right here is where we belong | JohnYong |

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Taeyong se encontraba verificando algunas cosas respecto a la administración de la cafetería, casi sería la entrada de la última etapa del año, por lo que era común que el lugar tuviera algunas modificaciones en todas las áreas.

La junta con los demás empleados había terminado por lo que la rutina laboral para él y para los demás comenzaba en esa mañana.

Observaba algún papeleo importante cuando de pronto escuchó la risa de Jaemin.

-¿Qué pasa?

-Lunes, nueve en punto de la mañana, tan puntual como siempre- Jaemin indicó con su cabeza el ventanal que daba vista a las calles

Vio como Johnny colocaba seguro a su nuevo carro, que había adquirido por la compañía en la que trabaja, y se acercó a las puertas de la cafetería provocando el tintineo indicando su entrada, Taeyong sonrió emocionado, cada vez que Johnny entraba se sentía como aquellas primeras veces que comenzó a frecuentar el lugar cuando recién había regresado a Corea.

Johnny lo notó sonriendo hacia él, de inmediato devolvió el gesto y se acercó a la barra donde estaba Jaemin atendiendo.

-Buenos días Jaemin, buenos días Taeyong- inclinó su cabeza en modo de saludo

-No sean así- el menor dejó salir una risa -¿Por qué actúan como si no se hubieran visto? Literal viven juntos como un matrimonio

-Jaemin, Johnny es un cliente, ten respeto por favor- lo regañó Taeyong

-Bien, perdona Johnny hyung- hizo un puchero

-No pasa nada- rió divertido -No veo una falla a tu observación

-¿Lo ve Taeyong hyung? Tengo toda la razón

-Ugh ustedes dos- resopló fingiendo estar enojado pero en realidad estaba muy apenado -Pide su orden o te descuento el día

-No es necesario, un café negro con pan tostado y omelette

-Correcto- sonrió al menor quien en seguida se fue a la parte de atrás a preparar el desayuno que solía pedir con frecuencia

Johnny rió en cuanto notó las orejas y cuello cubierto de un color rosado que hacía muy bonito contraste con su color de piel, Taeyong siempre fue conocido por ser muy tímido, incluso si fingía no estarlo, sus orejas y cuello lo delataban, era una reacción tan preciosa y pura que a pesar de los años transcurridos, seguía viéndose adorable.

-¿Te parezco muy gracioso?- cuestionó al escuchar a Johnny reír mientras lo miraba

-No, es solo que eres tan precioso

Taeyong se puso de pie de la pequeña mesa que estaba dentro del área de atención al cliente y se acercó a la barra, quedando cara a cara con Johnny.

-Te gusta avergonzarme ¿cierto?

-Tal vez- recargó sus codos en la barra y posó sus manos en sus propias mejillas -Me gusta el color rosa en tu cara

-Eres un tonto- Taeyong negó mientras reía e imitó la acción de Johnny quedando así sus rostros demasiado cerca

-Tú me pones todo tonto

-¿Ah sí?- uso su tono juguetón

-Si- suspiró -Estoy todo tonto de amor por ti

-Diablos! Hyungs no coman pan enfrente de los pobres- Jaemin interrumpió poniendo el desayuno de Johnny en la barra

-Yo no te digo nada cuando te pones cariñoso con Jeno cada vez que viene a verte los jueves- atacó Taeyong mientras se enderezaba de nuevo