Parte VI

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Pepper retuvo un grito con sus manos cuando vio el desastre que había en casa de su amigo. Había hombres y sangre por todos lados, era una masacre, una pesadilla. Los casquillos brillaban a la luz de algunas farolas; era como si se hubieran enfrentado a una bestia salvaje. Sin embargo, al cruzar la entrada, el escenario parecía aún peor.

—O-Obadiah—musitó Pepper, pálida como fantasma al ver el cuerpo del subdirector de IS rodeado por una mancha oscura.

Natasha había permanecido impasible. Sus ojos detallando cada rincón, imaginando lo que había pasado y las acciones de Stephanie. Era casi como si lo estuviera viendo en vivo, podía ver claramente cada paso, cada golpe y cada bala disparada.

De pronto, un quejido resonó en la estancia. Natasha se puso alerta, sacó su arma y con cautela se acercó al lugar de origen.

***

Pepper se detuvo en la entrada del taller, ligeramente perpleja por lo que estaba presenciando.

La soldado estaba sentada en el sofá rojo que Tony tenía en su taller. Tenía a Tony semi sentado en el mismo, recostado contra ella y envuelto en un abrazo. Parecía estar murmurando cosas a su oído mientras acariciaba sus cabellos, tal como haría con un niño.

Pepper sintió una ligera punzada de celos e inquietud. Le molestó un poco no ser ella la que estuviera ahí con su amigo, tal como había sido siempre. Pero, por otro lado, estaba agradecida de que la soldado haya resguardado a Tony tal como dijo que haría.

Entonces, no tenía caso que interrumpiera. Se dió la vuelta e impidió que Natasha y otros agentes de SHIELD que esta había llamado, bajaran. Pepper se encontró con la sala invadida al igual que el patio. Había algunos flaches de cámara tomando prueba de lo sucedido y otros buscando quien sabe qué cosas. Un señor con un parche se acercó a ella.

—Señorita Potts, ¿Podemos hablar?

—Claro—Pepper lo dirigió a la cocina, lugar donde puso a preparar café, más por costumbre que por antojo, pues no pensaba beberlo.

Fury la observó unos segundos antes de comenzar a hacer preguntas.

***

Tony sentía un agudo dolor de cabeza. También se sentía mareado y agotado, aún así, abrió sus ojos despacio.

—Tony.

El genio suspiró cuando sintió una mano fría posarse en su frente.

—¿Qué pasó?—musitó con voz ronca.

Stephanie sonrió levemente.

—Ya todo acabó—respondió ella sin dejar de acariciar el suave cabello del menor.

Tony carraspeó. Su boca estaba seca. Se incorporó lentamente y se separó del cuerpo de la soldado. Llevó su mano derecha a su cabeza y fue ahí cuando todo volvió a su mente. Abrió sus ojos con sorpresa, y observó fijamente su brazo.

—¿Có-cómo...?

—Yo te traje hasta aquí. JARVIS me ayudó, él me dijo lo que tenía qué hacer—explicó la rubia, señalando la primer prótesis que Tony había usado y que ella se había encargado de ponerle para reemplazar la que le había sido quitada.

Tony la miró con atención, ligeramente incrédulo.

—¿Qué pasó con...?

—Está muerto—soltó ella con cierta brusquedad—. Ambos lo están.

—¿Ambos?

—Stane y el terrorista de Afganistán.

Tony estaba aún confundido. Saber que Obie había tenido con ver con todo aquello era algo complicado de digerir para él. Por muchos años el hombre había trabajado para su padre y después para él, era difícil procesar su traición.

Iron Man (TERMINADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora