30 day's OTP challenge [AkuAtsu]

Day 9: Hanging out with friends

 — No — fue la rotunda respuesta de Akutagawa ante la invitación que recibió de quienes se denominaban sus "respetables" superiores.

 — Oh vamos, no seas amargado, es solo una tarde de karaoke. ¿Qué puede salir mal? — intentó persuadir el castaño.

 — ¿Para qué suceda lo mismo de la otra vez? No gracias, me gustaría mantener intacta lo poco de salud mental que me queda — para Ryunosuke la suma de aquellos dos, más un cuarto privado y él estando de mal tercio era igual a desastre, y por lo tanto prefería no arriesgarse a terminar el día con un nuevo trauma agregado a su vida. Al día de hoy seguía teniendo pesadillas con lo que presenció cuando fue al cine en compañía de ellos; aunque bueno, no toda había resultado mal, pensó al recordar la albina recompensa que obtuvo después de eso.

 — Atsushi irá — mencionó Nakahara, estaba seguro de que aquella sería su carta de triunfo.

 — ¿En serio creen que me van a convencer con eso?

"¿Cómo es que lograron convencerme con eso?", se lamentó Akutagawa con pesar, al verse a sí mismo al lado de Atsushi y Chuuya mientras esperaban a que Dazai se decidiera de una buena vez por una canción.

 — ¡Apúrate desperdicio de vendas, no tenemos todo del tiempo del mundo! — gritó desesperado el pelirrojo.

 — No me presiones Chuuya, todos nos tomamos nuestro tiempo cuando queremos que algo salga bien.

 — Entiendo lo de tomarse un tiempo, ¡pero llevas así 15 minutos y es solo para elegir una puta canción!

 — Oh, aquí está — mencionó Osamu, ignorando por completo a su fúrica pareja.

"Por fin", pensó el otro dúo, pues aunque no lo dijeran (ya que le dejaron esa tarea a Nakahara) también estaban hartos de esperar tanto. Por Dios, que solo era una canción, no se requería de mucha ciencia.

De acuerdo, a pesar de lo lento que era el castaño para elegir (que cabe destacar, solo lo hacía para fastidiar, a palabras de su querido novio), la verdad era que cantaba muy bien. Poseía un tono de voz muy afinado y agradable de escuchar, y Over the dream le salía a la perfección, como si aquella canción hubiera sido exclusivamente creada para que él la cantara.

 — Massugu ni tsukisusumu mirai no saki ni, tamerai nante niawanai — finalizó Dazai de cantar, para posteriormente inclinarse al escuchar los aplausos de Akutagawa y Nakajima. Chuuya también aplaudía, solo que no tan ruidoso y notorio como los otros dos, ya que aunque no quisiera admitirlo, amaba escuchar a su bastardo cantar.

Osamu sonrió, conocía de sobra que a su perchero le gustaba oírlo, por más que éste se negara. Pero el sentimiento era mutuo, así que era hora de hacerlo soltarse.

 — Ahora es tu turno Chuuya — dijo ofreciéndole el micrófono al mencionado.

 — No tengo ganas — mencionó con simpleza el otro. Dazai suspiró, tendría que hacer uso del espíritu competitivo de su pareja para convencerlo.