Sin compromisos | Deidara, Sasori Y Tu |

🍂03.00🍂

Un año más tarde.

16:23pm, Konohagakure.

El verano acababa, pero aún podían escucharse las chicharras cantar en un silbido constante que solo se detenía cada cierto tiempo. Cerca del lago era más común oírlas y yo era la primera en acostarse ahí, lejos de todo y todos, solo para perderme un rato en un recuerdo que nunca se terminaba de aclarar o simplemente no parecía ser mío, pero que sin embargo me traía paz al cuerpo.

—¿Otra vez aquí? —el cuerpo de Sakura hizo sombra a mi rostro, mientras que su voz tapó el sonido de las chicharras y con eso perdí el vestigio de ese recuerdo lejano que parecía nunca haber existido.

Suspiré.

—Solo quería tranquilidad. —se sentó a mi lado.

—Siempre fuiste muy melancólica, pero esto ya es deprimente. —abrí mis ojos para encontrarme con su verde mirada.

—Solo tenía sueño, no venía a hundirme en un pozo depresivo. —Sakura rió.

—Pozo depresivo o no, deberíamos hacer otra cosa como...

—Acosar al Uchiha no, por favor. —la corté antes de que terminara de hablar, lo que provocó un sonrojo.

—¡No acosaré a Sasuke! —puse los ojos en blanco y luego los cerré. —Tu también eres Uchiha, nunca me dijiste si eran parientes cercanos.

—No recuerdo mucho de mi rama familiar y Sasuke no recuerda haberme visto nunca en su infancia. Así que supongo que no somos parientes.

—Lo cierto es que nunca te vi en mi vida, pero todos me han dicho que viviste siempre en el clan Uchiha y en la masacre perdiste tu brazo. —instintivamente lo miré, ese miembro perdido a veces me traía una sensación fea, un recuerdo que nunca llegué a asociarlo con nada y que terminó pareciendo la memoria de alguien más. —Ya, Kokomi, dime dónde estuviste toda tu niñez.

Tuve una punzada en mi cabeza cuando una imagen de una aldea rocosa apareció, pero fue tan veloz que creí que era imaginación mía.

—Según recuerdo el Hokage tuvo que esconderme porque Itachi no me quería viva, logré escapar gracias a mi mamá que dio su vida por mí... —pero ese recuerdo era vacío, no me generaba sentimientos de dolor o algo parecido. —Así que recuerdo estar en una casa no muy lejos de aquí, mientras que la familia Inuzuka se encargaba de llevarme comida y todo lo necesario. Finalmente, el Hokage vino a buscarme y aquí estoy.

Sakura me miró un rato largo.

—¿Qué sucede? —pregunté cuando la incomodidad se apoderó de mi cuerpo.

—Ahora que lo noto, ¿Te has cortado el cabello? —sonreí, ahora mi pelo castaño oscuro estaba corto hasta el hombro.

—Hoy a la mañana. —anuncié —Muchas chicas creen que por ser Uchiha voy a quedarme con Sasuke para que el clan permanezca. Y me han acusado de llevar el pelo largo porque a él, supuestamente, le gusta. Y han dicho, de manera deliberada, que es un tipo de ritual de apareamiento de los Uchiha. —Sakura soltó una carcajada, pero noté su tensión. Ella debía pensar lo mismo... Bueno, la parte de conservar el clan, al menos. —Tu te ríes, pero a mí me llevó a cortar mi cabello solo para dejar de oírlas. Es molesto, ni siquiera me gusta Sasuke, por alguna razón tengo debilidad por los rubios.