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Jaebeom

No puedo dejar de ver  el rostro del hermoso hombre que duerme a mi lado, soy un real idiota, debería hacerlo, pero mi cuerpo solo se permitió tres horas de descanso antes de abrir los ojos y mirar a jinyoung.

Lo traje aquí después del trabajo, la noche anterior no pude evitar besarle, demasiado, cada oportunidad que tenía, unía nuestros labios y era tan jodidamente perfecto, su boca está hecha para encajar con la mía.

Se dedicó todo el resto de la noche a beber refresco a mi lado, bailo algunas canciones y me dejó besarle, era tan adictivo el sabor de sus labios que no podía tener suficiente, aún no puedo, como un egoísta de mierda quiero despertarlo para poder tener más de el.

Si cierro un poco mis ojos puedo recordar lo avergonzado que estaba cuando le dije que iba a dormir conmigo, sus mejillas ardían mientras intentaba negarse, pero al final le recordé la semana que pasó enfermo y durmiendo junto a mi, solo eso basto para que tomara la remera que le estaba prestando.

Es que el no sabe todo el poder que tiene sobre mi, el lo ha tenido siempre, el primer día de clase me asombre de lo hermoso que es, el como miraba todo como un pequeño Bambi con ojos deslumbrados y brillantes, después estaba desilusionado de ver que tenía un novio, ¿Porque llegué a creer que Mark era su novio en primer lugar?

Después estaba tan molesto con el, porque seguía con ese idiota, cuando toda la facultad sabía que ese imbécil se iba de fiesta y tenía sexo como un maldito promiscuo, y después volvía el lunes con una sonrisa al lado de aquel ángel inocente.

Pero jinyoung volvió a cambiar mis sentimientos por el, una necesidad de decirle que dejara a su puto novio, que no lo merecía, pero cada vez que me acercaba a el, veía como sus palabras se cortaban, como si fuera doloroso hablar conmigo , se le caían sus libros o cualquier  liquido que llevara en las mano, llegue a pensar que sentía miedo por mi presencia.

Claro que el cambio todo el rumbo otra vez, como un milagro nos tocó hacer un trabajo juntos, ahí  pude descubrir toda una verdad que me había negado a ver por mi cuenta, mark no es el novio de mi adorable chico, solo son mejores amigos, también jinyoung tiene mas inocencia de la que nadie a nuestra edad podría llegar a tener.

Nadie podría decir nunca, que jinyoung es estúpido o algo como eso, es el hombre mas jodidamente inteligente que tengo el placer de conocer, pero toda esa inteligencia va de la mano con la inocencia mas pura, podría decir que mi hijo es mas despierto en algunos temas que mi hermoso jinnie, pero me hace desearlo incluso mas si es posible.

 —¿porque me miras mientras duermo?— 

su voz tiene rastros de vergüenza, pero solo puedo sonreír gigante y mirar como intenta de ocultarse con las mantas, es tan jodidamente adorable, que no puedo evitar burlarme un poco de el, solo para ver sus mejillas sonrojarse.

— me besas toda la noche, me haces bailes sensuales, despues te metes en mi cama y ahora, ¿tienes vergüenza?—  hablo con falso enfado y lo escucho ahogar un jadeo.

— no digas esas cosas, jaebeom— 

intenta cubrirse por completo con la mantas, pero se las quito y lleva las manos a su rostro, adoro a este chico, no pude escoger un hombre mejor para confiar, para traerlo a mi mundo y para querer hacerlo mi pareja.

— pero así fue, te vestiste provocador, me bailaste y besaste, ¿ahora no te harás cargo de esas cosas?— vuelvo a bromear, pero el esta tan avergonzando en este momento.

Como enamorar a mi  JaebeomDonde viven las historias. Descúbrelo ahora