¿Qué decides? | Kiba x Naruto Yaoi [2]

De regreso

- En las puertas de Konoha -

Naruto: Han pasado más de dos años...
Jiraiya: Así es...

Naruto deja su mochila en el suelo y sube un poste hasta la punta para observar el panorama de la aldea.

Jiraiya: Tan inquieto como siempre...
Naruto: Vaya, qué nostalgia. La aldea no ha cambiado nada. Aunque, ahora que lo veo, agregaron el rostro de la abuela Tsunade a la Roca Hokage. Me pregunto dónde estará Kiba...

Posterior a su encuentro con Sakura y Konohamaru, su conversación con la Hokage y su pelea a modo de entrenamiento con Kakashi, Naruto, al disponer finalmente de tiempo, decide buscar a Kiba.

- A las afueras de la aldea -

Hinata: Ehm...chicos, ¿y si hoy vamos a comer ramen?
Shino: ¿Ramen? Me recuerdas a Naruto.
Kiba: Jajaja, sí...Naruto...Esperen...Ese olor...¿Acaso no será...?
Shino: ¿De quién habl-
Kiba (interrumpiendo): Denme un momento, ya regreso.

Kiba se sube en Akamaru y deja el lugar de manera apurada.

Shino (indignado): Ni siquiera me dejó terminar...Al menos tú sí me escuchas, Hinata.

Shino se gira hacia Hinata, sin embargo ella ya se había ido tras Kiba.

Shino: Ah...otra vez...

- En algún lugar de Konoha -

Naruto: Uhm...tal vez esté en su casa. Vaya, ¿cuánto habrán cambiado Kiba y los demás?

Un Naruto distraído se ve repentinamente sorprendido por el Inuzuka y su gran compañero canino.

Naruto: ¿Eh? ¡¿Kiba?! ¡Qué bueno verte de nuevo!
Kiba: Reconozco ese olor...¡Naruto!
Naruto: ¿Enserio tuviste que olerme primero? Sigues siendo igual de raro...
Kiba: Jajaja, era broma, ven acá.

Kiba se baja de la espalda de Akamaru y recibe a Naruto con un abrazo que tras unos segundos concluyen al escuchar a Hinata acercándose.

Hinata (emocionada): N-naruto, estás de vuelta...
Naruto (sonriendo): Oh, hola, Hinata. Y ese es...¡¿Akamaru?! Vaya, está enorme. Antes solías llevarlo encima tuyo y ahora es todo lo contrario.
Kiba: Uhm...siempre hemos estado juntos así que yo no lo noto tanto.
Shino (entrando en escena): ¿Acaso se olvidaron se mí?
Naruto: ¿Quién eres?
Shino: Ha pasado mucho, pero al menos deberías recordar el aspecto de tus compañeros.
Naruto: Esa voz...sí, tú eres...te llamabas...¡Shino! ¿Cómo me voy a olvidar de ustedes? *con una gota en la frente*
Shino (irritado): A ellos los reconociste a primera vista.
Naruto: ¡¿Pero cómo quieres que te reconozca si tienes toda la cara tapada?!
Kiba (riendo): Oye, Naruto.
Naruto: ¿Qué sucede?
Kiba: Estábamos pensando en ir a comer ramen, ¿te nos unes?
Naruto: ¿De verdad? Por supuesto que sí. Vaya, hace tiempo que no he comido en Ichiraku...

El equipo Kurenai, acompañado de Naruto, se dirige al emblemático establecimiento, donde Naruto saluda al viejo Teuchi y su hija.

Teuchi: Oh, Naruto, hace mucho que no te veía.
Ayame: ¿Eh? Naruto, mira cuánto has crecido.
Naruto: Qué gusto me da verlos de nuevo.
Teuchi: Veo que viniste con algunos amigos. ¿Y bien? ¿Qué se les ofrece?
Kiba: Cuatro tazones de ramen, por favor.

Luego de haber cada uno con sus respectivos platos (Mientras Naruto y Hinata se habían acabado media docena, Kiba y Shino tan solo habían decidido comer un par), Shino se despide y deja el lugar, por lo que minutos después también abandonan el establecimiento y caminan hasta la casa de Hinata, donde la joven Hyuga se despide y deja a la pareja junto a Akamaru.

Naruto: Vaya, ya está oscureciendo, ¿quieres venir a mi casa?
Kiba: Oh, claro, ¿pero me acompañas un rato para dejar a Akamaru y entregarle algunas cosas a mi hermana?
Naruto: Bien, vamos.

Una vez llegaron a la casa del castaño, este entró con un paso acelerado seguido por Akamaru. Por otro lado, Naruto prefirió esperar afuera para no causar mucha molestia.

Naruto: Uhm...¿quién sería una buena opción como compañero? Tenemos que encontrar a Sasuke...

Al decir eso, una silueta posada sobre el techo del edificio responde dejando helado al Uzumaki.

???: Eso no será necesario...
Naruto: ¿Q-qué? ¿Quién eres?

Por más que intentara de distinguir de quién se trataba, Naruto no podía descubrir la identidad de la sombra pues yacía en la oscuridad, por lo que se frota los ojos. No obstante, al abrirlos nuevamente, ya no había nada ni nadie ahí.

Naruto (con ironía): Perfecto, ahora también veo cosas...

De repente, Kiba sale y ve a Naruto riendo con una cara confundida.

Kiba: ¿Pasa algo?
Naruto: Ah, no, nada nada. Vamos.