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A la mañana siguiente la pelirosa despertaba con un molesto dolor en todo su cuerpo, pero había otro punto muy importante a destacar... ¡¿Que hacia ella tan acurrucada con ese sujeto?! Aunque debía reconocer que no era para nada desagradable, es más era muy cómodo.

Debo estar loca, está dormido tengo una oportunidad de oro para escapar y en lugar de eso solo estoy pensando en que no sería tan desagradable volver a dormir con él- caviló en su mente, se levantó con cuidado deshaciéndose de toda esa ropa que estaba sobre su cuerpo, ropa que no era la suya, claro ese chico la cubrió con su ropa, por un motivo que ella desconocía, no necesitaba ayuda de uno de los habitantes del reino de agua y mucho menos del príncipe de estas tierras. Se levantó con esfuerzo y al ver a su alrededor notó que había árboles o bueno nubes con formas de estos. Y a la distancia vio el límite de las tierras del agua. Sintió algo envolviendo sus muñecas y al ver estas se encontró con un vendaje improvisado, frunció el ceño al deducir rápidamente que fue el sujeto que había dormido a su lado, pero su molestia no era esa, la verdadera razón fue sentir cierto desorden en su estómago y el que su corazón se acelerara por tan insignificante gesto. Se deshizo del vendaje y su atención volvió al entorno que la rodeaba.

_Que extraño- murmuró casi inaudible, sacudió su cabeza concentrándose en su objetivo: Escapar.

Pero un movimiento captado por su vista periférica le detuvo. El caballo del tipo estaba solo a unos metros, se acercó a paso decidido, se detuvo solo uno segundos al estar cerca esperando que el animal reaccionara de forma violenta o algo, más solo observó como este ignoraba por completo su existencia, con cuidado sacó su bolso del lomo del animal y al ponerlo en el suelo rebuscó en este con desespero hasta que encontró lo que buscaba, sacó la cantimplora para luego abrirla y beber su contenido, sintiendo como el líquido bajaba por su garganta y como el calor de este la hacía sentir más fuerte. Si una persona del reino de agua, aire o tierra bebía eso podría morir con apenas una gota, sin embargo para los habitantes del reino de fuego era como agua, era algo esencial para ellos.

Bien habiéndose terminado el líquido volvió a su objetivo principal, eso era en lo que tenía que concentrarse luego pensaría en los arboles de nubes lo cual era muy extraño, se aseguró de que el sujeto siguiera dormido para que así no le siguiera. A una distancia algo lejos de ella pudo ver que en el pasto azul había un círculo negro e inmediatamente supo que eso lo había ocasionado ella el día anterior.

Sin perder el tiempo empezó a trotar en esa dirección. Sabía que no estaba muy lejos de los límites de esa tierra. Tenía conocimiento de que sus pertenencias quedaban en el lomo del caballo donde el sujeto que permanecía dormido había viajado el día anterior pero solo era ropa y algunas otras cosas, sería poco lo que perdería, dudaba mucho de que su espada estuviera ahí así que no valía la pena el riesgo de quedarse y buscarla

Sasuke por su parte despertaba sintiendo que el pequeño cuerpo que había estado acurrucado con él toda la noche ya no estaba a su lado, abrió sus ojos de golpe para descubrir que efectivamente la chica había escapado, había asegurado el día anterior a que su costumbre de levantarse temprano no le fallaría, sin embargo hacer uso de su habilidad elemental lo había agotado y a causa de esto su cuerpo le había jugado una muy mala broma.

Chasqueó su lengua con fastidio y se levantó presuroso, quitó toda la ropa que lo cubría para levantarse y mirar a los lados buscando indicios de la chica, no encontró nada pero al dar un vistazo a su lado derecho pudo ver un bolso que él conocía, y a unos pasos de este su caballo, corrió hacia el bolso presuroso y por encima de la ropa encontró la cantimplora, se preguntó que liquido contendría al sentir un poco de calor cuando estuvo a punto de tocarla, sacudió su cabeza despejando su mente, cerró el bolso y se apresuró en aproximarse al equino, subió el bolso de la chica y se apresuró en volver sobre sus pasos para recoger la ropa que había utilizado como sabana. Al estar todo listo subió al caballo y sin perder tiempo se dirigió nuevamente a las tierras unidas.

🔥💧Río Ardiente💧🔥Donde viven las historias. Descúbrelo ahora