[Latidos de Ángel - WooSan (yaoi)]

¿San-tanás?

Me encontraba en un estado donde miles de emociones pasaban por mi cabeza, así que para liberar un poco de tensiones me puse de pie y moví un poco los muebles de la habitación para tener una zona lo suficientemente amplia como para poder bailar sin darme con algún mueble en el estúpido dedo meñique.

Puse una de mis canciones favoritas, con la cual me sentía como el rey del mundo y esa canción era ''Roll Deep'' de Hyuna, pero obviamente yo hice una coreografía versión masculina porque no iba a soportar que la gente me dijese puta a mí, sin ser nada de eso yo.

Narra Wooyoung

Lo que ocurrió antes en la habitación fue muy extraño y pensé que causaría una situación de incomodidad entre estos chicos y yo, pero parece ser que no se lo tomaron a lo personal y me alegra bastante. Sin embargo, el que me preocupa es San pero no hay nada que puede hacer por él ya que se ve que es un cabeza hueca.

Oye Woo, ¿estás bien? -Me preguntó Mingi algo preocupado-.

Sí tranquilo, simplemente me quedé pensando en que extraño a mi perra. -Respondí con la primera tontería que se pasó por mi cabeza-.

¿Tu perra? -Añadió curioso Yunho uniéndose así a la conversación-.

Seguro que se refiere a su novia. -Saltó Mingi a la acción sin dejarme contestar-.

¡Claro que no! -Repliqué sonrojado por los nervios-. Yo ni siquiera di mi primer beso. -Añadí con un tono de voz algo apagado-.

¡CÓMO QUE NO HAS DADO TU PRIMER BESO! -Gritó Mingi con una mano en la cabeza simulando que se iba a desmayar-.

¡Pero cállate por dios! -Le di un golpe en el hombro y miré a todos lados sin saber dónde meterme-.

No os preocupéis chicos tengo una idea. -Se le iluminó la cara a Yunho con una sonrisa en la cara, que no sé por qué me daba miedo-. Nos vemos en el vestíbulo dentro de una hora, así que tirad a vuestras habitaciones para poneros guapos. -Tras decir esto se llevó a Mingi a su habitación, porque eran compañeros de habitación-.

Cuando me di cuenta de que no tenía otra opción que hacerle caso me dirigí a mi habitación con una sensación de curiosidad en el cuerpo; llegué a mi habitación y todos mis pensamientos se esfumaron para pensar en una única cosa, en San y el posible infierno al que me podría enfrentar.

Tras unos segundos pensando si debía entrar o no, saqué las llaves y entreabrí la puerta para mirar si estaba dormido o no; pero mi respiración se cortó y mi corazón se aceleró por lo que vi, estaba San con las audífonos puestos bailando y cantando.

Narra San 

Me pasé bastante rato bailando y cantando, hacía bastante tiempo que no me sentía tan libre y tranquilo; acabó la última canción que me encontraba bailando y cogí una toalla del baño para limpiarme el sudor e hidratar un poco mi cuerpo.

Empecé a quitarme la camiseta, pero noté un escalofrío en el cuerpo e instintivamente mi mirada se posó sobre la entreabierta puerta en la que se encontraba un acosador que tenía como compañero de piso, así que le tiré una zapatilla.

¡Ay! -Exclamó el acosador-.

Te jodes. -Respondí tomando mis cosas para meterme en el baño-.

¿Por qué eres así conmigo pese a que te defendí antes? -Preguntó Wooyoung poniendo morritos para intentar embelesarme-.

Cuando me dijo eso no pude evitar acercarme a él con rabia, tomándolo del cuello de la camiseta para traerlo dentro de la habitación y cerrando la puerta tras él para dejarnos completamente a solas a los dos; me acerqué lo suficiente a él como para que nuestras respiraciones chocasen.

En ningún momento te pedí que me defendieses, puedo hacerlo yo solo. -Afirmé clavando en sus ojos una mirada seria-. Además, soy así contigo porque me estabas acosando. -Finalicé con esta oración y lo solté para meterme en el baño-.

Cuando había cerrado la puerta, mis manos comenzaron a temblar ya que nunca había hecho algo parecido y estaba muy nervioso; tampoco quería parecer un matón aunque la idea de que me expulsen no estaría tan mal.

El contrario pegó en la puerta del baño, supongo que para disculparse.

Oye San, ¿Te importaría no tardar mucho? -Preguntó con el tono de voz algo asustado-.

¿Tienes prisa por ir a algún sitio? -Pregunté disimulando la curiosidad que sentía-.

Pues... he quedado con Yunho y Mingi en menos de cuarenta minutos, me quieren llevar a algún sitio... -Explicó con suavidad el chico-.

Ya veo, no tardaré mucho. -Respondí rápidamente-.

Tal y como le dije no tardé más de diez minutos en darme un baño, salí sin dirigirle la mirada y me tiré en la cama con los audífonos para calmar la rabia acumulada que le tenía, nadie me había visto bailar y cantar y él lo hizo a traición así que lo mataré mientras duerme esta noche; aunque me gustaría saber dónde irá con esos descerebrados.

Narra Wooyoung

Este chico es muy extraño, pero sí es cierto que parecía que lo estaba acosando, pese a que no es verdad porque simplemente me quedé extasiado contemplando la grandiosidad de sus pasos encajando a la perfección con esa voz suya tan dual que posee.

Volviendo al mundo real, tenía que elegir un conjunto de ropa para ir guapo como dijo Yunho, cosa es que no entiendo mucho de ropa así que decidí pecar y hablar con el mismísimo Satanás.

Oye San, ¿Me podrías ayudar a elegir un conjunto de ropa? -Pregunté con una falsa sonrisa del miedo que sentía mi cuerpo-.

¿Qué me ofreces a cambio? -Respondió con otra pregunta mientras arqueaba una ceja-.

Dime qué prefieres y así terminamos antes que me quedan diez minutos. -Afirmé con agitación-.

Quiero que no le cuentes a nadie nada de lo que has visto por ser un acosador. -Respondió finalmente con una mueca de victoria en su rostro-.

Per... -Intenté rebatirle, pero cerré la boca-.

 No valía la pena discutir con él en estos momentos porque llego tarde, pero tengo que hablar de eso para solucionar el malentendido.

No se comportó nada mal cuando acepté su oferta, me escogió unos pantalones vaqueros negros ajustados algo rasgados, una camisa de botones blanca y como no tenía abrigo me dejó prestada una chaqueta suya.

Bueno San, me voy ya. -Cogí las cosas restantes y miré el reloj aliviado satisfecho porque aún me quedaban cinco minutos para que diese la hora-. Muchas gracias por todo. -Añadí con ternura-.

Como me pierdas la chaqueta te mato. -Se despidió a su manera-.

Salí de la habitación con bastante felicidad en el cuerpo, parece que no me odia y eso significa que todavía tengo posibilidad para ser su amigo; cuando llegué al vestíbulo estaban ambos chicos arreglados esperándome.

Hola chicos, lamento si llegué tarde. -Solté nada más llegar-.

No te preocupes bobo, si todavía tienen que llegar un par de chicos más...