje al corazónˊˎ˗| KiriBakuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora