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|EVERYTHING WAS UNEXPECTED|
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◇Era una noche fría Jin caminaba sin ningún rumbo, no quería ir a la casa que compartía con Jungkook, pues tampoco se sentía en las condiciones de ver su cara y al mismo tiempo no sentir que por dentro se destrozada.
Que irónica es la vida, esa mañana se había despertado con todas las energías del mundo, con muchas ganas de verlo y contarle lo que ocurriría con sus vida de ahora en adelante.
Jungkook no había ido a casa ya varias noches seguidas, pero eso no era de mucha importancia, a veces se le acumulaba el trabajo y él lo comprendía, aveces sucedía lo mismo consigo.
Cogió su maletín y por supuesto, aquel sobre, llego a la empresa muy alegre, ya no estaba como hace unos cuantos días atrás, decaído y con el cuerpo con las energías derenadas, se cansaba muy rápido, eso sin contar que se había vuelto éticoso con la comida.
Y no es como que el trabajo de Jin fuera complicado o que requiera uso de fuerza bruta, no, el único esfuerzo físico que tenía que hacer era caminar al ascensor y de este a su oficina, pues era el jefe de el área de Marketing en aquel lugar.
Noto que Jungkook andaba ocupado en la mañana, por lo que decidió darle la sorpresa llevándole el almuerzo, que el mismo hizo, a su oficina.
Cuando abrió la puerta, vio a Jungkook sentado frente a su escritorio concentrado en su computador, el hombre ni siquiera se había dispuesto a alzar la mirada para ver de quién se trataba, ya de por si sabia que era Jin, pues ambos tenían un comportamiento muy diferente en la empresa a que cuando estaban solos.
Y si con eso querían decir que entre ellos no pasaba nada, era más claro que todos en aquel edificio ya sospechaban aquello, pero no tenían nada asegurado. Solo los dichosos cercanos a su mini círculo social sabían la verdad, así que sin más se adentró hasta llegar frente al escritorio del pelinegro.-Cariño, traje tu almuerzo. -hablo Jin mientras hacía espacio en el escritorio, luego sacó la comida.
-¡Kooko! -le reclamo, de manera engreída y tierna, rematando el momento con un puchero. - ¿Me vas a seguir ignorando?- no espero repuesta y cerro el computador del pelinegro.
Jungkook suspiro, y se empujó para atrás, quedándose en silencio por unos instantes hasta que habló.
-Seokjin, tengo algo que decirte. -no lo miró a los ojos y lo llamo por su nombre completo, eso sí no era típico en su Kooko.
"ahhh dios que habrá pasado, ¿quién vino a joderle la poca paciencia que de seguro cargaba hoy?, ¿alguien movió o toco algún documento importante? o ¿será que esta en su luna? dios sabe lo que él tenia que pasar, pues él era el único que podía calmar a dicho conejo rabioso. ¡Bien! Solo que esparar a que diga que fue y nada, volver a tener al tierno Kooko de vuelta. Su Jungkook en ese modo era mejor, ama ver a su novio con su conejita sonrisa, y que le mime hasta más no poder, si que había extrañado eso estos días. ", penso Jin.
-Yo también cariño, pero después de almorzar todo lo que quieras.- dijo el castaño con una sonrisa, la emoción desbordaba de su cuerpo.
En el almuerzo el castaño intentó hacer conversa pero Jungkook simplemente se mantenía callado y eso le
incomoda un poco, por no decir demasiado, apesar de que trató de mantenerse sereno, con la tensión que emanaba el lugar, no pudo.
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ME AND MY BROKEN HEART ✔
Fanfic¿Amor? Sí, es amor lo que una persona con el corazón roto necesita. Aunque sea un poquito, si das amor con sinceridad, será sufiente para ayudar a sanar. Entonces, ¿será Seokjin capaz de curar su corazón? 📍Historia Original 🔸️Comienzo:...