✮Aᴄʀᴏss ɪɴᴛᴏ ᴍʏ ᴡᴇʙ✮ || Rᴇʏᴛᴇʀ Sᴛᴏʀʏ ﹙Pᴇᴛᴇʀ Pᴀʀᴋᴇʀ x Rᴇʏ Sᴋʏᴡᴀʟᴋᴇʀ﹚

Capítulo III

Para Peter todo era nuevo, la decisión que había tomado, por suerte tenía el contacto con el Star Menso (Peter Quill) para averiguar si le prestaba una nave para poder viajar, estaba triste y Quill lo notaba en su voz pero por las insistencias del chico, Quill estaba decidido en prestarle una nave vieja pero muy útil y segura para Peter.

Quill: por favor niño, cuídate mucho, estás muy joven y me preocupa que andes solo por el espacio.

Peter:  estaré bien, lo prometo
* le medio sonríe * es algo que debo hacer

Quill : Es por Stark?

Peter : *cerraba los ojos ya que ese nombre le causaba conflicto al menor, trataba de aguantar las lágrimas que el mismo sabía que no tardarían en avecinarse, pero se hacía el fuerte ante el forajido *
Por el y por muchas cosas más, necesito un espacio, estoy bloqueado, estoy deprimido, no puedo estar así Quill *decía casi sollozando *

Quill: tranquilo chico, se lo difícil que fue tu vida después de la muerte de... *se corrigió rápido * pero tu eres un muchacho con un corazón de oro Peter, yo se que tu puedes salir de esta, y de muchas más situaciones, para un muchacho de 15 años, es impresionante como has madurado, y si te hace sentir mejor, yo no creo que seas un asesino *le sonríe tiernamente abrazándolo * te la voy a prestar pero por cualquier cosa, háblame, no quiero que te pase nada ni los vengadores quieren eso *

Peter: muchas gracias Quill, enserio muchas gracias y ntp, voy a estar bien *le ofrece una sonrisa *

El joven arácnido decide subir a la nave, algo había aprendido más aparte se dejó guiar por su sentido arácnido, como realmente debería ser llamado, a el le irritaba que le llamasen punzada, encendió el motor para despegar, viendo los posibles destinos para visitar, el quería nuevas experiencias, nuevos retos pero gracias al chasquido de Thanos, se le arruinó esa posibilidad cuando desapareció en Titán en los brazos de Tony, en el mapa buscó planetas y apretó uno al azar para poner la nave en piloto automático.

El joven de los ojos triste como cachorrito buscaba fotos de su mentor y el, no podía contener las lágrimas, lo extrañaba, necesitaba su guía, y más que nada estaba enamorado pero estaba consciente de que nunca iba a ser correspondido, dado que el Sr Stark solo lo veía como un pupilo hasta su hijo lo llegó a considerar, pero a Peter le destrozaba lo que le hizo MJ, no fue el engaño lo que le dolió sino que esculcara sus cosas con malicia y revelar su secreto más oculto ante Brad.

Se había distraído pero se dio cuenta que a la nave se le acababa el combustible e iba a chocar en aquel planeta a oscuras, tal vez el fin del hombre araña y de Peter Parker, en la luna estelar de Endor, la nave se estrelló y el muchacho estaba herido y yacía inconsciente.

Rey, se encontraba en aquel planeta cuando escuchó un estruendo fuerte, agarró su sable y fue a investigar lo ocurrido lo más rápido que pudo hasta encontrar una nave Milano y un joven en el suelo que yacía inconsciente en aquel lugar, se notaba que era un menor de edad por su rostro tan suave y tan delicado, sus pestañas tan finas, estaba claro que el joven tenias facciones de una niña con todo el respeto y lo hacía ver tierno ante los ojos de la Jedi, lo revisaba por sí había sufrido más daños, revisó manos, y la cabeza debido a que el joven usaba un traje que cubría gran parte de su cuerpo, así que manejo la maniobra de curación transmitiendo su fuerza al pequeño en su sien donde sangraba hasta hacerlo despertar, el joven tan inquieto estaba nervioso, ella entendía su reacción, estaba asustado, en un lugar no habitado según sus pensamientos de la joven.

Peter : Donde estoy?  *pregunta con un tono nervioso estando en brazos de aquella joven de ojos color avellana *

Rey : * lo ve ofreciéndole una sonrisa amable para no inquietarlo * no tengas miedo, no te haré daño. Te encuentras bien?

Peter : * la ve, le parecía bonita, muy bonita y con aquel tono suave de voz, se sintió más tranquilo * si, estoy bien. Excepto porque esta carcacha se le acabó el combustible *ríe tiernamente *

Rey: * ríe tiernamente con la ocurrencia del pequeño * Cómo te llamas y de donde vienes pequeño? Y que haces aquí?.

Peter: Soy Peter Parker y soy el hombre araña [que más daba si le revela su identidad, total ya le habían desgraciado la vida]
Soy de Queens, esto esta en América, Emmm Estados Unidos jejeje, *se acordó que no estaba en la tierra 616 * soy de la tierra 616 para ser más exactos *decía viéndola mientras que escurría sangre por su nariz *

Rey : *se dio cuenta de que el niño tenía sangre por la nariz y con un trapo se la quitó aunque viendo al niño, le parecía más tierno con las ojeras y la nariz con sangre* ya está, es que te escurría sangre por la nariz. Por cierto, mucho gusto Peter, me llamo Rey Skywalker, encantada de conocerte *le sonríe amablemente *

- Peter cayó en la cuenta que ella era una Jedi, y poseía el apellido Skywalker, eso lo sabía porque había leído cientos de cómics y coleccionaba las figuras de acción, no lo podía creer, estaba en uno de sus mundos favoritos, estaba sorprendido pero para no inquietar a Rey decidió no decir nada.

Peter : * le sonríe tiernamente * mucho gusto en conocerte Rey, oh respondiendo a tu pregunta del que hago aquí, es que.... Quise escapar, escapar de todo *bajaba la mirada* todo se me fue de las manos.

Rey :*conmovida por la reacción del pequeño, lo interrumpió * Peter, debemos irnos de aquí, ya es muy tarde. Te puedes parar?. *intenta ayudarlo a pararse pero a pesar de que puso estar el niño de pie por un instante, la joven Jedi pensó que el chico pudiese estar cansado, decidió cargarlo *
Vamos pequeño no, esta lejos donde me ubico, no te preocupes la nave estará bien, tengo combustible para echarla a andar.

-, La joven Jedi poseía una fuerza impresionante que aguantaba al pequeño Peter con aquel traje metalizado, el diseño la tenía impresionada, en el trayecto, ambos iban platicando, Rey desde que perdió a Ben, no tenía ganas de hablar con casi nadie ni siquiera por Finn que aunque se comprometió a entrenarlo, eran pocas las palabras que cruzaba con el, pero nunca se había sentido tan bien acompañada, aquel niño era una gran persona contando anécdotas, más aparte sabía escuchar lo que ella tenía para contarle, ese niño estaba comenzando a ganarse el cariño de la joven.