Con Johnny fui un poco más severo. Volví a verlo cuando estaba apunto de entrar de nuevo a clases, había pasado tiempo desde la primera visita que le hice a mi padre en nuestra casa. El estaba serio, no podía leer su expresión. Fisicamente no solo estaba cambiado por la recuperación del incidente, sino que también no estaba sonriendo, me alegraba verlo así. Tomó su mochila, no desayunó como usualmente y ni siquiera se despidió de su mamá y se fue. Seguí observando a Johnny los siguientes días que iba a la escuela, su rutina nunca cambiaba, días sin color y muy aburridos, hasta cierto punto me dolía, despertar, ir a la escuela, dormir; despertar, ir a la escuela, dormir. Johnny no era Johnny. Era muy gris ahora. Asi que decidí hacer algo finalmente.
El estaba dormido en clase, tenía depresión, dormir siempre ha sido un síntoma, y el jamás se ha dormido en clase. Se veía tan hermoso, pelo ahora en su color natural colgado hacia atrás de su oreja, sus pestañas largas y delgadas perfectamente alineadas con sus cejas café oscuro, pero tenía una expresión muy rara, pense que estaba teniendo una pesadilla.
Abrí la ventana y dejé que el viento trajera pétalos de las flores de lo árboles y entrara hasta el salón, coloque uno de los pétalos en su mejilla. Johnny despertó por el toque pero naturalmente no me vio. Se quedó viendo confunso el pétalo pero supongo que necesito todavía más para que sepa que estoy con él.
Al terminar la clase ,Johnny era el único que quedaba como siempre, él guardaba sus cosas cuando cogí su libreta detrás de él y la tiré lo más lejos que pude, a él ni siquiera le importó y solo la recogió como si nada; pero cuando se estaba enderezando de levantarla me agache a su altura y le robe un beso. Lo sintió ¡claro que debió sentirlo! se asusto y puso sus labios en su boca. Si yo todavía seguiría con vida, jamás me atrevería a hacer algo como esto. Johnny me miraba pero sin enfoque en su vista, como si mirará a la nada. Me acerqué a su lado y le susurré al oido cuanto lo quería, comenzé a decirle cuanto lo lamento por todo lo que sucedio y cuanto lo extraño. Sin saber como empezé a llorar, me sentía más vulnerable que nunca, me sentía con ganas de terminar todo esto, terminar este dolor y el río vino a mi mente, las ganas de seguirlo me invadieron como un éxtasis pero vi la cara de Johnny, estaba perplejo, no sabia si me escuchaba o no. Tome su mano y lo besé de nuevo, toqué su cara, acaricié sus nudillos, sostuve su mirada, le di palmaditas en la cabeza y toque su pecho. Lo quería tocar, no me había dado cuenta de cuanto lo extrañaba. Era perfecto, la luz entrando directo a su cara de la ventana mientras los pétalos de las flores pasaban a un lado de sus ojos, cuando el viento dejó de soplar y los pétalos dejaron de caer, Johnny me miró a los ojos...me miro y pronunció mi nombre.
No sé como Johnny pudo verme primero que mi padre. Algo que descubrí con el tiempo, es conforme mis emociones son más fuertes sin importar de que clase, puedo ejercer más poder sobre las cosas y personas. Algo que use muy bien a mi favor pues Johnny comenzó a estar bien. Comenzó a mejorar, al día siguiente que llegó a la escuela después de verme estaba feliz. Seguí tratando de comunicarme con el como pude, dejaba rosas por donde fuera, nuestras fotos que tenía en su escritorio se las ponía en la cama, saca la bici de su cochera y la dejaba al alcanze de su vista, y cuando Johnny me hablaba, me ponía en donde fuera un espejo con la esperanza de que me viera otra vez. Estabamos bien, Johnny vió esto como un milagro, el que yo todavía siguiera comunicandome con él y lo protegiera, le dió un tremendo alivio y quitó parte de la culpa con la que cargaba. Me hablaba antes de dormir y me agradecía que estuviera aquí, pero Johnny no lo pudo dejar así, ¡esque nadie de los que conozco lo deja así!
Siguió siendo más feliz, divertido, volvió a hacer el Johnny de siempre, empezó a hablarle a las personas, empezó a comer, a salir con sus amigos, empezó a...empezó a salir con chicas, ¡otra vez! Pense que estaba loco, ¿¡cómo tuvo el corazón de seguir adelante y olvidar a su mejor amigo?! Comenzó a hablarme menos por las noches, dejó de ver mis señas que le enviaba, dejo de pensar en mi, ¡volvió a olvidarme! Estaba perdiendo mi cabeza de nuevo cuando me habló otra vez después de mucho, me ilusioné un poco la verdad, pero luego...el empezó a decir cosas raras como: muchas gracias...perdón por todo...espero que estés bien donde estes...no necesitas seguirte preocupando por mi...tú...tú ya te puedes ir y descanzar en paz que yo estaré bien.
¡¿Por quién me toma este estúpido idiota?! ¿¡Él piensa que hice todo esto por qué creé que soy un tipo de ángel guardián?! Es el mismo que mi papá, ambos tan descorazonados, ambos tan olvidadizos, olvidadizos de mi. Johnny se alejó con una sonrisa depués de esa charla, se alejó sintiendose bien consigo mismo porque pensó que yo me iría en paz. Mi corazón nunca había estado tan destrozado como hoy, pero no importa ahora, ya no más...
