¿Y si volvemos a empezar?

5

Elsa

Siempre pensé que el amor no era para mí.No lo buscaba y, sin embargo, un día como cualquiera ves a un pelirrojo tirado en la arena y sabes que algo va a cambiar en tu vida.Y cuando menos lo esperaba, él ya era el protagonista de mis sueños.Lo amaba y ya me había cansado de pensar que no podía ser.Ya no me importaba pensar que no era correcto, porque no se sentía así estando con él.Lo único que me preocupaba era cómo contarle esa parte de su pasado que conocía.No me gustaba mentirle.

La noche anterior había estado tan cerca de decirle, pero no tuve el valor para hacerlo.Temía lo que pudiese cambiar entre nosotros una vez que la verdad se sepa.Pero últimamente Hans me había contado que sus recuerdos estaban volviendo.Recordó que tenía doce hermanos y que no se cansaban de molestarlo de niño.Parecía que el tiempo estaba dándome un ultimátum para contarle.

Esa tarde, estaba sentada admirando a lo lejos el lugar donde solía estar el arco que los gigantes de tierra destruyeron.Toda esa tranquilidad en el ambiente me ayudaba a pensar,pero no fue por mucho tiempo porque unas manos cubrieron mis ojos.Sonreí, sabía quien era.

—Hola a ti también—le dije mientras bajaba sus manos.

Hans depositó un beso en mi mejilla y se sentó a mi lado.Entonces empecé a jugar con su cabello.

—Sabes que me estás despeinado—me dijo

—Pero tú siempre estás despeinado—contesté y puse todo su cabello a un lado—así te ves mejor

Él sonrió y me giró los ojos, sabía que lo decía en broma.Luego,me apoyé en su pecho para disfrutar mejor del atardecer que caía en frente de nosotros.

Entonces Hans me contó que había vuelto a soñar sobre su pasado.Pero esta vez me contó que estaba en una celda y que escuchaba desde lejos que lo culpaban por atentar contra la corona.

—¿Crees que haya sido por eso que mi padre me haya tratado así durante los últimos años?—me preguntó

—Puede que sí¿llegaste a escuchar qué significaba eso de atentar contra la corona?—. Quería saber que tanto sabía

—No, no sé que significaba—reconoció que él—Elsa, ellos dijeron que no merecía vivir después de lo que hice.Trato de recordar qué fue eso que hice con todas mis fuerzas y nada

—Hay algunas cosas que están mejor en el pasado, no valen la pena ser recordadas porque no hacen bien—le dije suavemente

—Pero yo necesito saber porque no me siento como un villano-admitió él

—Es porque no lo eres—le dije acariciando su rostro.

Ya había pasado suficiente tiempo y cada vez estaba empezando a recordar más y más.Me importaba su bienestar y no me gustaba que se mortifique por sueños que él no entendía.Tenía que contarle ahora antes de que sea demasiado tarde.

Iba a empezar a hablar cuando él me dejó sin aliento con un beso.Me separé un instante para ver esos ojos esmeralda que tanto me gustaban.

Mis labios se amoldaron a los de él en un segundo beso que hizo que alborotara todos mis sentidos.

Pero como no todo es color de rosas, una de esa tardes en las cuales disfrutabamos de la compañía del otro llegó a la tribu alguien que no esperaba.Y no noté su presencia hasta que en medio un beso, esos que hacían que pierda la noción del tiempo, se escuchó un grito ahogado a lo lejos.Me separé bruscamente de Hans y no podía creer lo que estaba viendo.Era Anna,que se aproximaba a nosotros a toda prisa.

Ver la expresión en el rostro de mi hermana hizo que se me rompiera el corazón.Estaba furiosa y sin dudas no estaba preparada para esto.Me giré para ver a Hans que estaba confundido.

Era uno de esos momentos en los cuales deseas que te trague la tierra o simplemente desaparecer por un momento.

—¿Quién es ell...—me dijo pero Anna lo interrumpió

—¡No lo puedo creer!—gritó ella—Pensé sorprenderte al venir a visitarte,pero resulta que al final yo fui la sorprendida

—Anna, déjame explicarte—le dije tratando de tranquilizarla

—Yo he visto suficiente y créeme entiendo perfectamente

—No es lo que crees

—Yo creo que sí, estás con el chico que trató de asesinarnos a las dos,eso es lo que he visto y lo que creo

Entonces la expresión de Hans cambió.En ese instante supe que había recordado todo y Anna seguía mirándolo con odio.

—Hans—dije mirándolo, mis ojos se empezaron a cristalizar poco a poco

—Yo, lo siento.Lo siento mucho lo que les hice a las dos y sé que eso no tiene perdón—dijo él, podía oír el dolor en su voz.

—Y todavía te atreves a manipular a mi hermana como lo hiciste conmigo-le increpó Anna—eres un miserable

—Yo no he manipulado a nadie—le contestó Hans mirándola fijamente. Luego se dirigió a mi, sus ojos verdes estaban rojos y no reflejaban ninguna emoción.

—No sabes cuánto lo siento,de verdad—me dijo antes de irse

—No,Hans—contesté pero la voz no me salió.Las lágrimas empezaron a salir de mis ojos.

—Elsa, nunca lo pensé de ti—me dijo Anna cuando Hans ya no estaba.

—Él no es quién crees que es—contesté algo fastidiada

Me limpié las lagrimas y respiré profundamente para tratar de tranquilizarme.Pero no sería posible, pues todo lo que quería se acababa de caer en pedazos.

—Él es un villano—continuó Anna

—No lo es, tú no lo conoces

—No creo lo que estás diciendo—dijo Anna riendo sarcasticamente—Es imposible

—Estoy enamorada de él—confesé—y créeme cuando te digo que sí es posible

Al oír eso, Anna se quedó en silencio y se alejó del lugar.Me cubrí el rostro con las manos y me volví a sentar en el césped.De pronto, Nokk salió entre los árboles y se sentó a mi lado.Ese caballo siempre estaba cuando más lo necesitaba.Él me miró.

—Ni me preguntes que pasó—le dije apoyándome en él.

Entonces soltó un bufido.

—Creo que acabo de perder a dos personas que amo o por lo menos no pude evitar que las cosas se hayan puesto feas—admití