¿Qué decides? | Kiba x Naruto Yaoi [2]

Mal sueño

En medio del bosque, yace postrado sobre la hierba un rubio de ojos azules, que, producto de murmullos arrastrados por la brisa, abre los ojos aturdido. Seguidamente, se levanta  lentamente y lanza un suspiro. No es hasta que abre los ojos completamente cuando cae en la cuenta de dónde se encontraba.

Naruto: ¿Eh? ¡Eh! ¿Qué hago aquí?

Naruto empieza a recorrer el bosque en busca de alguna señal que pueda ayudar a su confundido sentido de la orientación. No es hasta que ve a lo lejos a alguien vestido con un kimono negro que aumenta la velocidad de sus pasos y grita para llamar la atención del individuo.

Naruto: ¡Hey! ¡Oye! ¡Aquí!

A pesar del volumen de su llamado, la figura parecía hacer caso omiso a cada una de las palabras que expresaba. Lo que empeoró la situación fue que, pronto, comienza a brotar una niebla espesa de ambigua procedencia, esto hizo que Naruto se desesperara aún más y corriera tan rápido como su cuerpo le permitía. Mas fue inútil, la tan densa niebla había hecho que Naruto no pudiese ver más allá de un metro de distancia.

Naruto (exhausto): ¡M-Maldición!

Aunque todo parecía perdido, la niebla se disipa en lo suficiente como para que el Uzumaki pudiese ver nuevamente al individuo del kimono. Al levantar la mirada, nota que este llevaba, asimismo, una máscara que le cubría el rostro casi en su totalidad. No obstante, aquello que más inquietaba al jinchuriki era que este permanecía inmóvil y no emitía sonido alguno.

Naruto (nervioso): O-Oye...

No pasó mucho tiempo hasta que, finalmente, el extraño se giró hacia Naruto. Su postura seguía inmóvil, aunque el ojiazul seguía sintiéndose incómodo e intranquilo. En el momento en el que Naruto decidió dirigirle la palabra, este levanta lentamente el brazo y se quita la máscara, revelando así de quién se trataba.

Naruto: ¿S-Sasuke? O- Oye... ¿sabes dónde estamos?

Mas no recibió respuesta del pelinegro, que ahora tenía una mirada fría pero perdida. Este tan solo acercó su mano a la empuñadura de su espada, sin embargo, se detuvo al sujetarla.

Naruto (angustiado): ¡¿Por qué no dices nad-

En un abrir y cerrar de ojos, Sasuke estaba a unos centímetros de él, con el brazo encima del hombro izquierdo del rubio y su cabeza por sobre el derecho.

Naruto: ¿S-Sasuke?

Frente a él, a unos metros, se hallaba Kiba, mirando la escena con desagrado y pena.

Naruto: ¿K-Kiba? ¡Kib-

El grito del Uzumaki se vio ahogado por la katana de Sasuke irrumpiendo en su abdomen.

Naruto: Ngh... S-Sasuke.

Por su parte, el Uchiha seguía inexpresivo a la situación; mientras que Kiba parecía haberse girado y emprendía su retirada.

Naruto: N-No... ¡K-Kiba!

Su vista comenzaba a nublarse mientras la figura del castaño va desapareciendo paulatinamente a lo lejos. Por otro lado, lo único que lograba escuchar eran unos cada vez más fuertes golpes y una débil voz de fondo, los cuales se esclarecen cuando Naruto abre los ojos y despierta sobresaltado.

Naruto (alterado): ¡M-Maldición! Vaya pesadilla...
Sakura (llamando a la puerta): ¡Naruto! ¡Levanta tu trasero de una vez!
Naruto: Oh, Sakura, ¡ya voy!

Naruto se dirige a la entrada y abre la puerta para recibir a su amiga, quien, impaciente, entra a la habitación jalando al Uzumaki de la oreja.

Naruto (adolorido): Ay, ay, ay. ¿Q- Qué sucede?
Sakura: ¡Tenías que haberte presentado a la organización del festival!
Naruto: ¡Es verdad! Lo olvidé...
Sakura (buscando entre la ropa de Naruto): Tienes suerte de que muchos se hayan ofrecido a ayudar, solo faltan algunos arreglos, así que ven rápido.

Sakura tira las prendas de Naruto a la cama, se despide y se marcha rápidamente del lugar.

Naruto (vistiéndose): ¡El festival quedará genial!

Ya con su característica vestimenta, Naruto abandona su apartamento para encaminarse a lugar del futuro festival.