⁵²

31 5 0
                                    

27 de diciembre del 2019

"Las cosas no pueden empeorar más"
Mina

— ¿Quieres salir hoy? — preguntó Solaria bajito

Estábamos en clase de literatura, así que no podíamos hablar tan fuerte.

— No puedo hoy, el profesor de historia me junto con Gael en un trabajo de investigación y hay que entregarlo mañana, así que quedamos en hacerlo hoy en la biblioteca — contesté de l misma forma

— Diablos que incómodo

— Lo sé, pero bueno. Trataré de terminarlo lo más rápido posible y así poder irme

— ¿Y si hablas con él por lo que pasó...?

— Ya te lo dije Solaria es complicado

— Tan complicado que ni a mi quieres decirme

—Lo lamento

— No te preocupes, tampoco te obligare

— Gracias —dije con una sonrisa de agradecimiento

Literatura era mi última clase del día, así que me despedí de Solaria y me encamine hacia la biblioteca.

Salude a la señora tierna que está a cargo y fui a sentarme en una mesa en la cual Gael pudiera verme.

Tenía mi diario en la mesa, ya que pensaba escribir para matar un poco el tiempo, pero cuando estaba decidida a hacerlo, Gael llegó.

— Siento la tardanza pero ya estoy aquí

— No te preocupes ¿Podemos empezar ya? No quiero llegar tarde a casa

— Si, si claro — dijo rascando su nuca

Así paso casi toda nuestra incómoda tarde, digo incómoda, porque solo hablamos para preguntar dudas acerca del trabajo.

Eso si, hubieron varias veces en las que el quiso sacar el tema de la declaración, pero siempre trataba de cambiarlo.

Cuando nos quedaban unas últimas lineas, recibí una llamada de un número desconocido. Conteste confundida.

— ¿Hola? — pregunté

— ¿Hablo con la señorita Mina Sanders? — cuestionó

— Si, ella habla — respondí rápidamente

— Lamento informarle que su padre esta grave en el hospital, ya que recibió un disparo cerca del corazón

— L-lo siento, pero yo no tengo padre desde hace mucho — respondí con dificultad

— Señorita ¿Está segura de eso?

— Si — susurre

— Si cambia de opinión acerca de eso, le informó que su padre... digo el señor Sanders se encuentra en el hospital de la ciudad. Gracias por su tiempo, adiós

— Adiós — susurre

Sentía que mi corazón iba a explotar el me había hecho mucho daño, pero aunque no quiera aceptarlo, sigue siendo mi padre.

Que pena que haya pasado esto, porque cuando despierte, se dará cuenta de que su hija ya no esta aquí.

— ¿Mina? — preguntó Gael con preocupación

— Y-yo necesito irme, terminaré el trabajo en casa, lo siento

— Pero ¿Que ocurre? ¿Estás bien?

— Si estoy bien. Tengo que irme, adiós

— ¡Mina, espera! — gritó llamándome

No pude oír todo lo que dijo, porque salí corriendo rápidamente con destino a mi casa.

Al llegar lo que hice fue tirarme a mi cama y llorar en silencio. Ahora no queda nada.

Las palabras que tanto esperaba escuchar de él para cambiar de opinión nunca llegarán, así que lo consideraré como una señal.

Recibí varias llamadas de Gael y Solaria, pero no contesté ninguna, solo quería ahogarme en mi sufrimiento.

Después de llorar por horas y dormir un poco, pude calmarme.

Desperté cuando ya era de noche con un poco de hambre,  así que fui a servirme algo rápido.

Al volver a mi habitación busque mi diario para poder escribir, pero no lo encontré en mi mochila. Asustada, revisé en toda la casa, pero no di con el.

La biblioteca. De seguro se me cayó ahí y la señora tierna lo encontró. Si, eso es lo más posible. Mañana temprano lo pasaría a buscar.

Ya cansada, decidí que lo mejor era dormir y buscarlo mañana, así que lave mis dientes, me puse mi pijama y me acosté a dormir.

Ya cansada, decidí que lo mejor era dormir y buscarlo mañana, así que lave mis dientes, me puse mi pijama y me acosté a dormir

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
𝗦𝗢𝗟𝗢 ⁵⁶ 𝗗𝗜𝗔𝗦Donde viven las historias. Descúbrelo ahora