Me rodeo con sus brazos, aferrándose a mí con la fuerza que yo no tenía.
Solté un leve suspiro, peleando por poder hablar, pero no podía, su cuerpo se desvanecía a la velocidad de la luz, y con el se iba lo que quedaba de mi alma.
El aparto su cabeza de mi cuello, su mirada me rompió el corazón, profunda, destrozada, aterrorizada.
-Te...te protegeré toda mi eternidad...- Carraspeo, con un hilo de voz aguda.
Cerré la boca, evitando soltar un llanto, dejando que toda mi tristeza cayera por mis parpados.
Apreté su mano con miedo, temblando, sin poder figurarme una vida si él.
-Yo te esperare toda mi vida...
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Palabras vacias
De TodoUn monton de cartas sin orden ni concierto donde expreso mis sentimientos de la forma mas natural y explosiva que conozco.
