One Shots of Devil May Cry

Tostada Quemada (SpardaxEva)

*Tic tic tic*

Sparda se concentró intensamente en lo que estaba ocurriendo delante suyo. Eva acababa de poner una rodaja de pan dentro de un artilugio y se escuchaba un pequeño tic... hasta que...

*DING*

"¡¿?!" Sparda se estremeció al asustarse cuando la rodaja de pan salió de la tostadora. El demonio la fulmino con sus ojos.  "Ustedes, los humanos son tan gentiles, entonces ¿por qué crear una máquina que sea tan repentinamente violenta?".

Eva se rió al otro lado de la cocina, encontrando divertido que su amante demoníaco dijera algo tan irónico. "¿No cuestionas a los humanos cuando crearon armas nucleares pero sí a las tostadoras?".

"No, porque protegerse es importante", dijo Sparda mientras tomaba la tostadora en sus manos. "Sin embargo..." Levantó a la tostadora y comenzó a sacudirla violentamente. "Esta cosa no es agradable".

"¡Sparda!" Eva le arrebató la tostadora a Sparda antes de que tuviera tiempo de aplastarla. "Cálmate, es solo una tostadora. Hace... tostadas. Ustedes, demonios, pueden usar fuego para calcinar cosas instantáneamente, pero los humanos usamos tostadora para nuestro pan".

Sparda era el general del ejército demoníaco, por lo que era obvio que se había dedicado a formas demoníacas, sin embargo, este ser humano, esta criatura gentil y hermosa conocida como Eva, había cambiado su corazón. Sparda todavía estaba tratando de adaptarse al estilo de vida humana que al parecer estaba resultando ser un desafío.  Tomó un trozo de pan del plato y lo sostuvo a la altura de los ojos de Eva.

"Te das cuenta que puedo hacerlo más rápido, ¿verdad?" Movió la mano y un pequeño rayo golpeó el pan, quemándolo hasta dejarlo quebradizo. "Prueba mi tostada y yo pruebo la tuya".

Eva se atragantó un poco por el olor a tostada quemada. No había forma de que ella pudiera conseguir tragar algo así. Sparda la bajó cerca de su boca y la agitó. Eva sacó su tostada de la tostadora y también se la ofreció a Sparda. Curiosamente, Sparda estaba haciendo la misma mirada de asco a la tostada que Eva estaba haciendo a la tostada quemada. Los dos simultáneamente tomaron un bocado de sus tostadas. Sparda masticó con una mirada perpleja en su rostro.

"Hmmm...", tarareo en respuesta. "Esto es bueno... no genial, pero bueno". Al otro lado, estaba Eva, que tenía las mejillas lleva de pan. Ella casi vomita un poco. "¿No te gusta?".

Eva sacudió su cabeza en respuesta y corrió hacía el bote de basura más cercano para escupir la tostada quemada. Ella se estremeció ante el asqueroso sabor. "¡EEWW! Es horrible".

"¡Vamos! No es tan malo". Dijo Sparda tomando la tostada quemada.

"Entonces, ¿por qué no le das un mordisco?" Preguntó Eva en un susurro amenazante.

Sparda miró la tostada y luego a Eva. Parecía lista para empujar ese pedazo de pan tostado por su garganta sí él no hacía lo que ella decía. Él se río entre dientes y agitó la tostada quemada. "Tonto humano, no me amenazas con comida!¡Podría comer esto todo el día!" Y mordió la tostada quemada... su arrogancia ahora fue reemplazada por arrepentimiento. Se arrodilló junto a Eva y también escupió la tostada. Eva se sintió mal por haber hecho que Sparda se comiera la tostada.Ella pasó una mano por su cabello plateado y sonrió con ternura. "¿Qué tal si solo comemos panqueques para el desayuno?" Sparda miró de reojo a Eva y ella se sintió un millón de veces peor. "¿E-Estás enojado?" Preguntó preocupada por molestarlo.

La boca de Sparda se torció un poco antes de responder "Mucho".

"¿Qué-"

"Porque si supiera que sabe tan mal, nunca te habría permitido comerlo".

Eva parpadeó sorprendida. Sparda no estaba enojado con ella, ¡estaba enojado consigo mismo!"Mh..." Ella dejó escapar un suspiro de alivio y se dirigió hacía su pequeño demonio enojado . "No debería haberte dejado comerlo. Vamos, todavía te amo". Eva tomó el hombro de Sparda y lo atrajo ligeramente hacía ella. Los dos dejaron que sus párpados se cerrarán a medida que se acercaba. Sus labios se encontraron...

"¡EW!¡UGH!" Se separaron después del contacto.¡Todavía prevalecía el persistente sabor de la tostada quemada y este había arruinado el preciso momento!

Eva no tuvo objeciones cuando Sparda procedió a aplastar la tostadora con sus propias manos.

By: YamatoandRebellion (Deviantart.com)