La Heredera Mágica (Starco)

I Me Llamo Danielle

Earth-ni, Agosto de 2036

Una no muy soleada mañana se alzaba otra vez en la ciudad de Echo Creek, en la ahora dimensión conocida como Earth-ni, ya llevaba siendo conocida así por muchos años.

El año 2036 parece tan lejano, con varios avances futurísticos salidos de la ciencia ficción, la verdad es que no ha variado mucho, más que, obviamente, los avances tecnológicos como lo son ahora los vehículos ya no usan combustibles fósiles para funcionar, los teléfonos celulares ahora funcionan con hologramas, entre otras invenciones.

Más la gente, tanto humanos como monstruos salen a realizar sus actividades cotidianas.

El mundo entero les abrió los brazos a los monstruos, habían logrado una avasalladora aceptación, pero como tristemente siempre existe, hay personas que miran con total desagrado y terror a aquellos seres de aspecto diferente.

Obviamente hay monstruos que se dedican a actividades criminales, que manchan el buen nombre de los monstruos honestos que solo tratan de ganarse la vida para ellos y sus familias.

Echo Creek fue conocida como la capital mundial de los monstruos, por lo que es donde su población de concentraba más; varios monstruos emigraron a diferentes partes del mundo, buscando nuevas oportunidades.

Nuestra atención se fija en una gran y linda casa a las afueras de Echo Creek. La residencia Butterfly-Díaz.

Una pequeña de rizos color miel estaba durmiendo plácidamente en su cama, soñando con imágenes alegres propias de una niña de 5 años, lentamente fue sacada de sus sueños cuando alguien tocaba con suavidad su puerta.

Star: -Toc Toc- Buenos días, princesa. Es hora de levantarse.

La pequeña niña empieza a hablar sus ojos.

Dani: -Bostezando- Buenos días, mami. –tallando sus ojos-

Star: ¿Dormiste bien?

Dani: Si, mami. Soñé con los cachorros laser que tú y papi me contaron ayer.

Han pasado muchos años, pero aun extraño aquellos pequeños cachorros que alegraron tanto nuestra vida cuando llegue a la Tierra.

Star: Si, eran muy lindos. Pero no olvides que tú ya tienes uno, que te ama mucho.

De pronto, la puerta se abre de golpe, entrando a la habitación de la niña, un pequeño perro con una marca azul en su cabecita.

Dani: ¡Glossy!

El cachorro se un salto se sube a la cama de la niña y empieza a lamer su rostro, mientras movía frenéticamente su pequeña cola.

Dani: -Acariciando a su mascota- Te extrañe mucho, amiguito. ¿Te divertiste en el veterinario?

El pequeño animal tuvo que ser llevado al veterinario, un colega de trabajo de Star, por unas pequeñas dolencias, pero el canino ya estaba totalmente recuperado.

Star: Ahora lava tus manos y baja a desayunar, papi nos hizo hotcakes y tazones con cereal.

Dani: ¿Hojuelas del Capitán Blanche? –con ojos brillosos-

Star: Tu sabes que sí, cariño.

Dani: ¡Siiii! –decía con un tierno grito-

La pequeña fue hacia su baño, subió la pequeña escalera para el lavamanos, procedió a lavárselas y fue corriendo hacia la cocina, aun con las manos húmedas de no secarse completamente, debido a la emoción del momento.