Donde Naoko le lanzará cualquier cosa con cerezas en la cara a Shōto por 30 días para enamorarlo.
Primera publicación: Enero 2020
Segunda publicación: 21 de Junio 2020.
♥ gráficos by @spacerise portada por noahnoah jiji
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Todoroki mantenía la mirada fija en el suelo, sentía culpabilidad por el trato a la joven Naoko, no le gustaba ese sentimiento de haber sido malo con alguien que se estaba esforzando en llamar su atención.
Logró verla pasar delante de él. Analizó su rostro; pequeñas cerezas dibujadas en sus mejillas que no había notado, largas y rojizas pestañas. Ojos claros y un largo cabello rojo intenso. Suspiró.
La vista de Naoko pasó de él. Se sintió olímpicamente ignorado, ¿eso sentía ella? Ahora era peor ese sentimiento de arrepentimiento. ¡Dios! Llevaba casi una semana ignorándolo.
Comenzaba a molestarle, además, la culpa lo carcomía. Las cerezas no tenían la culpa.
—Nakamura-san —llamó. La pelirroja lo miró con la peor expresión de "Vete a la mierda, te pago los pasajes, insecto" que tenía.
—¿Qué mierda quieres bastardo mitad-mitad?
—Te juntas mucho con Bakugou —dijo alzando una ceja.
—Si es solo vas a decir eso, fue malo coincidir contigo —expresó mientras comenzaba a caminar alejándose de él.
—Espera, debo disculparme. Creo que no fue una forma buena de tratar tus sentimientos por mi, lamento eso y lo de tu familia. —Naoko volteó empujándolo contra la pared. Afirmó la corbata del bicolor.
—Vuelves a mencionar algo sobre mi familia y te voy a cortar el pene, además, haré que te lo tragues, ¿Cómo sabes eso? ¿Acaso la estúpida te lo dijo? Katsuki no te diría una mierda, mucho menos Monoma. El último es Izuku pero confío en que él no abrirá la boca —gruñó molesta, golpeó la cara de Shouto con su propia corbata—, tus espermatozoides están en juego, maldito bastardo.
La joven se marchó molesta. Él suspiró, por lo menos habían "entablado" una conversación, caminó de vuelta a su salón, topándose con Ochaco.
—Todoroki-kun, que lindo pin. ¿Donde lo compraste? —preguntó Uraraka.
—¿Pin? —consultó confundido.
—El de tu corbata.
Se despojó de la corbata y notó el pin de cereza. Entendió porqué Naoko lo había golpeado en el rostro. Según él, la pelirroja tenía una muy curiosa mala costumbre.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