Comenzé a volverlo loco de a poco a poco, me convencía a mi mismo de que hacía todo esto para que no me olvidara, traté de convencerlo a él también. Comenzé a meterle ideas en su cabeza y distraerlo de clases. Le susurraba cosas horribles con la esperanza de que escuchara algo de lo que le decía, lo despertaba todas las noches moviendo cosas de su lugar y haciendo ruidos horribles. Poco a poco me dejó entrar en su mente. Él estaba cansando y confundido trató de hablar conmigo preguntandome si era el causante de todo y que parará, no entendía por que hacía todo esto y porque seguía aquí, pero yo solo estaba empezando. Johnny trató de ignorarlo y por momentos lo lograba, su mente se despejó más cuando consiguió una novia. Pero para entonces yo ya había entrado en su mente. Puse terribles pesadillas cuando dormía cada noche sobre ella, las pesadillas normalmente eran yo haciéndola sufrir física y mentalmente a ella mientras Johnny miraba, cosas asquerosas y con violencia gráfica extrema. Él no podía con ellas, se levantaba siempre cansado y asustado, no podía concentrarse en clases y tampoco tenía paz cuando llegaba a casa. Cuando salía en citas con ella, me asegura de que soñara sus peores miedos pues lo conocía muy bien. Nunca pare de ponerle pesadillas, eventualmente lo llevaron con un doctor y psicólogo pero nunca hubo explicación ni cura. Para ese entonces sabía que yo lo causaba.
Conforme el tiempo avanzó y el también trató de hacerlo, yo me volví un poco más fuerte debido a su miedo, nuevos amigos, nueva novia, más terror que incrustarle. Encontré una manera de hacerlo soñar despierto con nuevos terrores, alcanze un nuevo nivel cuando hice que él no supiera la diferencia entre la realidad y fantasía; aún cuando estaba despierto, hacía que viera horrores que le pasaban a la gente enfrente de él. Él tuvo suficiente, hizo la misma estupides de mi padre, llamó espiritistas y religiosos, uso un show que terminó muy mal para él, él ahora me odiaba, me reprochaba y me quería fuera de su vida. Yo solo regresaba a la galería y esperaba que se calmara y volvía días después. La vida siguió así hasta que se graduó; le pidió a una chica que huyera con él para siempre de ese lugar, esa chica fue de la que se enamoró por primera vez, la que nunca olvidó jamás.
La noche que se iban a escapar, yo esperé por ella, ella lo esperaba en el carro cuando me aparecí. No use mucho la verdad, solo tiré la gasolina del carro y ella solo tuvo que fumar. Solo estaba herida en el hospital como las citas de mi papá pero nada grave, solo estaba herida eso es todo. Pero gracias esto Johnny comprendió mi mensaje. Él supo que nunca lo dejaría, y haría de todo por que supiera que sigo aquí...haría de todo.
Esa misma noche yo estaba un poco confundido de hecho, no sabía si Johnny me hablaba o estaba hablando solo, pero sus palabras eran por primera vez en mucho tiempo dulces pero a la vez me dolían.
—Mi dulce Tae...yo....yo no sé pero..¡oh dios! ¡¿en qué te has convertido?! mi dulce Taeyong, mi dulce e inocente niño...—él lloraba, pero yo no dejaba de pensar en como me dijo, "mi dulce Taeyong", pensé que por fin estaba empezando a aceptarme, pero luego escuché un ruido estrepitoso, mis oidos se volvieron sordos por un momento y volteé. Johnny tenía un hoyo en la cabeza con sus ojos clavados en mi. Su cuerpo cayó al suelo con un fuerte sonido al caer la pistola de su mano. La sangre estaba en la pared manchando el cuadro de donde entro y salgo de este mundo. Su mamá corrió a toda prisa y casi se desmaya cuando entra. Gritos desgarradores escaparon de su boca mientras yo caminaba ligero hacia el cuadro, nunca dejé de ver ese punto, pisé su cuerpo en mi camino al llegar al cuado pero claro él ahora no sentía, el ahora era nada...nada de Johnny quedaba en él.
Jamás sentí tanta claridad como hoy. A medida que avanzaba nunca miré atrás y a otro lado que no fuera el cuadro. Mientras entraba, la mamá de Johnny gritaba por ayuda con llantos lastimeros, cuando fui desapareciendo a la galeria, escuche como me maldecía y me daba la culpa a mi. Ella sabía que su hijo sufrió por mi. Caminé lento y seguro, ahora sabía lo que hacía, mi padre y Johnny nunca me olvidaron, me aseguré de eso. Abrí la puerta y vi el campo, el río y más allá el bosque. Miré fijamente el rió y seguí avanzando, el pasto en mis zapatos, el cielo rosado del campo y el sonido del agua me completaban plenamente. Entré en el río y dejé que me guiara, ahora no tenía miedo, había completado mi propósito, dejé que me aceptara el llamado que rechacé desde un principio; pero ya no más, ahora el río me llevará del otro lado, me dará paz al fin; ahora puedo irme al fin de este mundo sabiendo que no me desvaneceré en el olvido de mis seres queridos.
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Athazagoraphobia
FanficLa athazagorafobia es una fobia rara vez discutida. Significa el miedo a olvidar o el miedo a ser olvidado o ignorado.