❝Dazai's The Type Of Boyfriend.❞

[021]

Dazai es el tipo de novio que

Le avergonzaria que vieras las cicatrices que hay debajo de sus vendas.

— ¿Verdad o reto?

Era viernes por la tarde, tú habías salido del trabajo temprano, en cambio tu pareja había abandonado a su perrito esclavo (Atsushi) en una importante misión.

Sabías cuan estresante y tedioso podía llegar a ser el trabajo de tu novio, por eso cada viernes se había vuelto como tradicion beber sake y conversar, o en eate caso divertirse un poco.

— Te reto a que te desprendas de esa blusa que oculta las mil y un bellezas de tu cuerpo, mi bella flor de loto.— Pronuncia Dazai coquetamente mientras bebia un poco de sake.

Negaste con la cabeza mientras reías para luego quitarte aquella blusa color azul cielo.

— Siempre haces lo mismo, Dazai.— Reprochas mientras te cruzas de brazos y lo inspeccionas.

Incluso si Dazai había recorrido cada tramo y pulgada detu piel, y adoraba cada lunar que poseías, tú no lo habías apreciado totalmente.

Cuando iban a la playa, Dazai siempre usaba camisetas abotonadas ocultando su torso y brazos.

— Estamos en la playa, Dazai. ¿No deberías al menos quitarte las vendas por unas horas?

— Si me las quito, tú y todas las chicas presentes pelearían por este galán.

O también cuando tenían intimidad, Dazai conservaba sus vendas y como de costumbre bromeaba para evitar el tema.

— Si me quito las vendas, hay dos opciones: O te desmayas, o llegaras al orgasmo más rápido al ver lo sexy que soy.

Bebiste sake mientras te inundabascon tus pensamientos, no sabías si era el alcohol que te había dado la valentía o si ya habías reprimido mucho tiempo aquella petición.

— Te reto a que te las quites.— Pronunciaste mientras señalabas con la mirada su torso y Dazai fruncia su ceño.— Las vendas.

Dazai permanecio en silencio unos instantes mientras su mirada estaba fija en ti. Sus vendas no era un tema del que le gustará hablar.

— ¡Oh, cariño!.— Coloca su mano en su frente fingiendo dramaticismo.— No quiero deslumbrarte con mi belleza.

Su mano estaba sobre un vaso de ceramica que poseía sake, colocaste su mano sobre la de él mientras le mirabas tiernamente.

Incluso si el fingia o bromeaba con aquel tema, sabías que en el fondo le dolía y en algún momento estallaria si no lo decía.

— Quiero correr el riesgo, cariño.

Sabía que aquel momento llegaría tarde o temprano, sin más comienza a desabotonar du camiseta blanca para quitarse su camiseta.

— ¡Oh, dulce t/n! Te desmayaras al observar las maravillas que ocultan esas fantasticas vendas.— Bromea mientras coloca su mano sobre uno de sus vendajes. Su mirada cambia a una más seria e incluso nostálgica.

Las vendas caen y con ello aquellas mil y un cicatrices, heridas, quemaduras y demás que ocultaban aquellas blancas vendas.

Tu mano llega a su torso para con delicadeza acariciar su piel. Siempre imaginaste aquello pero el verlo te oprimia el corazón.

— C...Cariño.— Se te quebro la voz al ver a detalle cada herida.

Seguro el dolor aún permanecia.

— Sé que son horribles, realmente atemorizan.— Ríe falsamente para tratar de ocultar cuanto le dolía aquello.

Hundiste tus brazos en el cuerpo del castaño, abrazandolo fuertemente para darle a entender que estarías con él con o sin cicatrices.

— Cuando trabajaba en la port Mafia, cada una de las misiones eran peligrosas, casi puedo asegurarte que cada misión en la que estuve dejo alguna cicatriz.— Comenzo a hablar en un tono de voz quebrado.— No te mentire, facilmente podía salir ileso si quería pero, quería y necesitaba tener algo que me recordara las atrocidades que hacia, cada alma inocente que tome, cada momento sangriento que coordine.

De tus ojos desprendian lagrimas con cada palabra que decía tu pareja. Dazai te tomo de los hombros suavemente y te alejo de él.

Por primera vez lo miraste de aquella forma; afligido, nostalgico y destrozado.

— Quería tener presente que no importará lo que hiciese, que la aspereza de la vida y el peso de la sangre estarían conmigo. Mis manos están manchadas de sangre y sé que soy un monstruo por todo lo que he hecho, pero quería que al menos tú no lo vieras.

— Escapula.— Susurraste levemente mientras acariciabas su espalda. Dazai te observo confundido.— Una vez leí que es lo que queda de las alas, tú eres mi ángel, Osamu.

Lo tomaste de las mejillas para que este te mirase fijamente, le sonreiste calidamente y con tus ojos cristalizados.

— He estado preguntándome un par de cosas.— Habla el castaño mientras acariciaba tus mejillas.— ¿Y si me perdono a mí mismo? ¿Y si me arrepintiera? Pero si pudiese volver atras en el tiempo, no haría nada de forma distinta. ¿Y si todas esas cosas que hice me trajeron aquí, contigo?

— Incluso si no hubieses hecho nada de tu pasado, estoy segura que volveria a enamorarme de ti.

Ambos se abrazan para permanecer en silencio y una calidez abrazadora.
Incluso aquellas cicatrices de Dazai, ya estaban sanando con tan solo estar junto a ti y estaba por seguro en aquel instante, que incluso la parte más horrible de él era admirada por ti y eso estaba bien, estaba excelente.

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Algo cursi y empalagozo para endulzar la vida un poquito.

Sé que les debo la continuacion del capitulo pasado, but necesito suma inspiración para hacer un lemon ya que no soy muy buena jajaja.

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¡Nos leemos después!